La lucha por la tierra en la Cisjordania ocupada
El esc¨¢ndalo de las tierras expoliadas en la Cisjordania ocupada por Israel aumenta d¨ªa a d¨ªa. El ¨²ltimo implicado es el general de reserva Jacob Aknin, ex director de Admnistraci¨®n del Suelo en Israel, que ha sido llamado por la polic¨ªa y a quien se ha pedida que explique la forma en que ciertas tierras, pertenecientes a ¨¢rabes palestinos, fueron adquiridas por especuladores israel¨ªes. La polic¨ªa investiga cientos de denuncias de granjeros palestinos, que afirman haber sido despose¨ªdos de sus tierras de forma fraudulenta.Todo comenz¨® en 1979, cuando el Gobierno del dirigente del Likud Men¨¢jem Beguin vot¨® un decreto por el que se autorizaba la adquisici¨®n por particulares de tierras en territorio ocupado.
La finalidad de esa ley era dar un nuevo impulso a la colonizaci¨®n israel¨ª en Cisjordania, al introducir en ella a la iniciativa privada. Beguin sab¨ªa ciertamente que la ley en cuesti¨®n iba a ser explotada por los especuladores sin escr¨²pulos -que manipulaban y con frecuencia enga?aban sin verg¨¹enza a los colonos palestinos y por los compradores israel¨ªes ingenuos, que no pensaban m¨¢s que t¨² enriquecerse, enarbolando la bandera del sionismo colonizador.
El resultado fue que los israel¨ªes, seducidos por magn¨ªficas par celas de tierra, relativamente baratas, sobre las colinas alejadas de toda contaminaci¨®n, compraron y pagaron al contado. Los propietarios imaginarios frecuentemente hab¨ªan muerto hac¨ªa tiempo, o se hab¨ªan expatriado, es decir fueron inventados. Cuando el verdadero propietario vio llegar las primeras excavadoras israel¨ªes, que cruza ban sus campos y trazaban rutas sobre su terreno, puso una denuncia, pero sin resultado.
Durante m¨¢s de dos a?os, casi 500 denuncias transmitidas a la polic¨ªa por el procurador general para que fuesen investigadas no fueron tocadas. La raz¨®n invocada fue la falta de personal. Visto el n¨²mero de denuncias y la importancia de la investigaci¨®n, la polic¨ªa no ten¨ªa los efectivos necesanos para abordar ese asunto. Durante dos a?os se prepar¨® (?) una unidad especial que iba a ser encargada de la investigaci¨®n.
En realidad, los jefes de la polic¨ªa no eran animados precis¨ªamente por el Gobierno para que des¨¦nredasen ese nido de avispas. Se tem¨ªa, sobre todo en las altas esferas, que personajes importantes del Likud fuesen implicados a ra¨ªz de la investigaci¨®n policial. Varios centenares de denuncias permanecieron intactas por eso en sus carpetas hasta la llegada al poder del ministro de policia laborista, Haim Bar Lev, que, alentado por el consejero jur¨ªdico del Gobierno, el profesor Zamir, orden¨® a la polic¨ªa desempolvar, los informes enterrados y poner manos a la obra. Se han producido ya tres detenciones: un ¨¢rabe palestino y dos israel¨ªes, sospechosos de falsificaci¨®n, extorsi¨®n, amenazas y pr¨¢cticas fraudulentas.
El comerciante ¨¢rabe en tierras detenido, Ahmed Ouda, que se hizo millonario en varios a?os, afirma, sorprendido: "los ¨¢rabes me quieren liquidar porque yo he hecho vender tierras ¨¢rabes a los israel¨ªes. Ahora, los israel¨ªes quieren mi ruina... No entiendo nada". Hace dos o tres a?os se le ense?aron -para ayudarle a superar las posibles dudas- varias cartas oficiales, que proven¨ªan del Ministerio de Agricultura israel¨ª y que daban luz verde a las compras masivas de tierras ¨¢rabes.
En 1983, el inspector del Estado expuso a una comisionparlamentaria un informe secreto donde precisaba que dejas 7.000 hect¨¢reas de tierras adquiridas durante el a?o precedente, 5.000 lo hab¨ªan sido de forma irregular.
Hoy, el pastel se ha descubierto. El viceministro de Agricultura de ese momento, Michael Dekel, un ultra del Likud, y su adjunto Avi Tsur, varios importantes empresarios de la construcci¨®n, abogados de renombre y ahora tambi¨¦n el general de reserva Yaakov Aknin, director entonces de la Administraci¨®n de tierras, est¨¢n en el banquillo.
Como varios miembros eminentes del Likud pueden estar implicados, el ministro sin cartera, Ariel Sharon e Isaac Shamir, viceprimer ministro y ministro de Asuntos Exteriores, al frente de otros dirigentes de ese partido, denuncian la "campa?a antisionista" del ministro de la polic¨ªa laborista y piden la dimisi¨®n del consejero jur¨ªdico del Gobierno, el independiente Zamir.
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