Richard Cottrell

Si la fiesta taurina le pareci¨® siempre un juego cruel, su asistencia a seis corridas el pasado mes de julio, acompa?ando a un equipo de la BBC brit¨¢nica que realiz¨® un reportaje sobre el tema, han terminado de afianzar su horror por este espect¨¢culo de "in¨²til tortura". Espect¨¢culo que, seg¨²n Richard Cottrell, miembro del Partido Conservador brit¨¢nico, diputado en el Parlamento Europeo, nacido en una peque?a localidad pr¨®xima a Bristol hace 42 a?os, tendr¨¢ que acabar cuando Espa?a ingrese en la CEE.

Richard Cottrell mantiene, como buen brit¨¢nico, una actitud escasamente apasionada a la hora de ese "espect¨¢culo atroz"atacar que produce, a juzgar por sus palabras, espanto y sorpresa en toda Europa. Sentado en un peque?o sill¨®n del hall del hotel Palace, Cottrell, que participa estos d¨ªas en las jornadas de estudio que ha organizado en Madrid Alianza Popular con los conservadores europeos, considera que al menos, en medio de todos los perjuicios indudables que le esperan a Espa?a dentro de la CEE, habr¨¢ una ventaja importante.' "Ias corridas no durar¨¢n demasiado tiempo cuando Espa?a est¨¦ realmente en Europa". Y ello porque "si bien la CEE no dispone de ninguna posibilidad de atacar la fiesta de los toros directamente indirectamente este espect¨¢culo entra en conflicto con tantas disposiciones legales de la comunidad que dif¨ªcilmente se mantendr¨¢ por mucho tiempo". Disposiciones que no han afectado al deporte de la caza en sus variantes m¨¢s crueles acabar¨¢n, sin embargo, dice Cottrell, con un discutido y antiguo espect¨¢culo que levanta una barrera demasiado s¨®lida entre Espa?a y el resto de Europa. Acabar¨ªan as¨ª los toros, e innumerables pr¨¢cticas llenas de crueldad que mantienen los espa?oles con los animales, y que figuran minuciosamente detalladas en un informe elaborado por la Federaci¨®n Internacional para el Bienestar de los Animales,

Para Cottre-II, que encuentra m¨¢s importante para Espa?a su permanencia en la OTAN que el ingreso en la CEE, este ¨²ltimo paso dado por el Gobierno espa?ol "ha sido un grave error, precisamente ahora que la comunidad atraviesa una profunda crisis econ¨®mica". "Nadie sabe en Espa?a lo que le espera cuando el ingreso sea un hecho real". Y cuando dice "nadie", Cottrell incluye no s¨®lo al Gobierno socialista, desprovisto de fuerza, en su opini¨®n, sino a la propia Alianza Popular, a los sectores industriales, agr¨ªcolas, empresariales, al pueblo espa?ol en suma. El "lamentable" ejemplo de Grecia -"hoy sumida en un colapso econ¨®mico"- debe ser, en su opini¨®n, un acicate para que los pol¨ªticos espa?oles renegocien cuanto antes todos los aspectos adversos del tratado sensiblemente peor, seg¨²n Cottrell, al firmado por el Reino Unido en 1971.

"Pero aun as¨ª", precisa, "para mi pa¨ªs la entrada en la comunidad fue un aut¨¦ntio shock. El mercado com¨²n no existe. Es apenas un club de naciones. ?Quiere usted creer que las industrias brit¨¢nicas tienen hoy m¨¢s barreras econ¨®micas para su penetraci¨®n en Europa que antes de nuestro ingreso en la Comunidad?". Pese a ello, al cabo de estos 14 a?os la econom¨ªa brit¨¢nica ha experimentado un la notable mejor¨ªa, que Cottrell valora como un logro exclusivo del Gobierno de Margaret Thatcher.