El Bilbao absorber¨¢ a su filial Banco de Huesca

El Banco de Bilbao ha decidido proceder a fusionar la organizaci¨®n del Banco de Huesca -filial al 100%- al haber desaparecido las razones que justificaban la existencia de una segunda marca en Catalu?a y Arag¨®n, seg¨²n fuentes de la entidad vasca. El Banco de Huesca, en su ra¨ªces un banco catal¨¢n con una modesta implantaci¨®n tanto en esta regi¨®n como en Arag¨®n, cerr¨® el pasado ejercicio con un volumen de dep¨®sitos de clientes algo superficie a los 14.000 millones de pesetas y unos beneficios de 50 millones de pesetas.

Los responsables del Banco de Bilbao, al decidir fusionar el Huesca, consideraron que ya tienen una segunda marca en Catalu?a, la Banca Mas Sard¨¢, con unos dep¨®sitos superiores a los 130.000 millones de pesetas, y que la comunidad de Arag¨®n no exige la presencia de un banco aut¨®nomo para obtener un crecimiento normal. Es probable que en los pr¨®ximos meses, y de acuerdo con las manifestaciones del presidente de la entidad en la pasada junta general de accionistas, se mantenga la pol¨ªtica de nuevas fusiones con otros bancos del grupo.

Los dos grandes bancos vascos, el Bilbao y el Vizcaya, parecen haber elegido 1986 como el a?o del redimensionamiento de sus redes bancarias y de la importancia de las entidades filiales. El Bilbao cerr¨® en 1985 algo m¨¢s de 50 oficinas que no resultaban rentables y mantendr¨¢ esta pol¨ªtica durante este a?o. Al tiempo va a proceder a la absorci¨®n del Huesca.

Regionalizar los bancos

El Banco de Vizcaya, el m¨¢s activo en compra de bancos en crisis, llev¨® a cabo hace tres a?os una distribuci¨®n interna de las oficinas que hab¨ªa adquirido, regionalizando las segundas marcas. Esta distribuci¨®n, que funcion¨® durante algo m¨¢s de dos a?os, se mostr¨® obsoleta poco despu¨¦s como consecuencia sobre todo de la adquisici¨®n del Banca Catalana y del conjunto de bancos nucleados en torno a esta instituci¨®n.El vicepresidente y consejero delegado del Vizcaya, Pedro de Toledo, anunci¨® en su intervenci¨®n en la junta de accionistas celebrada a finales del mes de enero la integraci¨®n de todas las oficinas, menos una para mantener en vigor la licencia, que hasta entonces formaban parte del Ahorrobank en la red de Banca Catalana de forma que se mantuviera como la entidad de esta nacionalidad. Al tiempo, las oficinas del Banco de Cr¨¦dito Comercial pasaban al Banco Occidental, convertido en el banco de Madrid y la zona centro. El proceso de nueva regionalizaci¨®n preve¨ªa la creaci¨®n de un nuevo banco, utilizando una de las licencias existentes en las islas Canarias; banco que empezar¨¢ a funcionar en breve tiempo.

El cierre de oficinas, iniciado con timidez en 1985 por algunas entidades, puede tener un fuerte auge a lo largo de este a?o si los bancos mantienen su pol¨ªtica de racionalizaci¨®n de costes operativos, al margen de que consigan o no solucionar parte de los problemas de movilidad laboral de sus plantillas.