Disidentes rigurosamente vigilados
La oposici¨®n al r¨¦gimen se encuentra en Checoslovaquia totalmente marginada. El movimiento en favor de los derechos humanos, integrado por los firmantes de la Carta 77, logr¨® publicar el pasado a?o varios documentos, pero su eco social en el pa¨ªs es pr¨¢cticamente nulo. Viejos pol¨ªticos como el veterano comunista y ex ministro de Asuntos Exteriores Jiri Hajek o intelectuales como el dramaturgo Vaclav Havel pertenecen a una peque?a minor¨ªa que sigue neg¨¢ndose a doblegar su conciencia a consideraciones pr¨¢cticas como la seguridad y el modesto bienestar social. Muchos de ellos son vigilados continuamente por la polic¨ªa y tratados como elementos antisocialistas.
Los checos, que tienen por h¨¦roe nacional al soldado Schwekj de la novela de Hasek -un artista de la supervivencia por medio de la docilidad e indiferencia-, parecen no comprender que haya entre ellos gentes que se rebelan contra el poder y afrontan represalias por defender sus creencias.Los eslovacos, muy combativos y mucho m¨¢s cercanos en car¨¢cter a los polacos, son ajenos a esta pasividad. Prueba de ello es que en la direcci¨®n del r¨¦gimen est¨¢n sobrerrepresentados los eslovacos. Pese a ello, en el ¨²ltimo a?o se ha percibido inter¨¦s de las autoridades por no recurrir a medidas represivas dr¨¢sticas contra los firmantes de la carta 77.
El frente que preocupa actualmente m¨¢s al r¨¦gimen en el interior es otro. Desde la crisis polaca de 1980, Praga ve con preocupaci¨®n el crecimiento de la militancia religiosa en la rep¨²blica eslovaca. Desde que Juan Pablo II accedi¨® al pont¨ªficado, la postura de Praga con respecto a la Iglesia registr¨® un claro endurecimiento, especialmente a partir de que el Papa desautorizara a la asociaci¨®n clerical cercana al r¨¦gimen Pacem in Terris. Pese a una invitaci¨®n del cardenal primado Frantisek Tomasek a Juan Pablo II para viajar a Checoslovaquia el pasado a?o, la visita fue imposible.
Con motivo del 1.100? aniversario de la muerte de san Metodio, que con su hermano Cirilo evangeliz¨® la gran Moravia, se produjeron el pasado verano en Hrad y evoca, en Eslovaquia, dos concentraciones religiosas que provocaron la alarma de las autoridades, atrayendo a 150.000 y 100.000 fieles, respectivamente. Sin embargo, y pese a proseguir las detenciones de religiosos por dar clases privadas de religi¨®n a ni?os, lo cual es ilegal, las relaciones del Estado con el Vaticano parecen haber registrado cierta mejor¨ªa con la visita del secretario de Estado del Vaticano, monse?or Agostino Casaroli, a Praga, donde se entrevist¨® con el presidente, Gustav Husak.
En la Prensa oficial, la gente s¨®lo lee la secci¨®n cultural y los deportes y hace el crucigrama. Hasta en los aviones de las l¨ªneas checoslovacas insiste el r¨¦gimen en castigar al viajero con lectura doctrinaria y ofrece en ingl¨¦s tan s¨®lo el diario comunista brit¨¢nico Morning Star.
Una clara mejor¨ªa se percibe en Checoslovaquia en el suministro de bienes de consumo a la poblaci¨®n. Los productos de primera necesidad se venden a muy bajo precio y las familias checoslovacas, en las que suelen trabajar al menos dos miembros, han conseguido un cierto bienestar con casita de campo y peque?a parcela incluida, m¨¢xima ambici¨®n de una sociedad que se refugia en la intimidad y no quiere saber nada de la vida p¨²blica.
En el terreno cultural, las autoridades han hecho un gran esfuerzo por repoblar el pa¨ªs, del que gran parte de la elite intelectual huy¨® tras los sucesos de 1968. Grandes acontecimientos musicales, como el festival de jazz se han consolidado internacional¨ªnente y son un ¨¦xito entre una poblaci¨®n con tradici¨®n milenaria en la cultura europea. Los teatros, conciertos y cines se llenan regularmente y las ¨²nicas colas que se ven en la capital son las qup se forman los jueves ante las librer¨ªas para comprar las nuevas ediciones, que salen todas las semanas.
Pero la oferta cultural sigue quedando restringida por motivos ideol¨®gicos. Escritores checos de la categor¨ªa de Milan Kundera est¨¢n terminantemente prohibidos y s¨®lo se leen, si bien mucho, en ediciones clandestinas. Confrontados con este problema, las autoridades culturales reaccionan con cierta irritaci¨®n. Para la secretaria de la Uni¨®n de Escritores, Vera Adlova, estos escritores no se publican porque son mediocres. En el Ministerio de Cultura reconocen, al menos, que la raz¨®n no se basa en calidades, sino en que "se han comprometido pol¨ªticamente contra el pa¨ªs".
No obstante, se?alan que en Occidente se prima a los checos que est¨¢n en la emigraci¨®n para convertirlos en s¨ªmbolos de la propaganda contra el r¨¦gimen de Praga. Estas autoridades se quejan de que las traducciones del checo en Europa occidental, como son realizadas por exiliados, siempre se centran en autores de la misma condici¨®n. De ah¨ª la ignorancia que hay en Occidente sobre los autores checos en el interior, dicen.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Checoslovaquia
- Juan Pablo II
- Agostino Casaroli
- Censura
- Comunismo
- Viajes
- Eslovaquia
- Libertad expresi¨®n
- Pol¨ªtica exterior
- Rep¨²blica Checa
- Centroeuropa
- Europa
- Gobierno
- Ideolog¨ªas
- Ofertas tur¨ªsticas
- Relaciones exteriores
- Administraci¨®n Estado
- Turismo
- Administraci¨®n p¨²blica
- Medios comunicaci¨®n
- Pol¨ªtica
- Comunicaci¨®n
- Sociedad
- Cultura
- Religi¨®n