La preocupaci¨®n por la sangre

El problema del SIDA entre la comunidad hemof¨ªlica espa?ola se relaciona ¨ªntimamente con los end¨¦micos bajos niveles de donaci¨®n de sangre y plasma en nuestro pa¨ªs. Espa?a s¨®lo se autoabastece de plasma y hemoderivados en unos niveles cercanos al 10% del preciso. El resto se importa, fundamentalmente de los Estados Unidos, importaci¨®n que supone un gasto cercano a los 7.000 millones de pesetas al a?o.Para llegar al autoabastecimiento nacional de plasma, recomendada por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, la Asociaci¨®n Espa?ola de Hemofilia (AEH) viene exigiendo, ya desde 1982, la creaci¨®n de un Centro Nacional de Plasmaf¨¦resis. La plasmaf¨¦resis consiste en obtener, por centrifugaci¨®n, el plasma a partir de la sangre de un donante. Una vez conseguido el plasma se vuelven a trasfundir los gl¨®bulos rojos al donante.

En Espa?a los bancos de sangre dedicados a plasmaf¨¦resis "son escasos y pr¨¢cticamente todos ellos con donaci¨®n de tipo remunerado, lo que aumenta el riesgo de transmisi¨®n de enfermedades", seg¨²n reconoce la propia Direcci¨®n General de Salud P¨²blica, del Ministerio de Sanidad y Consumo. Los an¨¢lisis realizados al plasma de estos donantes remunerados han dado positivo en el test del SIDA en cerca del 25% de los casos.

La obtenci¨®n de plasma por plasmaf¨¦resis supone para el donante perder una o dos horas de tiempo mientras se completa todo el proceso. Por ello, la Asociaci¨®n cree que la Administraci¨®n sanitaria deber¨ªa remunerar de alguna forma este tiempo perdido, por ejemplo mediante desgravaci¨®n fiscal, como ocurre en otros pa¨ªses. El Ministerio de Hacienda siempre se ha mostrado remiso a este tipo de medidas, al pensar que supondr¨ªan un aumento del fraude fiscal.

Para prevenir la transmisi¨®n del SIDA a trav¨¦s de la sangre, el plasma y los hemoderivados, el Ministerio de Sanidad piensa establecer diferentes medidas, de las que destaca la pr¨®xima promulgaci¨®n de un Real Decreto sobre hemodonaci¨®n y hemoderivados.

La principal medida que contemplar¨¢ dicho Real Decreto es la prohibici¨®n taxativa de la donaci¨®n retribuida de sangre. Junto a ello se implanta un sistema de autoexclusi¨®n de donantes con riesgo de transmisi¨®n de SIDA. Tal sistema consiste en que sea la propia persona que va a donar sangre quien se excluya si pertenece a un grupo de riesgo.

Prueba obligatoria

Junto a ello, se establece la obligatoriedad de la realizaci¨®n del test de detecci¨®n que determina si una persona ha estado en contacto con el virus que causa el SIDA. Estos an¨¢lisis son coordinados por el Centro Nacional de Microbiolog¨ªa, Virolog¨ªa e Inmunolog¨ªa Sanitarias de Majadahonda (Madrid).

En los centros de obtenci¨®n de plasma por plasmaf¨¦resis de donantes remunerados, las medidas que el Ministerio de Sanidad estima pertinentes son, entre otras, la implantaci¨®n del sistema de autoexclusi¨®n y la obligatoriedad de efectuar el test a todos los donantes, excluyendo para la fabricaci¨®n de hemoderivados todo aquel plasma que resulte positivo.

El Ministerio de Sanidad exige tambi¨¦n a los centros y laboratorios de fraccionamiento y producci¨®n de hemoderivados, la realizaci¨®n de la prueba a todas las unidades de plasma de procedencia nacional. As¨ª mismo, se exige un certificado que acredite que dicha prueba ha sido realizada al plasma importado.

El mayor problema se plantea por la existencia de remesas de plasma y hemoderivados anteriores al comienzo del control y la aplicaci¨®n de la prueba. Seg¨²n el Ministerio de Sanidad se ha empezado a aplicar la prueba de: detecci¨®n del virus a estos productos desde el pasado mes de abril.

Sin embargo, seg¨²n Enrique Mart¨ªnez de Galinsoga, secretario general de la AEH "es falso. que se hayan empezado a analizar el plasma y otros hemoderivados preexistentes". Hasta el momento, se est¨¢ llevando a cabo la autoexclusi¨®n de donantes, pero la aplicaci¨®n del test a todos ellos se presenta problem¨¢tica, por el alto coste econ¨®mico que significa, ya que cada prueba, que comercializan diferentes laboratorios, cuesta unas quinientas pesetas. Seg¨²n Miguel ?ngel de Huerta, jefe de organizaci¨®n de la Hermandad de Donantes de Sangre de Madrid, "los test est¨¢n preparados, en todas las residencias sanitarias, pero apenas se han empezado a hacer porque costar¨ªa mucho dinero".