El fiscal Strassera hab¨ªa solicitado penas m¨¢s altas que las impuestas
El fiscal general de la C¨¢mara Federal de Apelaciones, Julio C¨¦sar Strassera, reclam¨® el pasado 16 de septiembre, para los nueve triunviros de las tres primeras juntas militares argentinas, penas generalizadamente m¨¢s altas que las impuestas.Strassera solicit¨® reclusi¨®n perpetua, m¨¢s la accesoria de reclusi¨®n por tiempo indeterminado para los ex presidentes Jorge Rafael Videla y Roberto Eduardo Viola, a m¨¢s de para los ex comandantes de la Armada, Massera y Lambruschini, y para el ex titular de la Fuerza A¨¦rea en el primer Gobierno de la dictadura, brigadier general Agosti.
La fiscal¨ªa pidi¨® igualmente 15 a?os de prisi¨®n para el ex presidente Galtieri y para el ex jefe de la Fuerza A¨¦rea de la segunda Junta, Omar Graffigna (siempre en libertad provisional y uno de los cuatro indultados); 12 a?os para el almirante Anaya y 10 para el brigadier Lami Dozo, ambos de la pen¨²ltima Junta Militar, que provoc¨® la guerra de las Malvinas.
Graffigna, Galtieri, Anaya y Lami Dozo han resultado absueltos por sus responsabilidades en su calidad de ex comandantes de arma aunque podr¨¢n ser nuevamente procesados por sus responsabilidades supuestas cuando se desempe?aban en cargos inferiores a las ¨®rdenes de cualquiera de las dos anteriores juntas militares.
La 'guerra sucia'
Al mismo tiempo, y por el desempe?o de esas mismas actividades previas a su responsabilidad gubernamental -ya cosa juzgada- permanecen expuestos a los reclamos judiciales de particulares por sus responsabilidades en la guerra sucia.Los abogados defensores ya han anunciado su intenci¨®n de apelar las sentencias ante la Suprema Corte de Justicia, por m¨¢s que observadores solventes y ante la generalizada clemencia de las sentencias estiman que nada podr¨ªa lograr con su recurso. El fiscal Strassera, que a la postre obedece a instrucciones del Estado, a¨²n no ha anunciado su intenci¨®n de recurrir el fallo aunque quienes le conocen saben que lo har¨ªa de buen grado. Har¨¢ -l¨®gicamente- lo que le ordenen, y eso reflejar¨¢ el sentir del Gobierno radical ante este fallo judicial.
En el ¨¢mbito de las Fuerzas Armadas, no ha transcendido ninguna reacci¨®n institucional y s¨ª la preocupaci¨®n por la elevaci¨®n al Consejo Supremo de las FF AA -m¨¢ximo tribunal castrense- de todo lo actuado para dilucidar las responsabilidades de los mandos subalternos.
La ¨²nica manifestaci¨®n callejera, en el centro de Buenos Aires, se produjo en rechazo de la sentencia, y los partidos se han pronunciado a trav¨¦s de las manifestaciones personales de sus l¨ªderes, pero no institucionalmente. Dirigentes radicales, l¨®gicamente, han acatado la sentencia como s¨ªntoma de normalizaci¨®n democr¨¢tica; los de la extrema izquierda peronista la han repudiado y otro tanto han hecho los dirigentes de los partidos de izquierda. El estado de multidivisi¨®n del movimiento justicialista hace imposible recabar una opini¨®n homog¨¦nea del primer partido de la oposici¨®n.
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