'Los ricos tambi¨¦n lloran', largo follet¨ªn mexicano para el desayuno

JOS? MARIA VILLAGRASA La producci¨®n mexicana Los ricos tambi¨¦n lloran, de 139 cap¨ªtulos de media hora de duraci¨®n, que inaugura hoy, a las 9.30, la ficci¨®n matinal televisiva, constituye una novedad en la programaci¨®n de Televisi¨®n Espa?ola. Las telenovelas de un dilatado n¨²mero de entregas y de f¨¢cturaci¨®n latinoamericana estaban pr¨¢cticamente vetadas en la oferta de Prado del Rey. Se ha precisado una demanda continuada de consumo de follet¨ªn para facilitar el acceso de estas particulares realizaciones.

El h¨¢bito a los seriales norteamericanos como Dallas, Dinast¨ªa y Falcon Crest, escaparates de lujo del modo de vida estadounidense, har¨¢ seguramente m¨¢s estimulante la recepci¨®n de Los ricos tambi¨¦n lloran. La concepci¨®n latina del melodrama en im¨¢genes tiene un aire decimon¨®nico que no posee su contrapartida anglosajona. La conciencia liberal-capitalista que se transpira en los conflictos de los Carrington, los Channing o los Ewing no tiene nada que ver con los problemas que plantean los protagonistas de la obra mexicana.El relato de esta producci¨®n de Televisa se desenvuelve en torno a la protagobista, Mariana Villarreal (interpretada por Ver¨¢nica Castro), hija de un hombre de buena posici¨®n, Leonardo, casado en segundas nupcias con Irma (Flor Procu?a), una ambiciosa mujer que somete a Mariana, ante laindiferencia paterna, a mil y una vejaciones. Al fallecer Leonardo, Irma expulsa a Mariana de casa. Don Alberto Salvatierra (Augusto Benedico), un rico hacendado, acaba acogiendo finalmente a Mariana en su hogar. Luis de Parra, un amigo del padre de Mariana, al cabo de un tiempo, anuncia que, en el testamento que posee, Mariana es la heredera absoluta de los bienes de Leonardo. Tras esta noticia, Irma maquina la eliminaci¨®n de su hijastra.

Sentimientos dispares

El baile intermitente de personajes y situaciones se adereza con los sentimientos y actitudes m¨¢s dispares de la actividad humana: la compasi¨®n y el perd¨®n, el despotismo, la riqueza y la pobreza, las miserias y las virtudes de los individuos. La telenovela mexicana cristaliza una narraci¨®n m¨¢s preocupada por los contrastes de la vida que por la competencia en las altas esferas financieras y los escarceos sexuales de los ejecutivos y clanes familiares. La poderosa compa?¨ªa Televisa es una consumada especialista en la elaboraci¨®n de telenovelas, que desparrama por la gran mayor¨ªa de cadenas de habla hispana de Am¨¦rica, tanto del Norte como del Sur. En Europa, las cosas se le han puesto m¨¢s dif¨ªciles. Las reticencias de los programadores y la competencia de un mercado m¨¢s exigente han frenado su introducci¨®n.

El ¨²nico pa¨ªs que ha permitido con m¨¢s alegr¨ªa la importaci¨®n de estos seriales ha sido Italia. La RAI ten¨ªa su estrategia de producci¨®n y emisi¨®n definida con los a?os.

El magnate Silvio Berlusconi, con Itali¨¢ 1 y Canale 5, se echaba en manos de las multinacionales norteamericanas. La Rete 4 (ahora propiedad de Berlusconi) r¨¦cog¨ªa y promocionaba el cat¨¢logo de la brasile?a Globo. Finalmente, Euro-TV, una organizaci¨®n que une estaciones de 19 regiones, se hac¨ªa con los derechos de las telenovelas mexicanas.

En 1984, Los ricos tambi¨¦n lloran fue elegida en Italia la mejor telenovela del a?o, y su estrella, Ver¨®nica Castro, la mejor actriz de este g¨¦nero. La popularidad de la protagonista se increment¨®, adem¨¢s, por la disputa entre Euro-TV y Rete 4 para obtener un contrato promocional en exclusiva, que gan¨® la segunda empresa.

Los ricos tambi¨¦n lloran se em¨ªte hoy, a las 9.30, por TVE-1.