Fidel Castro afirma en la clausura de la reuni¨®n de La Habana que la deuda es un c¨¢ncer que hay que extirpar
"La deuda es un c¨¢ncer que requiere operaci¨®n quir¨²rgica. Todo lo que no sea quir¨²rgico no sirve", afirm¨® el presidente de Cuba, Fidel Castro, al clausurar en la ma?ana de ayer (hora espa?ola) el Encuentro sobre Deuda Exterior de Am¨¦rica Latina y el Caribe, celebrado en La Habana. En su discurso, de dos horas y media, Castro reiter¨® su tesis de que la deuda externa latinoamericana es "impagable", y asegur¨® que "no nos la van a cobrar con armas nucleares. Las bombas podr¨¢n matar hambrientos, pero no el hambre y la miseria". A pesar del consenso generalizado sobre la necesidad de la uni¨®n latinoamericana, la reuni¨®n de La Habana finaliz¨® sin ning¨²n texto de conclusiones.
Como colof¨®n a cinco d¨ªas de intervenciones de diferentes delegados entre los 1.200 representantes de 17 pa¨ªses latinoamericanos y del Caribe, Castro neg¨® que la reuni¨®n haya sido convocada con el objetivo de mejorar la imagen de su Gobierno. Esa afirmaci¨®n es "una teor¨ªa peregrina, propia del sistema de ellos (capitalista)". El problema es demasiado serio como "para dejar que nos enga?en y que cree insidias", manifest¨®."Me pregunto", dijo, "c¨®mo van apagar los pa¨ªses latinoamericanos la deuda y c¨®mo van a mantener el nivel de subsistencia y se van a desarrollar". Al respecto expuso una serie de c¨¢lculos basados en los 360.000 millones de d¨®lares (casi 60 billones de pesetas) que adeuda Am¨¦rica Latina. "Si se pudiera contabilizar al ritmo del d¨®lar, se tardar¨ªa 11.574 a?os en hacerlo", se?al¨® entre otros ejemplos.
El problema del endeudamiento regional va unido al deterioro de los t¨¦rminos de intercambio entre los pa¨ªses en desarrollo y las naciones desarrolladas. Por ello, argument¨® el l¨ªder cubano, "se va a ampliar el abismo" al encarecerse los productos industrializados y abaratarse las materias primas. Asimismo, agreg¨® que el proteccionismo frena las aspiraciones de expansi¨®n de Am¨¦rica Latina al cerrarse los mercados en los pa¨ªses desarrollados. Un tercer factor que ha contribuido al formidable crecimiento de la deuda ha sido el gasto en armamento, que ha consumido muchas de las divisas provenientes del cr¨¦dito internacional, acot¨®.
Am¨¦rica Latina deb¨ªa alrededor de 80 millones de d¨®lares en 1979; cinco a?os despu¨¦s alcanzaba los 360.000 millones de d¨®lares, 25.000 millones m¨¢s de lo que adeudaban todos los pa¨ªses del Tercer Mundo en 1979. Si embargo, coment¨® el presidente cubano, si se condonan las deudas pero no se alcanza un nuevo orden econ¨®mico intei nacional y una integraci¨®n latinoamericana en ¨¦l, "no ganamos nada", pues las causas del endeudamiento, deterioro de los t¨¦rminos del intercambio, proteccionismo, y armamentismo, subsistir¨ªan.
Ir m¨¢s all¨¢ que Per¨²
Refiri¨¦ndose a la tesis del nueva presidente de Per¨², Alan Garc¨ªa, de destinar el 10% anual de las exportaciones para atender el servicio de la deuda, indic¨® que "no resuelve el problema". Seg¨²n sus c¨¢lculos, si se aplicara en toda la regi¨®n durante un per¨ªodo de gracia de 20 a?os la f¨®rmula del primer mandatario peruano, al final Am¨¦rica Latina adeudar¨ªa algo m¨¢s de dos billones de d¨®lares.
Castro critic¨® agriamente que el gasto mundial en armamento sume un bill¨®n de d¨®lares anuales, superior a la totalidad de la deuda del Tercer Mundo (900.000 millones de d¨®lares). Ante esta situaci¨®n, propuso concienciar a la opini¨®n p¨²blica de los paises ¨ªndustrializados de Occidente en la reducci¨®n de esos gastos, ya que "la mayor preocupaci¨®n del mundo industrializado es la guerra". "?sa ser¨ªa una t¨¢ctica correcta", opin¨®. No obstante, estim¨® que no ser¨ªa honesto por su parte excluir en ese planteamiento a los Estados socialistas, pero expres¨® que esos pa¨ªses "no quieren la guerra".
Concluy¨® su discurso, interrumpido en varias ocasiones por ovaciones de los asistentes que atiborraban el Palacio de Convenciones de La Habana, afirmando que "el objetivo del encuentro no era hacer un documento, sino crear conciencia sobre el problema de la deuda externa". La reuni¨®n de La Habana, a pesar del consenso en favor de la unidad latinoamericana, finafiz¨® sin ning¨²n texto de conclusiones, como consecuencia de las posiciones diversas para la soluci¨®n del problema de la deuda.
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