La 'guerra del agua' en la provincia de Castell¨®n causa enfrentamientos f¨ªsicos

El enfrentamiento que mantienen dos poblaciones de la comarca de la Plana Baixa de la provincia de Castell¨®n, Burriana y Monc¨®far, conocido popularmente como la guerra del agua, se ha radicalizado despu¨¦s de que en la madrugada del martes se produjeran los primeros enfrentamientos f¨ªsicos entre ambas comunidades. Los hechos se iniciaron cuando una veintena de habitantes de Monc¨®far agredieron a una brigada municipal de Burriana, que hab¨ªa destruido por mandato del Ayuntamiento de esta ¨²ltima poblaci¨®n cinco metros de la tuber¨ªa de conducci¨®n del agua del pozo de La Pedrera, situado en Burriana, hasta Monc¨®far.

La demolici¨®n de la conducci¨®n -construida con licencia del MOPU, pero declarada ilegal por el pleno del Ayuntamiento de Burriana- ha supuesto las primeras agresiones f¨ªsicas en un conflicto que, lejos de solucionarse, parece entrar ya en una din¨¢mica violenta con un enfrentamiento frontal entre dos pueblos vecinos. El origen del conflicto del agua entre estas dos localidades se inici¨® en 1976, aunque alcanz¨® su cota mas alta en los ¨²ltimos meses, ante el avance de la salinizaci¨®n de los pozos de Monc¨®far, sobreexplotados en los ¨²ltimos a?os. Esta salinizaci¨®n hace peligrar la agricultura de Monc¨®far, poblaci¨®n con 4.000 habitantes.La Brigada de Obras de Burriana tan s¨®lo pudo demoler cinco metros de tuber¨ªa dada la actuaci¨®n de los regantes de Monc¨®far, quienes llegaron a agredir a varios funcionarios municipales causando tambi¨¦n destrozos en algunos veh¨ªculos. Posteriormente, un centenar de vecinos de Monc¨®far, mayoritariamente mujeres, iniciaron un encierro indefinido en las dependencias del Ayuntamiento tras desalojar de su despacho al alcalde de esta localidad, el socialista Antonio Masi¨¢.

A mediod¨ªa de ayer continuaba el encierro de una treintena de mujeres en el Ayuntamiento como se?al de protesta ante lo que los vecinos consideran una postura poco en¨¦rgica del alcalde en la defensa de los intereses del pueblo.

Por otra parte, hay que se?alar que a ¨²ltimas horas de la tarde del martes cinco personas, participantes en los incidentes del pozo de La Pedrera y en el desalojo del alcalde de Monc¨®far, prestaron declaraci¨®n ante el titular del Juzgado n¨²mero 1 de Castell¨®n a ra¨ªz de las denuncias interpuestas ese mismo d¨ªa por los alcaldes de ambas localidades.

A la salida del juzgado, los agricultores de Monc¨®far, entre los que se encontraba el presidente de la Comunidad de Regantes, Joaqu¨ªn Recatal¨¢, dijeron que su actuaci¨®n en el pozo de La Pedrera contaba con el respaldo de todo el pueblo de Monc¨®far.

Peri¨®dicas reuniones

La radicalizaci¨®n de posturas en este conflicto llega despu¨¦s de que fracasara la intervenci¨®n en el mismo de las administraciones central y auton¨®mica. El pasado mes de septiembre, tras una reuni¨®n en el Gobierno Civil de Castell¨®n, se constituy¨® una comisi¨®n de seguimiento que qued¨® disuelta por la negativa de los regantes de Burriana a aceptar la soluci¨®n entonces propuesta, que pasaba por la cesi¨®n de agua de pozos privados a Monc¨®far, adem¨¢s de otro caudal procedente de la estaci¨®n depuradora de Burriana.Los agricultores de Monc¨®far han hecho p¨²blico un ultim¨¢tum a la Administraci¨®n en el sentido de que si en 48 horas no se repone la tuber¨ªa destrozada, ser¨¢n ellos quienes acometan esta obra. El alcalde de Burriana, el socialista Juan Sanchordi, se ha reiterado por otra parte en la voluntad de continuar con el derribo de la conducci¨®n para hacer cumplir as¨ª un acuerdo adoptado en pleno.