Madrid contar¨¢ dentro de dos a?os con una mezquita junto a la M-30

Las obras para la construcci¨®n en Madrid de un centro c¨ªvico cultural isl¨¢mico, que contar¨¢ entre sus, instalaciones con ba?os ¨¢rabes y una mezquita, se iniciar¨¢n en el primer trimestre del a?o pr¨®ximo, con una duraci¨®n de dos a?os, junto al centro funerario municipal, al lado de la M-30. El dinero, 1.700 millones de pesetas, ser¨¢ aportado por el rey Fahd de Arabia. Un equipo de arquitectos polacos es el autor del proyecto seleccionado, en un concurso entre 455 aspirantes.

El arquitecto Rafael de la Hoz, consejero desde 1976 del grupo promotor del complejo cultural y religioso, explica que sus colegas polacos han querido recoger en el trabajo premiado las ra¨ªces de la arquitectura hispano-¨¢rabe.En un plazo de dos a?os, los madrile?os que atraviesen la M-30 se habr¨¢n acostumbrado a escuchar a trav¨¦s del minarete las llamadas a la oraci¨®n del imam y los ni?os del barrio de la Concepci¨®n podr¨¢n estudiar ¨¢rabe cerca de casa, darse un ba?o en un hamann o consultar escritos originales isl¨¢micos en el interior de un edificio singular de patios porticados y constru¨ªdo a base de ladrillo y m¨¢rmol de tonalidad rosa.

1.500 pares de zapatos

Las personas de religi¨®n musulmana dispondr¨¢n en la mezquita, orientada en direcci¨®n a la Meca, de una sala de abluciones, un almac¨¦n con capacidad para 1.500 pares de zapatos y un remanso de silencio y de paz donde meditar, separados los hombres de las mujeres. El centro c¨ªvico musulm¨¢n contar¨¢ tambi¨¦n con tiendas de recuerdos, biblioteca, sala de exposiciones, sala de recepciones, un auditorio y un aparcamiento subterr¨¢neo.La idea de buscar un lugar que sirviera como punto de encuentro y lugar de culto para los cerca de 10.000 mulsumanes que viven en Madrid parti¨® en 1976 del decano del cuerpo diplom¨¢tico, el entonces embajador de Arabia Saud¨ª, Nasser Almancour. El embajador cuenta como colaborador en el proyecto con el arquitecto de 61 a?os Rafael de la Hoz, cuyo ¨²nico m¨¦rito, seg¨²n sus propias palabras "es el de ser cordob¨¦s". De la Hoz: autor de obras tan dispares como la c¨¢rcel de j¨®venes de Alcal¨¢-Meco y el palacio de exposiciones de la Costa del Sol, fue premio Nacional de arquitectura en 1961 y ha recibido tambi¨¦n la medalla de Arquitectura Sovi¨¦tica por la realizaci¨®n de un programa de viviendas sociales.

Las embajadas ¨¢rabes acogieron favorablemente la idea. Se convoc¨® entonces un concurso internacional en el que participaron 455 equipos de arquitectos de todo el mundo. Paralelamente, el rey Juan Carlos se interesa por el proyecto. La venta de los terrenos, propiedad del Ayuntamiento, se cierra por el precio simb¨®lico de una peseta. Eraalcalde Juan Arespacochaga, hoy portavoz del Grupo Popular en el Senado.

En el concurso participaron arquitectos y equipos de 44 pa¨ªses. El jurado, integrado por por un marroqu¨ª, un espa?ol, un egipcio un finland¨¦s y un japon¨¦s, se re¨²ne en Madrid el 4 de febrero de 1980 y decide otorgar el primer premio a un equipo polaco.

Proyecto polaco

La selecci¨®n debi¨® ser dif¨ªcil entre m¨¢s de 400 proyectos presentados por profesionales paquistan¨ªes, peruanos, belgas, japoneses, indonesios y brasile?os, entre otros. Rafael de la Hoz afirma que muchos de los proyectos presentados eran magn¨ªficos, y destaca la calidad de los trabajos de algunos japoneses. Sin embargo, los dos primeros premios fueron para equipos polacos. El proyecto ganador, realizado por Jan Czarny, Jolanta Singer-Zemla y Marek Zemla, ser¨¢ dirigido por un equipo espa?ol, que a¨²n no ha sido designado.El dise?o elegido es, en opini¨®n de Rafael de la Hoz, "un reflejo de la fusi¨®n de la arquitectura tradicional isl¨¢mico-espa?ola y la tecnolog¨ªa actual". El complejo ser¨¢ amueblado con aportaciones de los distintos pa¨ªses ¨¢rabes.