El cardenal Sin teme un fraude electoral en Filipinas

"Atenci¨®n a vuestra eminencia el cardenal Jaime Sin" es el t¨ªtulo de la publicidad a toda plana que los diarios filipinos han publicado en los ¨²ltimos d¨ªas para empujar a los cat¨®licos del pa¨ªs -el 90% de la poblaci¨®n- a que voten a favor del actual presidente, Ferdinand Marcos, en su duelo electoral de ma?ana con Coraz¨®n, Cory, Aquino. Mientras, el cardenal Sin rechaz¨® ayer una invitaci¨®n de Marcos para rezar con ¨¦l en el palacio presidencial "por una elecci¨®n honesta y limpia", al tiempo que expres¨® sus temores de que haya fraude y manipulaciones en la jornada electoral de ma?ana, viernes.

El anuncio publicitario, pagado por simpatizantes del presidente, reproduce el art¨ªculo del periodista Ross Munro, quien, bajo el t¨ªtulo de 'Los nuevos jemeres rojos', describi¨® para la revista Time los v¨ªnculos que existen en Filipinas entre sacerdotes de la Iglesia cat¨®lica y la guerrilla comunista del Nuevo Ej¨¦rcito Popular."Me hacen publicidad sin tener que pagarla", ironiz¨® ayer el cardenal Sin -la m¨¢s alta autoridad cat¨®lica de Filipinas y cr¨ªtico en ocasiones contra Marcos- en su residencia de Manila, al comentar ante la Prensa internacional los ataques que hacen los partidarios del presidente Marcos por las posiciones progresistas del cardenal a favor de Coraz¨®n Aquino.

"La Iglesia cat¨®lica no ha tomado partido ni ha indicado a qui¨¦n hay que votar", dijo el cardenal. Lo cierto es que, aun sin pronunciarse directamente, el cardenal Sin y casi la totalidad de los obispos cat¨®licos est¨¢n a favor del cambio que simboliza la candidatura de Coraz¨®n Aquino a la presidencia y la de Salvador Laurel a la vicepresidencia de Filipinas.

La paloma y el presidente

Sonriente, ir¨®nico con Marcos y chistoso, el cardenal Sin habl¨¦ ante los periodistas con todo tipo de simbolismos. Record¨® que durante un cumplea?os de Marcos varias personalidades soltaron palomas que volaban en direcci¨®n hacia el presidente. "La m¨ªa vol¨® en direcci¨®n al embajador de Estados Unidos..., para recibir instrucciones", ironiz¨® el cardenal.Aunque la Iglesia cat¨®lica no ha tomado abiertamente partido en la contienda electoral, la posici¨®n pasiva, cuando no cr¨ªtica, del cardenal Sin hacia el presidente Marcos puede influir en el censo electoral, compuesto por unos 24 millones de personas, cuyas ra¨ªces cat¨®licas, heredadas de 400 a?os de presencia espa?ola, son muy profundas.

Ferdinand Marcos juega tambi¨¦n sus cartas entre los creyentes, y utiliza a sus amigos responsables de la Iglesia de Cristo (protestante, que cuenta en Filipinas con unos tres millones de seguidores) para que den ¨®rdenes de disciplina de voto, naturalmente a su favor.

Marcos esgrime tambi¨¦n casos de v¨ªnculos entre representantes de la Iglesia cat¨®lica y la guerrilla, en situaciones donde cristianismo y marxismo pueden confundirse con la miseria o los abusos de poder, y cita ejemplos de sacerdotes cat¨®licos que ayudan a la guerrilla. No faltan pruebas para el presidente de Filipinas. Menos a¨²n cuando uno de los principales l¨ªderes de la guerrilla comunista es el cura cat¨®lico Conrado Balwueg.

Pero el cardenal Jaime Sin quiere dejar claro que la Iglesia cat¨®lica est¨¢ por encima de las terrenales batallas pol¨ªticas. Recuerda las ¨²ltimas pastorales, donde se proclama la necesidad de convivencia entre todos los filipinos, aunque pide a la gente que "se resista a la tentaci¨®n del diablo", en clara referencia a no caer en la pr¨¢ctica habitual del partido de Marcos de comprar directamente los votos con dinero.

El cardenal Jaime Sin, consciente de la fuerza de la Iglesia cat¨®lica filipina, evit¨® pronunciarse sobre cu¨¢l ser¨¢ la actitud de los obispos si hay violencia en las calles tras una elecci¨®n de cuya limpieza dudan todos los observadores imparciales. Tampoco se manifiesta sobre si la Iglesia apoyar¨¢ o no una campa?a de desobediencia c¨ªvica que podr¨ªa desencadenarse si los filipinos consideran que ha habido fraude en las urnas.

Una semana despu¨¦s de las elecciones est¨¢ previsto que se re¨²na la Conferencia Episcopal Filipina para hacer un balance de los resultados y estudiar la estrategia a seguir en el supuesto de que Marcos se niegue a dimitir si resulta perdedor frente a la candidata de la oposici¨®n, Coraz¨®n Aquino.

?Espera un milagro para que gane Cory Aquino? "No soy un profeta ni Nostradamus", respondi¨® el cardenal, confirmando su fino sentido del humor.

Milagro o no, ayer llovi¨® fuertemente a media tarde en Manila, cuando decenas de miles de personas se congregaban en el Luneta Park para acudir al ¨²ltimo acto electoral del presidente Ferdinand Marcos. Muchos participantes se retiraron del parque, mientras otros aguantaban el temporal y las bandas de m¨²sica y los globos rojos y azules, colores nacionales filipinos, amenizaban la fiesta.