Concluye la crisis israel¨ª al presentar Sharon sus excusas al primer ministro, Sim¨®n Peres

El primer ministro Israel¨ª, Sim¨®n Peres, acept¨® en la medianoche de ayer las excusas detalladas de su ministro de Comercio e Industria, Ariel Sharon, dando as¨ª por concluida la crisis pol¨ªtica que se abri¨® hace dos d¨ªas en Israel, cuando Peres anunci¨® que ten¨ªa preparada una carta de destituci¨®n para Sharon despu¨¦s de que ¨¦ste le hubiese dirigido numerosos Insultos y cr¨ªticas durante las ¨²ltimas semanas.

Sharon, al retractarse, dijo que sus declaraciones en el sentido de que Peres y el laborismo israel¨ª eran los responsables del derramamiento de sangre en los ¨²ltimos a?os en el pa¨ªs hab¨ªan sido mal interpretadas y aclar¨® que el responsable fue el terrorismo ¨¢rabe."Espero que estas declaraciones mejoren la atm¨®sfera", se?al¨® Sharon en una, conferencia de prensa celebrada despu¨¦s de que Peres aceptase sus excusas y aclaraciones.

El documento de excusas suscrito por Sharon fue elaborado por el rabino Itzhak Peretz, l¨ªder del partido ultraortodoxo Shas y ministro del Interior que, desde 48 horas antes, estaba haciendo de intermediario entre Sim¨®n Peres y Ariel Sharon, buscando un compromiso aceptable para las dos partes.

Antes de firmar el documento, Sharon, seguro del apoyo de sus amigos del Likud, dispuestos a abandonar con ¨¦l el Gobierno, no se hab¨ªa inmutado haciendo alarde de su flema y desprecupaci¨®n hasta el punto de pasar toda la ma?ana de ayer, en su granja del desierto del Neguev, situada al sur de Israel, lejos de la agitaci¨®n pol¨ªtica de Jerusal¨¦n.

Los observadores pol¨ªticos en Israel estiman que si Peres ha dudado, aplazando de hora en hora su decisi¨®n de enviar la carta fat¨ªdica a Sharon, fue porque trataba de buscar a toda costa una salida m¨¢s airosa al embrollo en el que se hab¨ªa metido al provocar una posible crisis de Gobierno

Firme en sus decisiones

Esta impresi¨®n era falsa, se?al¨® a este peri¨®dico un consejero de Peres. "Sim¨®n es un hombre muy paciente, pero tambi¨¦n muy firme en sus decisiones. No est¨¢ dispuesto a ceder si Sharon no retiraba, p¨²blicamente, las falsas acusaciones lanzadas sistem¨¢ticamente contra ¨¦l con el fin de destruir la confianza del p¨²blico minar la autoridad del jefe del Gobierno".Esta explicaci¨®n es la misma que ofreci¨® Peres ayer en Tel Aviv a cerca de un millar de miembros del Comit¨¦ Central del Partido Laborista israel¨ª. Peres refut¨® tranquilamente, una por una, todas las acusaciones de Sharon. La sala estaba repleta de c¨¢maras de una docena de emisoras extranjeras de televisi¨®n y de periodistas de todo el mundo.

Sharon hab¨ªa reprochado p¨²blicamente al primer ministro durante las ¨²ltimas semanas de llevar una pol¨ªtica "de tapujos" contraria al programa del Gobierno que . costar¨ªa mucha sangre a Israel", de recurrir a m¨¦todos de gobierno "irregulares y antidemocr¨¢ticos", de conducir al pa¨ªs por un camino "tortuoso y peligroso" y de ser "c¨ªnico e irresponsable".

Fueron una serie de graves acusaciones pronunciadas por la boca de un miembro, del Gobierno y dirigidas a su primer ministro. En definitiva, Sharon se comport¨® como si estuviese en la oposici¨®n, pretendiendo al mismo tiempo seguir en el Gobierno.

?Por qu¨¦, entonces, dud¨® Sim¨®n Peres? Seg¨²n una fuente pr¨®xima al primer ministro, Peres pretend¨ªa, actuando as¨ª, desprestigiar a Sharon ante la oponi¨®n p¨²blica israel¨ª.

Sharon trata de sustituir a Isaac Shamir como l¨ªder del Likud y aspira, sin guardar ning¨²n secreto al respecto, de dirigir los destinos de Israel.

"Este hombre es peligroso", dec¨ªa Sim¨®n Peres refiri¨¦ndose a Sharon durante la invasi¨®n de L¨ªbano y las matanzas de los campos palestinos de Sabra y Chatila. Exponiendo la falsedad de sus acusaciones Peres esperaba reducir a Sharon a una estatura pol¨ªtica m¨¢s modesta.

La crisis, afirm¨® Peres, fue preparada por Sharon, cuya campa?a contra la presidencia del Consejo de Ministros persegu¨ªa un triple objetivo. Primero, sabotear la iniciativa de paz de Peres; hacer estallar el Gobierno y, finalmente, impedir que el sistema de rotaci¨®n llevase a Shamir a la presidencia del Gobierno en octubre de 1986.