Botha anuncia el levantamiento del estado de emergencia, vigente en Sur¨¢frica desde julio

El presidente de Sur¨¢frica, Pieter W. Botha, declar¨® ayer que su Gobierno ha decidido levantar el estado de emergencia impuesto en el pa¨ªs hace m¨¢s de siete meses. Botha tambi¨¦n fij¨® la fecha del 1 de agosto para aplicar el plan de las Naciones Unidas para la independencia de Namibia. Horas antes, la violencia pol¨ªtica se hizo notar: una gran explosi¨®n hiri¨® a dos polic¨ªas en la comisar¨ªa central de Johanesburgo, una potente bomba da?¨® una estaci¨®n el¨¦ctrica en Durban, y dos negros murieron en la provincia de Transvaal en choques con la polic¨ªa.

En un discurso ante una sesi¨®n especial del Parlamento, en Ciudad del Cabo, Botha se?al¨® que los disturbios contin¨²an. "Pero la situaci¨®n", se?al¨®, "ha mejorado hasta el punto de permitirme informar que ser¨¢ dada a conocer una proclama, probablemente el viernes, que levantar¨¢ el estado de emergencia en aquellos distritos donde todav¨ªa se sigue aplicando".Botha agreg¨® que daba este paso "con la sincera creencia de que todos los surafricanos podr¨¢n resolver sus diferencias pac¨ªficamente y mostrar una comprensi¨®n los unos hacia los otros".

El estado de emergencia se impuso el 21 de julio, en. medio de una oleada de enfrentamientos entre miembros de la comunidad negra y la polic¨ªa. La violencia ten¨ªa algunas ra¨ªces en el aumento de los alquileres y el desencanto generalizado por la marginaci¨®n pol¨ªtica de la mayor¨ªa de color.

M¨¢s de 7.000 personas han sido detenidas desde la imposici¨®n del estado de emergencia y el Gobierno ha utilizado poderes especiales para suspender la legislaci¨®n vigente y silenciar a los medios de comunicaci¨®n. Pero, lejos de apaciguar las iras de la mayor¨ªa negra, las medidas de emergencia tuvieron el efecto de aumentar los disturbios raciales, con el resultado de que murieron 780 negros en enfrentamientos con la polic¨ªa, seg¨²n un instituto independiente de estudios raciales.

Sin embargo, al anunciar la, suspensi¨®n del estado de emergencia, Botha avis¨® que el Gobierno propondr¨¢ nuevas medidas durante los pr¨®ximos meses con el fin de mantener la ley y el orden. En cuanto a su plan para un Consejo multirracial, agreg¨®: "Tambi¨¦n he anunciado una base inequ¨ªvoca sobre la cual todos los surafricanos que est¨¢n en contra de la violencia pueden acudir a la mesa de negociaciones para llegar a un nuevo acuerdo constitucional para nuestro pa¨ªs".

No se hicieron esperar las reacciones al discurso de Botha. El portavoz de la Casa Blanca, Larry Speakes, se felicit¨® por la decisi¨®n de levantar el estado de emergencia y a?adi¨® que Washington hab¨ªa pedido dicha medida desde hace meses. "La medida constituye una de las condiciones necesarias para entablar negociaciones con los dirigentes negros a fin de conseguir reformas significativas y una reducci¨®n de la violencia", declar¨®. Sin embargo, para Belen Suzman, veterana diputada blanca en el Parlamento surafricano, la medida "no hace nada para resolver el problema fundamental" que caus¨® los disturbios.

Botha fij¨® la fecha del 1 de agosto para la aplicaci¨®n de la resoluci¨®n 435 de las Naciones Unidas, que prev¨¦ la independencia de Namibia -territorio actualmente bajo administraci¨®n surafricana- a trav¨¦s de elecciones generales organizadas por la ONU. Sin embargo, Botha, se?al¨® que este plan s¨®lo se llevar¨¢ a cabo si se consigue "un acuerdo firme y satisfactorio antes de esa fecha para la salida de los cubanos de Angola". Soldados y consejeros cubanos apoyan al Gobierno marxista de Angola, lo que Pretoria considera como una situaci¨®n perjudicial para sus intereses en la zona.

Observadores pol¨ªticos opinaron que Botha se ha creado muchos problemas al ligar la independencia de Namibia con una retirada de los cubanos. La Organiza ci¨®n de los Pueblos del ?frica del Suroeste (SWAPO), reconocida por la ONU como representaci¨®n aut¨¦ntica de Namibia, declar¨® ayer en Londres que la propuesta de Botha carece de sentido, y que es absurdo pasar la responsabilidad al Gobierno de Angola.

[Por otra parte, la organizaci¨®n Amnist¨ªa Internacional (Al) lanz¨® ayer una nueva campa?a para acabar con lo que considera un aumento de las violaciones de los derechos humanos en Sur¨¢frica, seg¨²n informa la agencia Reuter. En una carta a Botha, Al afirma que los abusos han aumentado marcadamente a lo largo del pasado a?o. La organizaci¨®n se ha dirigido frecuentemente a Botha para denunciar las detenciones sin juicio de opositores pol¨ªticos, la realizaci¨®n de procesos de dudosa legalidad, las torturas y la aplicaci¨®n de la pena de muerte en Sur¨¢frica.