Ingvar Carlsson, designado sustituto de Olof Palme

Ingvar Carlsson, de 51 a?os, actual viceprimer ministro, que en la ¨²ltima reorganizaci¨®n del Gabinete sueco en octubre del a?o pasado fue encargado adem¨¢s de los asuntos relacionados con el medio ambiente, ser¨¢ el sustituto de Olof Palme como primer ministro. El anuncio de la designaci¨®n fue realizado en la tarde de ayer en conferencia de prensa por el ministro de Asuntos Exteriores, Sten Andersson.

La designaci¨®n de Carlsson fue realizada en una reuni¨®n de la direcci¨®n del partido con participaci¨®n de la rama sindical, y fue realizada, seg¨²n se?al¨® Andersson, por unanimidad. Andersson -que, junto con el ministro de Finanzas, Kjell Olof Feldt, hab¨ªa sido mencionado como posible candidato para este cargo- dijo en esta oportunidad que Carlsson cuenta con el pleno respaldo del partido por su larga trayectoria en ¨¦ste, por su fuerza y claridad ideol¨®gica y por su capacidad para ser un factor de unidad en dicho grupo.El nuevo primer ministro es un hombre brillante, de gran capacidad intelectual, din¨¢mico, con una especial predisposici¨®n para investigar a fondo y cient¨ªficamente los problemas de la sociedad sueca con vistas a adoptar previsiones con vistas a los cambios tecnol¨®gicos y sociales que se est¨¢n produciendo en el pa¨ªs y en el mundo.

Carlsson desempe?aba adem¨¢s el cargo de ministro del Futuro. Quiz¨¢ no posee la experiencia pr¨¢ctica del trabajo pol¨ªtico cotidiano de otros l¨ªderes partidarios, pero se le reconoce capacidad suficiente como para adaptarse r¨¢pidamente a su nueva condici¨®n de primer ministro.

La decisi¨®n de su nombramiento fue comunicada en la tarde de ayer al presidente (Talman) del Parlamento, Ingemar Bengtson, y deber¨¢n cumplirse algunas instancias formales para que entre el 10 y el 11 de este mes la designaci¨®n sea confirmada. Primeramente ser¨¢ sometida a consideraci¨®n del grupo parlamentario socialdem¨®crata y luego del Parlarnento en pleno, donde no se espera ninguna dificultad. Todo indica entonces que cuando se realicen los funerales de Olof Palme, fijados en principio para el 15 de marzo, Ingvar Carlsson ser¨¢ ya el nuevo primer ministro de Suecia.

La ausencia s¨²bita de Palme se produce en un momento en que el Partido Socialdem¨®crata Obrero de Suecia se enfrenta a algunas fricciones internas que su muerte podr¨ªa agudizar. Tales fricciones tienen como causa fundamental las medidas econ¨®micas implementadas por el ministro de Finanzas, Kejell Olof Feldt, que han sido cuestionadas por la direcci¨®n sindical y algunos sectores minoritarios de algunas comunas que se consideraban especialmente perjudicadas por dichas decisiones.

Pol¨ªtica de salarios

Por otra parte, la pol¨ªtica de salarios preconizada por el Gobierno para el convenio -cuyas negociaciones est¨¢n por iniciarse- tampoco satisfac¨ªa plenamente a la direcci¨®n sindical. El ministro de Finanzas es uno de los hombres m¨¢s brillantes del equipo ministerial, pero es considerado un miembro del ala m¨¢s moderada del partido.Tanto Palme como Feldt se enfrentaron directamente, a trav¨¦s del di¨¢logo con los descontentos, a la situaci¨®n. ?sta fue presentada por los partidos burgueses como una insurrecci¨®n creciente de las bases frente a los mandos en el Gobierno.

Las manifestaciones de descontento coincidieron con los resultados de una encuesta encargada por un programa de televisi¨®n cuyos resultados revelaron que un n¨²mero superior a las 500.000 familias suecas est¨¢n viviendo con ingresos inferiores al m¨ªnimo prescrito por las autoridades del Servicio Social.

Esto suscit¨® un intenso debate en la Prensa y el Parlamento bajo el t¨ªtulo de Los nuevos pobres de Suecia. (Cabe acotar que el concepto de pobreza en Suecia es tan relativo que muchos millones, no solamente en pa¨ªses del Tercer Mundo, se sentir¨ªan felices de poder integrar el grupo de los pobres suecos.)

Una respuesta del Gobierno al descontento de los sectores del partido que lo acusaban de realizar una pol¨ªtica de corte burgu¨¦s fue la medida adoptada recientemente de elevar en un 1% el impuesto a las acciones de la bolsa para aplicar esos fondos a mejorar la situaci¨®n de las familias suecas a trav¨¦s de diversos subsidios, medida que provoc¨® una fuerte reacci¨®n contraria de los partidos burgueses y de algunos sectores empresariales. Todo indica, sin embargo, que el tr¨¢gico suceso que priva al partido socialdem¨®crata de su figura indiscutida tendr¨¢ un efecto de cohesi¨®n que dar¨¢ m¨¢s fuerza al grupo con vistas al futuro.