Escaso seguimiento de las directrices de los partidos entre sus votantes

Los resultados de la encuesta de opini¨®n que hoy publicamos, realizada antes del debate parlamentario sobre la permanencia de Espa?a en la OTAN, revelan que las recomendaciones del PSOE y Coalici¨®n Popular a sus votantes respecto al refer¨¦ndum -voto afirmativo y abstenci¨®n, respectivamente- apenas ser¨¢n seguidas.El alto n¨²mero de votantes de Coalici¨®n Popular que no seguir¨¢ la consigna de abstenci¨®n -aproximadamente la mitad de ¨¦stos- lo mismo que el de votantes del PSOE que muestra su inclinaci¨®n a votar contra la permanencia de Espa?a en la Alianza Atl¨¢ntica -el 42,3%- as¨ª lo corroboran.

Un 42,3% de los que declaran haber votado al PSOE en 1982 muestra su intenci¨®n de votar en contra de la permanencia, frente a un 28,3%, que lo har¨¢ a favor. De los que manifiestan haber votado a Coalici¨®n Popular en 1982, se abstendr¨¢ el 32,3%, frente a un 23,6% que votar¨¢ afirmativamente y un 20,5% que lo har¨¢ negativamente, seg¨²n los datos del sondeo.

El mayor grado de indecisi¨®n se halla entre los votantes de los partidos nacionalistas, Partido Nacionalista Vasco (PNV) y Converg¨¦ncia i Uni¨® (CiU), y el mayor rechazo a la permanencia se sit¨²a entre los votantes del PCE, extrema izquierda, extrema derecha, regionalistas o grupos locales.

Entre los que votaron a UCD en 1982, el 33,1% de los encuestados que dieron su voto a la coalici¨®n centrista ha mostrado su deseo de votar a favor de la permanencia de Espa?a en la OTAN; el 11,1% lo har¨¢ en contra y el 27,8% declara que se abstendr¨¢. En cuanto a los encuestados que dieron su voto al Centro Democr¨¢tico y Social (CDS), el 35,6% votar¨¢ en contra y el 20% votar¨¢ a favor, siendo la abstenci¨®n prevista en este segmento del 17,8%.

De los que dieron su voto al PCE, el 80,9% votar¨¢ contra la permanencia de Espa?a en la Alianza Atl¨¢ntica; el 6,4% lo har¨¢ a favor y el 10,6% ha mostrado su intenci¨®n de abstenerse.

De los partidos y coaliciones nacionalistas, el 30,8% de los que votaron al PNV en 1982 votar¨¢ no en el refer¨¦ndum, frente al 11,5% que anuncia su intenci¨®n de votar s¨ª. De los que dieron su voto a Converg¨¦ncia i Uni¨® en las pasadas elecciones generales, el 28,6% muestra su intenci¨®n de votar negativamente en el refer¨¦ndum del 12 de marzo, frente al 14,3% que emitir¨¢ un voto afirmativo en la consulta. La gran mayor¨ªa de los que dieron su voto a organizaciones nacionalistas de izquierda, un 81,5%, votar¨¢ contra la permanencia.

En cuanto a los votos en blanco, el porcentaje previsto entre los encuestados que votaron en 1982 al PSOE es del 2,7%, y del 3,1% entre los que reconocen haber votado a la Coalici¨®n Popular. El mayor ¨ªndice de votos en blanco corresponde a los que manifiestan haber votado al PNY, un 7,7%, y a Converg¨¦ncia i Uni¨®, el 5,7%.

Indecisi¨®n

Del mismo modo, el mayor n¨²mero de personas que mantienen indecisi¨®n sobre lo que van a votar en el refer¨¦ndum se halla entre los que manifiestan haber votado al PNV, cuya c¨²pula mantiene a¨²n indecisa su postura ante la consulta. Este porcentaje es del 42,3%, seguido por el de los votantes de la coalici¨®n catalana Converg¨¦ncia i Uni¨®, el 28,6% de los cuales permanece indeciso; a ¨¦stos les siguen los que votaron a la formaci¨®n centrista CDS, 22,3%, y por encuestados que reconocen haber votado a Coalici¨®n Popular, un 20,5% de los cuales no tiene decidido a¨²n su voto en el refer¨¦ndum.

Seg¨²n una encuesta de opini¨®n publicada por EL PA?S en octubre de 1984, los mayores porcentajes de desacuerdo con la permanencia de Espa?a en la OTAN se registraban en el Pa¨ªs Vasco, donde la negativa abarcaba a 72 de cada 100 encuestados. Amplio rechazo sobre la permanencia exist¨ªa tambi¨¦n en Catalu?a, Andaluc¨ªa, Castilla y Le¨®n, Navarra y Madrid.

En el sondeo de opini¨®n que hoy publicamos se confirma la correspondencia directa entre alto nivel de estudios y voto negativo, focaliz¨¢ndose el voto en contra en Andaluc¨ªa, Pa¨ªs Vasco, Catalu?a y Madrid, por este orden. Destaca asimismo el elevado ¨ªndice de votos negativos -el 52,4%- que proviene de los que aseguran haber votado a otras formaciones no incluidas entre las opciones presentadas, segmento que cabe asociar con los que en 1982 votaron a la extrema izquierda, la extrema derecha y a partidos regionalistas o locales.