Prosigue la lucha en Yemen del Sur, aunque el golpe de Estado parece abortado
Los combates posteriores al reciente intento de golpe de Estado en Yemen del Sur, ¨²nico pa¨ªs comunista del mundo ¨¢rabe, continuaban desarroll¨¢ndose ayer a mediod¨ªa en la capital, Ad¨¦n, aunque la intentona parec¨ªa haber sido abortada. Los golpistas, el ex presidente Abdul Fatab Ismail y el viceprimer ministro Al¨ª Antar -dirigentes hist¨®ricos de la lucha antibrit¨¢nica por la independencia de este pa¨ªs estrat¨¦gico, situado a caballo entre el mar Rojo y el oc¨¦ano ¨ªndico-, han sido ejecutados, seg¨²n revel¨® ayer la emisora oficial de radio, que difundi¨® un comunicado del bur¨® pol¨ªtico del Partido Socialista Yemen¨ª (PSY), en el poder.
A pesar de estas ejecuciones y de las de Ali Salem al Baid, viceprimer ministro encargado de la Administraci¨®n Territorial, y de Ali Chayeh, alto cargo del PSY, as¨ª como de las detenciones de sed?ciosos, la suerte del r¨¦gimen del presidente Ali Nasser Mohamed parecia aun incierta.En la capital suryemen¨ª prosegu¨ªan por segundo d¨ªa consecutivo, seg¨²n fuentes occidentales, los encarnizados enfrentamientos que, a veces con armas pesadas, libraban las dos ramas de un ej¨¦rcito dividido entre partidarios y adversarios del actual jefe del Estado y secretario general del PSY, ligeramente herido y acaso hospitalizado, seg¨²n se rumorea. Su no comparecencia ante los micr¨®fonos de Radio Ad¨¦n tiende a acreditar esta hip¨®tesis. Un diplom¨¢tico argelino, Lassal Hacine, result¨® muerto en los combates.
En el puerto de Ad¨¦n varios barcos eran pasto de las llamas mientras la Embajada de Italia inform¨® a su Gobierno que su canciller¨ªa hab¨ªa sido alcanzada por proyectiles, sin que hubiese que lamentar v¨ªctimas entre su personal, y el aeropuerto de la capital permanec¨ªa cerrado al tr¨¢fico, aunque al parecer bajo control de tropas leales, como tambi¨¦n lo estaba la radio local, que interrumpi¨® varias veces sus emisiones.
El comunicado, le¨ªdo justamente por la emisora estatal, precisa que la conspiraci¨®n, en la que estaban involucrados nada menos que el ex presidente e ide¨®logo del partido, Ismail, junto con el n¨²mero dos del r¨¦gimen, Antar, era de inspiraci¨®n derechista, una aseveraci¨®n tanto m¨¢s sorprendente puesto que ambos dirigentes eran conocidos por su ortodoxia comunista.
El influyente diario izquierdista beirut¨ª As Safir explicaba ayer los sangrientos sucesos de Yemen del Sur como una mera lucha por el poder pr¨¢cticamente carente de connotaciones ideol¨®gicas entre Ismail, que tras cinco a?os de exilio en Mosc¨² regres¨® hace 11 meses a Ad¨¦n y fue readmitido en el Comit¨¦ Central del PSY, y el presidente Mohamed, que fue su primer ministro hasta 1980, en que pas¨® a ocupar su puesto.
Ismail y Antar exigieron, al parecer, a su ex compa?ero de armas Mohamed, durante el ¨²ltimo congreso del partido ¨²nico celebrado en octubre, que renunciase por lo menos a uno de los dos cargos que desempe?a -secretar¨ªa general y jefatura del Estado-, para reducir su poder. A pesar de contar con el respaldo de la mayor¨ªa del PSY, no lograron su prop¨®sito.
Aunque los dirigentes marxistas palestinos George Habash y Nayef Hawatmeh llevaron a cabo entonces una mediaci¨®n, la tensi¨®n entre ambos grupos rivales fue en auge hasta que hace una semana, seg¨²n varias agencias del golfo P¨¦rsico -o el pasado lunes, seg¨²n la sovi¨¦tica Tass-, estallaron las hostilidades que, en opini¨®n de diplom¨¢ticos occidentales, s¨ª encierran diferentes opciones pol¨ªticas.
Mientras Mohamed es descrito como un l¨ªder pragm¨¢tico deseoso de mejorar las relaciones de su peque?o pa¨ªs, el m¨¢s pobre del mundo ¨¢rabe junto con Mauritania, con sus vecinos saud¨ª y noryemen¨ª, e incluso con Occidente, sin por eso renunciar a las relaciones privilegiadas con Mosc¨², sus dos adversarios eran partidarios de mantener la m¨¢s pura ortodoxia sovi¨¦tica.
Estrechar lazos con su hermano y vecino de Yemen del Norte puede significar para Ad¨¦n participar en la explotaci¨®n de los yacimientos petroleros de Mareb, sobre la frontera de ambos pa¨ªses, lo que le permitir¨ªan impulsar su desarrollo econ¨®mico, lo que, a pesar de la ayuda sovi¨¦tica, no han logrado los dirigentes suryemen¨ªes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- YPF
- Yemen del Norte
- Yemen del Sur
- Buques guerra
- Repsol
- Yemen
- Italia
- Petroleras
- Transporte militar
- Petr¨®leo
- Combustibles f¨®siles
- Armamento
- Europa occidental
- Pol¨ªtica exterior
- Prensa
- Defensa
- Materias primas
- Combustibles
- Energ¨ªa no renovable
- Empresas
- Europa
- Medios comunicaci¨®n
- Fuentes energ¨ªa
- Relaciones exteriores
- Econom¨ªa