El fiscal solicita 7 a?os para Albarr¨¢n, el toxic¨®mano que pidi¨® la reinserci¨®n social
JULI ESTEVE, Francisco Javier Albarr¨¢n, el heroin¨®mano que en febrero de 1985 se entreg¨® voluntariamente a la polic¨ªa confesando ser autor de dos delitos y pidiendo medidas de reinserci¨®n social, encara hoy en Valencia su primera cita con la justicia, con la que tiene pendiente un total de tres casos de robo con intimidaci¨®n. Como ya ocurriera en aquella ocasi¨®n, Patxi Albarr¨¢n confesar¨¢ abiertamente haber participado en el asalto a una sucursal de la Caja de Ahorros de Valencia en octubre de 1983, en donde consigui¨® un bot¨ªn de 217.000 pesetas.
El llamado caso Albarr¨¢n empez¨® el 17 de febrero del a?o pasado, cuando un heroin¨®mano habitual se present¨® en una comisar¨ªa madrile?a y confes¨® ser autor de dos delitos ya archivados por la polic¨ªa. La novedad en este caso era que Francisco Javier ped¨ªa ser curado, "porque la otra alternativa era chutarse una sobredosis o seguir delinquiendo para obtener dinero con que conseguir la hero¨ªna, que necesitaba cada vez m¨¢s". A esas alturas de su vida ya hab¨ªa perdido un buen empleo y dejado a su mujer y sus dos hijos.Albarr¨¢n tuvo aquel d¨ªa un momento l¨²cido y relajado y se dio cuenta de que su vida estaba "echada a perder". No fue el suyo un camino de rosas a partir de ah¨ª. Despu¨¦s de la confesi¨®n, pas¨® de la comisar¨ªa a la Direcci¨®n de la Seguridad del Estado. De all¨ª, al juzgado, y finalmente ingres¨® en prisi¨®n, donde fue localizado por dirigentes de las Juventudes Socialistas, interesados por su caso a partir de la publicaci¨®n de los primeros datos. Entre el Albarr¨¢n "delgado, demacrado, babeante y siempre abstra¨ªdo" que Nino Olmeda, responsable de toxicoman¨ªas en la direcci¨®n de las Juventudes Socialistas, encontr¨® en la c¨¢rcel y el actual media un abismo.
Fueron necesarios, no obstante, seis largos meses de prisi¨®n preventiva para que el peregrinaje de quienes le ayudaron hablan do con directores generales, ministros y jueces diese sus primeros frutos: Albarr¨¢n sali¨® en libertad condicionada el 1 de agosto, para ser ingresado en una granja de rehabilitaci¨®n en la sierra de Cazorla. Hab¨ªa sido necesario que Mario Albarr¨¢n, su hermano, y Nino Olmeda mantuvieran durante 15 d¨ªas una huelga de hambre. Tres meses despu¨¦s, como una terapia m¨¢s en su convalecencia, empez¨® a trabajar en el Centro de Investigaci¨®n y Desarrollo de Actividades del Ocio (CIDAO), entidad ligada estrechamente a las Juventudes Socialistas.
En el ¨ªnterin, Albarr¨¢n ha tropezado con sendas peticiones del fiscal para los dos delitos de los que se confes¨® autor: robos con intimidaci¨®n con una pistola simulada, con botines respectivos de 15.000 y 80.000 pesetas. La solicitud es de 15 meses en un caso y de cinco a?os y 400.000 pesetas de fianza en el otro.
Se declarar¨¢ culpable
Para el tercero de los casos, el que se juzga ahora en Valencia, el fiscal solicita la pena de siete a?os de prisi¨®n mayor. Javier Albarr¨¢n se declarar¨¢ culpable, pese a que, seg¨²n su abogado, Jos¨¦ Mar¨ªa Merlos, ning¨²n testigo ha reconocido a su cliente como autor de aquel robo en la sucursal de la Caja de Ahorros de Valencia, en octubre de 1983.
Albarr¨¢n encara el juicio con el temor de que de poco o nada sirva su actitud de los ¨²ltimos meses y haya de ingresar de nuevo en prisi¨®n, ambiente ¨¦ste nada favorable a la recuperaci¨®n de antiguos toxic¨®manos.
Pese a la confianza que en ¨¦l tienen depositada sus familiares y quienes en las Juventudes Socialistas se han convertido en sus padrinos, todos son conscientes de que la reca¨ªda, una vez en la c¨¢rcel, no es descartable en ning¨²n caso.
Jos¨¦ Mar¨ªa Merlos, el abogado, pedir¨¢ para su defendido una pena de seis meses y un d¨ªa de prisi¨®n menor, y espera que Francisco Javier Albarr¨¢n pueda salir en libertad condicional o cumpla la pena en un establecimiento privado de rehabilitaci¨®n, seg¨²n lo previsto en la legislaci¨®n vigente.
Albarr¨¢n ha declarado en Valencia que estaba nervioso ante el juicio y que entre sus proyectos est¨¢ el de buscar trabajo. Salga o no en libertad inmediatamente, habr¨¢ de enfrentarse con una cruda realidad.
Las Juventudes Socialistas han recibido 200 peticiones de rehabilitaci¨®n
J. E., Las Juventudes Socialistas (JJ SS), despu¨¦s de que el caso Albarr¨¢n fuera conocido, han recibido otras 200 peticiones similares, provenientes de drogadictos encarcelados o perseguidos por la justicia y a¨²n en libertad, seg¨²n los datos ofrecidos por Nino Olmeda, responsable de toxic¨®manas de la organizaci¨®n juvenil socialista. JJ SS, a trav¨¦s del Centro de Investigaci¨®n y Desarrollo de Actividades del Ocio (CIDAO), ha dise?ado un plan de reinserci¨®n que acoge casos como el de Patxi Albarr¨¢n, basado en la experiencia habida con los etarras.
El plan ser¨¢ presentado en breves fechas al ministro de Justicia, Fernando Ledesma, que ha mostrado una actitud muy receptiva a las peticiones de las JJ SS.
La pena, en suspenso
El plan contempla, entre otras medidas, que el heroin¨®mano arrepentido que sufriera el s¨ªndrome de abstinencia fuera atendido en los primeros momentos en un centro sanitario adecuado. Pasar¨ªa por una segunda fase en un centro p¨²blico de deshabituaci¨®n. Al tiempo, la pena que le fuere impuesta quedar¨ªa en suspenso. Finalmente, el Gobierno aprobar¨ªa, en una ¨²ltima fase, indultos individuales.
En cualquier caso, los j¨®venes socialistas demandan al Gobierno que tome cartas en el asunto, mediante el establecimiento del probation, libertad a prueba, vigente en otros pa¨ªses, y sugieren que se firmen convenios entre la Administraci¨®n y las empresas p¨²blicas para que ¨¦stas ofrezcan empleo a los rehabilitados.
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