Coraz¨®n Aquino se proclama presidenta de Filipinas invocando "el poder del pueblo"

Coraz¨®n Aquino, de 53 a?os de edad, se convirti¨® ayer, invocando "el poder en nombre del pueblo", en la primera mujer presidenta de Filipinas, y dio fin a 20 a?os de dictadura de Ferdinand Marcos. En una sencilla ceremonia celebrada en el lujoso Club Filipino, y rodeada de apenas unos centenares de personas, Coraz¨®n Aquino, la viuda del ex senador Benigno Aquino, asesinado en el aeropuerto de Manila en agosto de 1983, jur¨® y design¨® inmediatamente a varios ministros de su Gabinete, entre ellos al vicepresidente, Salvador Laurel; al ministro de Defensa, Juan Ponce Enrile, y al comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, general Fidel Ramos.

Ponce Enrile y Ramos se sublevaron el pasado s¨¢bado contra Marcos, denunciando que la ganadora de las elecciones hab¨ªa sido Coraz¨®n Aquino, a quien los seguidores de Marcos hab¨ªan robado su victoria con un escandaloso fraude."Yo, Coraz¨®n Aquino, juro solemnemente que, plena y conscientemente, asumo mis obligaciones como presidenta de Filipinas", fue el texto le¨ªdo por la nueva presidenta, con la mano derecha levantada, ante el juez del Tribunal Supremo Claudio Teehankee. A Cory la rodeaba un grupo de fieles seguidores, entre ellos Aurora Aquino (do?a Aurora, la madre de Beningo Aquino), un representante del cardenal Jaime Sin y el primer secretario de la Embajada norteamericana.

Tras ser proclamada presidenta por el juez, Aquino, que vest¨ªa un sencillo traje amarillo, se levant¨® y dijo: "Sobre las bases del mandato del pueblo, yo y Salvador Laurel tomamos el poder, en nombre y por el deseo del pueblo filipino, como presidente y vicepresidente de la Rep¨²blica de Filipinas".

Eran las 10.33 de la ma?ana en Manila (3.33, hora peninsular espa?ola), y los testigos del acto comenzaron a aclamar a su presidenta con gritos de Cory, Cory, Cory, el cari?oso apelativo con que la llaman sus seguidores. Inmediatamente entonaron el Padre nuestro, en tagalo, el idioma aut¨®ctono de los filipinos. Luego, el vicepresidente, Salvador Laurel, comenz¨® a entonar el Bayan-ko (Mi pa¨ªs, en tagalo), canci¨®n popular adoptada como el himno oficial de la oposici¨®n moderada aglutinada en torno a Coraz¨®n Aquino.

Mientras se celebraba esta sencilla ceremonia proclamando a Cory Aquino nueva presidenta, en la calle, miles de personas esperaban, nerviosas, que terminara el acto para poder aclamar a su l¨ªder. Como fondo, se escuchaban disparos espor¨¢dicos, de enfrentamientos entre grupos leales al acorralado presidente Marcos y los partidarios de la oposici¨®n y los militares sublevados en el cercano acuartelamiento de Camp Crame.

La jura presidencial de Coraz¨®n Aquino se celebr¨® despu¨¦s de que una "resoluci¨®n del pueblo", firmada por varios diputados de la Asamblea Nacional -la mayor¨ªa partidarios de Aquino y unos cuantos desertores de Marcos-, declarara nulos los resultados del pasado d¨ªa 15 proclamando vencedor a Marcos en la pol¨¦mica elecci¨®n presidencial del 7 de febrero.

El argumento moral que apoyaba esa resoluci¨®n popular eran los resultados electorales avalados por Namfrel, el grupo independiente para el seguimiento y control de la jornada electoral, que lleg¨® a reunir 500.000 voluntarios en todo el pa¨ªs, en su mayor¨ªa estudiantes, y donde se inclu¨ªa una fuerte participaci¨®n de seglares y religiosos cat¨®licos. Los resultados de Namfrel daban una ventaja de 800.000 votos a Aquino.