Un debate fallido sobre Galicia en 'La clave'
Acostumbrados como est¨¢n a un cierto maltrato hist¨®rico tradicional por parte de la meseta, los gallegos pueden llegar a agradecer obviedades tan at¨ªpicas como el hecho de que un debate sobre su pa¨ªs en TVE se desarrolle sin referencias a las meigas, a la Santa Compa?a o a la bonanza de marisco.En esa elusi¨®n del t¨®pico est¨¢, sin duda, la ¨²nica aportaci¨®n de alg¨²n inter¨¦s que el pasado viernes hicieron los invitados al coloquio del programa de la segunda cadena de TVE La clave, organizado con el, quiz¨¢s excesivo, prop¨®sito de dar a conocer por dentro la autonom¨ªa de Galicia.
La confusi¨®n de origen sobre el planteamiento de esta ermisi¨®n de La Clave, que fue, sin duda, demasiado globalizador si se tiene en cuenta la fecha preelectoral en la que fue emitido, podr¨ªa dar alguna de las claves para entender tanto los incidentes que lo precedieron como el escaso nivel de un debate que lleg¨®, en bastantes mas ocasiones de lo que ser¨ªa razonable a los l¨ªmites mismos del tedio.
Mon¨®logos
En la pr¨¢ctica, la heterog¨¦nea mezcla de, por un lado, representantes pol¨ªticos y, por otra, representantes llamados sociales, todos all¨ª en nombre de una abstracta, conciencia gallega, hizo que se formasen, espont¨¢neamente dos grupos perfectamente diferenciados dentro de un mismo coloquio: de una parte, los candidatos de los partidos pol¨ªticos, empe?ados en ofrecer extractos seleccionados de sus programas, y de la otra, los economistas y los historiadores, que se inclinaban m¨¢s hacia la exhibici¨®n de su lenguaje academicista que a la ilustraci¨®n e informaci¨®n de la audiencia.El debate se transform¨® as¨ª en una sucesi¨®n de aburridos mon¨®logos, que sirvieron de veh¨ªculo para el tratamiento, inevitablemente superficial, de casi todos los temas recurrentes cuando se habla de Galicia y de los gallegos.
Resulta llamativo, sin embargo, que algunas cuestiones b¨¢sicas, como son el elevado ¨ªndice de abstenci¨®n electoral que existe en Galicia o el caciquismo rural, fueran despachadas por los participantes en el coloquio con frases t¨®picas y de compromiso, cuando no con alusiones evasivas al pasado hist¨®rico.
Ni siquiera el secular problema de la emigraci¨®n, que tuvo un menos que discreto portavoz en el presidente del Centro Gallego de Buenos Aires, Juan Bouzo, ocup¨® una parte sustancial de la tertulia televisada, que fue dedicada fundamentalmente a las discusiones de problemas t¨¦cnicos y de estructura econ¨®mica.
La ausencia de un representante de Alianza Popular y la exclusi¨®n del debate de alguien capaz de asumir con su voz la conciencia cr¨ªtica radical, que podr¨ªan suponer representantes de los grupos pol¨ªticos nacionalistas de izquierda, sugieren la ¨²nica explicaci¨®n convincente de la falta de calidad y hasta de inter¨¦s de este debate, que si lo calificamos como fallido es porque lo fue, y de manera evidente, en sus pretensiones de explicar a los gallegos y al resto de los espa?oles las claves de lo que, est¨¢ sucediendo en la comunidad aut¨®noma.
Seguro que no faltar¨¢n quienes opinen que las meigas andaban de por medio en esta edici¨®n gallega de La clave.
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