Andrew Lloyd Webber

La compa?¨ªa de teatro del compositor brit¨¢nico Andrew Lloyd Webber, autor de comedias musicales tan conocidas como Evita o Jesucristo Superstar, ha empezado a cotizar este mes en la Bolsa de Londres, operaci¨®n que ha reportado al m¨²sico financiero unos 10 millones de libras (cerca de 2.200 millones de pesetas). La compa?¨ªa, valorada en 35 millones de libras (7.700 millones de pesetas), posee los derechos de autor de las producciones de Webber posteriores a 1979 y de todo lo que escriba en los pr¨®ximos siete a?os.

La compa?¨ªa del compositor, que da ahora los ¨²ltimos toques a su obra m¨¢s reciente, El fantasma de la ¨®pera, tiene el curioso nombre de The Really Useful Group, que podr¨ªa traducirse por El Grupo Verdaderamente Util. Webber, que pose¨ªa, hasta la venta de acciones, el 70% de la sociedad -reducida ahora a un 38%-, fund¨® el grupo en 1979. Roger Stigwood, el productor de los Bee Gees, es quien tiene los derechos sobre sus dos obras m¨¢s famosas y anteriores a ese a?o: Evita y Jesucristo Superstar.Nacido en Londres hace 37 a?os, se cri¨® en una casa situada sobre la estaci¨®n de metro de South Kensington, en una atm¨®sfera que ¨¦l mismo ha descrito como "extremadamente bohemia". Su pasi¨®n por la m¨²sica no es extra?a: su padre hab¨ªa sido director del London College de m¨²sica, y su madre era profesora de piano. A los ocho a?os ya produc¨ªa sus propios musicales en un teatrillo de marionetas. La m¨²sica la aportaba un viejo gram¨®fono.

A los 17 a?os conoce a Tim Rice, tres a?os mayor que ¨¦l, y la carrera art¨ªstica de los dos queda ligada. Cuando ¨¦ste decide marchar a Londres para intentar ganarse la vida con la m¨²sica, Lloyd Webber abandona sus estudios de historia en Oxford y le sigue. Ambos se hab¨ªan impuesto una misi¨®n, seg¨²n sus propias palabras: "Casi desde nuestro nacimiento hab¨ªamos estado oyendo que los brit¨¢nicos no pod¨ªan escribir m¨²sica, y quer¨ªamos de mostrar que eso es falso".

En la d¨¦cada de los setenta, Webber compone, junto a Tim Rice, las dos comedias musicales quiz¨¢ de mayor ¨¦xito en los ¨²ltimos a?os: Jesucristo Superstar y Evita. El propio Webber declar¨® que la idea de esta ¨²ltima obra se le ocurri¨® mientras viajaba en un taxi por las calles de Londres. El taxista hab¨ªa encendido la radio y Webber descubri¨® la historia de la mujer del general Per¨®n. Antes de bajar del taxi ya hab¨ªa deciddo escribir una comedia musical sobre la vida de Evita.

Esta decisi¨®n repentina permaneci¨® en cartel en los teatros de Londres durante m¨¢s de seis a?os, Y triunf¨® despu¨¦s en Broadway. De Jesucristo Superstar se vendieron m¨¢s de 10 millones de discos. Se convirti¨® en uno de los ¨¢lbumes m¨¢s,vendidos de todos los tiempos. Evita, en 1984, superaba ya la cifra de dos millones de copias vendidas. Entre ambas, su ¨²nico fracaso: el musical Jeeves, clausurado en Londres tras s¨®lo 47 representaciones. Esta casi clarividencia para el ¨¦xito convirti¨® a Andrew Lloyd Webber en el rey Midas de la comedia musical.

Tras el ¨¦xito de Evita, Lloyd Webber y Tim Rice dejan de colaborar durante ocho a?os, pues el primero afirma que necesita trabajar en completa libertad. En solitario escribe Cats (Gatos), basada en un libro de poemas para ni?os del poeta brit¨¢nico y premio Nobel de literatura T. S. Elliot. Al ¨¦xito de Cats, todav¨ªa en cartel en 10 teatros de ocho pa¨ªses, suceden el de Song and dance (Canta y baila) y el de su, hasta ahora, ¨²ltima obra: Starlight Express, estrenada a fines de 1984.

Triunfos que han hecho de Webber un hombre millonario, ya mucho antes de la venta de parte de sus acciones del grupo: dos publicaciones londinenses estimaron en 1984, que las obras del compositor hab¨ªan producido unos 100.000 d¨®lares diarios (cerca de 15 millones de pesetas).