La reuni¨®n de Hannover y el proyecto Eureka

FRANKFURTER ALLGEMEINE

( ... ) Los ministros de 17 pa¨ªses, 18 incluyendo Turqu¨ªa, que se reunieron en Hannover han tra¨ªdo 300 proyectos de cooperaci¨®n tecnol¨®gica en Europa. Los franceses han perdido su entusiasmo originario; el m¨¢s claro promotor parece ser el ministro alem¨¢n de Exteriores. ( ... )

As¨ª, sus declaraciones sobre la necesidad de un patriotismo europeo ofrecen un contenido que con el tiempo adquiere el sentido de una verdad melanc¨®lica.

Los brit¨¢nicos afirman: "Bien, la industria debe desarrollar cosas en com¨²n con tecnolog¨ªa progresista que puedan comercializarse en el mercado libre europeo". ( ... ) Pero de una autoridad com¨²n para planificar la pol¨ªtica industrial de la tecnolog¨ªa de punta se puede esperar lo peor; junto a la terrible estructura del mercado agrario emerge el fantasma de otro monstruo. Puede uno fiarse poco del patriotismo europeo: si Kohl, Mitterrand o Thatcher lograsen ¨¦xitos positivos en un desarrollo conjunto, cada uno intentar¨ªa, como ocurri¨® en el caso del Airbus y el Ariadne, atribuir el ¨¦xito a sus propias naciones. As¨ª pues, cada uno querr¨¢ para su propio pa¨ªs la mayor¨ªa de los puestos de trabajo. Sin embargo, no es in¨²til tratar de animar a los europeos: parece fuerte y admonitorio que no s¨®lo los americanos sino tambi¨¦n los japoneses gastan m¨¢s dinero para su progreso que los europeos, cuyos recursos se dispersan. Ser¨¢, tal vez, la gran utilidad del proyecto Eureka la de poner ante los ojos de los europeos las estad¨ªsticas de las propias debilidades como primer reto de una lenta y vibrante idea.

5 de noviembre