El M-19 se atrinchera con rehenes en el Palacio de Justicia de Bogot¨¢
El presidente de la Corte Suprema de Justicia de Colombia y varios magistrados permanec¨ªan esta madrugada en poder del grupo guerrillero del Movimiento 19 de Abril (M-19) que a las 11.40 de ayer (17.40, hora peninsular) asalt¨® el Palacio de Justicia de Bogot¨¢, produci¨¦ndose en la refriega con las fuerzas de seguridad la muerte de al menos 26 personas, entre ellas 18 guerrilleros, dos oficiales, tres soldados y tres civiles.
Tres horas despu¨¦s de iniciada la ocupaci¨®n, el Ej¨¦rcito reconquistaba los tres primeros pisos del palacio, en tanto que un grupo de guerrilleros se hac¨ªa fuerte en el cuarto piso, con un cierto n¨²mero de rehenes, entre los que se halla el presidente de la Corte Suprema, Alfonso Reyes Echandia."S¨®lo pedimos el alto el fuego", manifest¨® a este peri¨®dico Luis Otero, comandante del grupo asaltante. Acto seguido declaraba que "no pod¨ªa haber negociaci¨®n". En una conversaci¨®n telef¨®nica mantenida esta tarde con este informador, Otero, miembro del Comando Superior del M-19, ya hab¨ªa mostrado absoluta voluntad de resistir. "Si suben a este cuarto piso, moriremos todos", agreg¨®.
El Palacio de Bol¨ªvar, sede de la Corte Suprema colombiana, se halla en el centro de Bogot¨¢, apenas a unos 300 metros del Palacio Nari?o, en el que reside el presidente Betancur. Toda esta zona de la capital se hallaba anoche convertida en un campo de batalla, en la que el fuego de las fuerzas de seguridad converg¨ªa sobre las posiciones de los sitiados.
Al cabo de tres horas de asedio las tanquetas del Ej¨¦rcito penetraron en el primer piso del palacio, protegiendo a soldados y polic¨ªas, que fueron ocupando los pisos superiores, hasta arrinconar a unos 50 guerrilleros en el cuarto nivel con sus rehenes. La fuerza asaltante se denomina comando Iv¨¢n Marino Ospina, en homenaje al comandante del M- 19 ca¨ªdo en combate hace dos meses en Cal¨ª. Pese a las desafiantes proclamas de los guerrilleros, su situaci¨®n parec¨ªa desesperada esta madrugada, hora espa?ola, aunque jugaba en su favor un llamamiento de Reyes Echand¨ªa en favor de un alto el fuego que permitiera, seg¨²n sus palabras, salvar la vida de los rehenes.
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Los guerrilleros parec¨ªan esta madrugada decididos a resistir
Viene de la primera p¨¢gina
El grupo guerrillero exige que se publique en los principales diarios del pa¨ªs un comunicado de la organizaci¨®n sobre el proceso de paz en Colombia, que se divulguen las actas de la Comisi¨®n de Verificaci¨®n y Control y adem¨¢s que se les otorgue una hora en las emisoras de radio del pa¨ªs para exponer sus puntos de vista sobre el proceso de paz.
Como colof¨®n a estas exigencias, debe celebrarse un debate p¨²blico, a nivel nacional, sobre la marcha de los acuerdos pacificadores suscritos con el Gobierno en agosto de 1984.
El M-19 denomin¨® el asalto como "operativo Antonio Nari?o por los derechos del hombre". Con esto, dijo Otero, "queremos denunciar una traici¨®n de unos pactos que no se cumplieron", en alusi¨®n a los acuerdos de paz suscritos por la organizaci¨®n y el presidente de la naci¨®n, Belisario Betancur, en las localidades de Hobo y Corinto, al suroeste del pa¨ªs.
Paralelamente a la ocupaci¨®n del palacio, se sucedieron a lo largo de la tarde en Bogot¨¢ peque?as manifestaciones de algunas decenas de simpatizantes del M-19, que gritaban: "Con el pueblo, con las armas, al poder". Las detenciones fueron numerosas.
En una segunda conversaci¨®n con Luis Otero, a las 18.30 (0.30 de hoy, jueves, hora peninsular), se notaba el cansancio y una fuerte desmoralizaci¨®n en el comandante del asalto. No obstante, se mostr¨® dispuesto a resistir "hasta vencer", y manifest¨® que ten¨ªan suficientes alimentos y armas para combatir varios d¨ªas.
De todas maneras, Otero mostr¨® su decepci¨®n por las repetidas e in¨²tiles llamadas al Palacio del Gobierno para hablar con el presidente Betancur. Todas sin respuesta. "No hemos tenido ning¨²n contacto con el Gobierno", se?al¨® Otero.
El comandante guerrillero indic¨® adem¨¢s que no se piensa en la mediaci¨®n de otro Gobierno para resolver la situaci¨®n, que, por momentos, es m¨¢s dram¨¢tica para los asaltantes.
Otero inform¨® que forman parte del comando conocidos militantes del M-19, como Andr¨¦s Almarales y Ariel S¨¢nchez. El comandante se mostr¨® convencido de su acci¨®n y dijo estar "cumpliendo con el deber", pero con una voz desmayada y escasamente audible tras casi 10 horas de combates.
La sensaci¨®n de que la ocupaci¨®n del Palacio de Justicia formaba parte de un amplio plan guerrillero se vio reforzada tras el informe policial de la localizaci¨®n de dos camiones en una calle de Bogot¨¢ cargados de armas, que se presume eran del M-19.
El Congreso de Colombia repudi¨® ayer la ocupaci¨®n del Palacio de Justicia. "Es un atentado que afecta la dignidad de la naci¨®n entera", afirm¨® el senador Fernando Sanclemente Molina, del directorio nacional conservador. Alrededor de 70 senadores, de los 114 que integran la C¨¢mara alta del Congreso colombiano, integraron una subcomisi¨®n de seis miembros encargada de redactar una resoluci¨®n de condena a la ocupaci¨®n del Palacio de Justicia y del Consejo de Estado, m¨¢ximos organismos jur¨ªdicos del pa¨ªs.
El presidente de la Corte Suprema, Alfonso Reyes Echand¨ªa, que es uno de los rehenes, efectu¨® por medio de la Radio Cadena Nacional (RCN), un llamamiento a los sitiadores para que cesaran el fuego, y advirti¨® que, en caso contrario, "se puede producir una hecatombe".
Entretanto, el presidente Belisario Betancur prosegu¨ªa esta madrugada,junto a casi todos sus mi nistros, en una reuni¨®n urgente del Gabinete, el an¨¢lisis de la sItuaci¨®n y la adopci¨®n de las medidas necesarias que garanticen el orden p¨²blico, seg¨²n indic¨® un portavoz de la Casa de Nari?o.
La Casa de Nari?o es sede de la Presidencia colombiana, situada a unos 300 metros del Palacio de Justicia.
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