Los l¨ªderes pol¨ªticos, convertidos en un zool¨®gico de marionetas
La s¨¢tira del 'Bebete show', uno de los espacios m¨¢s populares de la televisi¨®n francesa, podr¨ªa ser suprimida durante la pr¨®xima campa?a electoral
El programa de m¨¢s ¨¦xito de la televisi¨®n francesa (el espacio humor¨ªstico Cocoricocoboy) puede ser suprimido durante la pr¨®xima campa?a electoral, prevista para marzo de 1986. Motivo: incluye una parodia, llamada Bebete show, en la que unas marionetas ridiculizan amablemente a los principales personajes pol¨ªticos del pa¨ªs, incluidos el presidente de la Rep¨²blica y los l¨ªderes de la oposici¨®n.
"Si nos exigen que suspendamos el programa, lo suspenderemos, pero protestaremos, porque es absurdo que se considere que nuestra s¨¢tira es incompatible con un per¨ªodo electoral", afirma el creador de Cocoricocoboy, St¨¦phane Collaro.El Bebete show hace las delicias de los telespectadores franceses todos los d¨ªas, de lunes a viernes, 15 minutos antes de que comience el telediario de las ocho de la tarde en TF-1. Las marionetas representan animales con rostros de pol¨ªticos: Fran?ois Mitterrand es una rana; Raymond Barre, un oso; Jaques Chirac, un ¨¢guila; el comunista Georges March¨¢is, un cerdo, etc¨¦tera. Collaro acaba de incorporar al primer ministro Laurent Fabius (una ardilla) y al l¨ªder del sindicato comunista CGT, Henri Krasuki (un cangrejo, con gorra y colilla entre los labios).
El programa es sat¨ªrico, pero se mantiene siempre en tono amable, m¨¢s moderado que su hermano mayor, el programa de marionetas brit¨¢nico Spitting images, en el que, la cr¨ªtica era mucho m¨¢s sangrante. En el Bebete show no hay insultos ni agresividad, hasta el extremo de que las personalidades caricaturizadas est¨¢n encantadas de aparecer en el programa, porque, en el fondo, aumenta su popularidad.
Todos contentos
Mitterrand afirma que ¨¦l, personalmente, no se identifica con una rana (quiz¨¢ le hubiera gustado m¨¢s ser un le¨®n), pero reconoce que su marioneta es "simp¨¢tica". Barre est¨¢ muy satisfecho con su imagen de hogare?o oso de peluche, y ¨²nicamente Georges Marchais se mosque¨® un poco al principio al verse asimilado a un cerdo rosa de largo pelo negro."Nunca hemos tenido presiones pol¨ªticas" explica Corallo, convertido en el humorista m¨¢s famoso de Francia, por delante incluso del conocido Coluche. "Creo que todos est¨¢n contentos. Querr¨ªamos incorporar m¨¢s personajes, pero el problema est¨¢ en la f¨¢bricaci¨®n de las marionetas, aparatos de m¨¢s de tres kilos de peso dif¨ªciles de manejar".
El dise?ador, Alain Duveme, estima que hasta ahora ha logrado acertar con la caricatura de los personajes, pero que cada vez se hace m¨¢s dif¨ªcil. Otros humoristas, inas c¨¢usticos, le acusan de ser demasiado complaciente. "Krasuki no deb¨ªa ser un cangrejo, sino una rata, y Fabius, un beb¨¦ foca con los ojos siempre llorosos", se?ala Yves Got.
Simp¨¢ticos y antip¨¢ticos
Collaro dice que no quiere que se identifique a los pol¨ªticos con animales simp¨¢ticos o antip¨¢ticos. Krasuki se ha convertido en un cangrejo simplemente porque nos permite un juego de palabras. Fabius, en. una ardilla, porque va a estar todo el rato acumulando el dinero de sus compa?eros". Otros, menos bienintencionados, afirman que Krasuki es un cangrejo porque tiene un par de enormes pinzas con las que coger ranas.La imitaci¨®n de las voces es tambi¨¦n caricaturesca. El actor encargado de dar vida a las marionetas, Jean Roucas, afirma que el m¨¢s dif¨ªcil de imitar fue Fabius, hasta el extremo de que renunci¨® a ello y acabaron por ponerle simplemente una voz t¨ªpica de dibujos animados. "No fue mala idea, porque Fabius, de verdad, parece un dibujo animado japon¨¦s, una especie de Marco,siempre tan bueno y moderado", explica, ri¨¦ndose, uno de los marionetistas.
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