El cup¨®n de PRODIECU

Deseo terciar en una pol¨¦mica que est¨¢ gastando mucha tinta. A muchos minusv¨¢lidos, PRODIECU, su cup¨®n o loter¨ªa, les dio trabajo, un sueldecillo minimo, pero digno y el acceso a la Seguridad Social. Toda una iniciativa particular, tal vez no la ideal, pero real y factible para aqu¨ª y ahora, y pelrfectible en ulteriores realizaciones no basadas ¨²nicamente en el socorrido juego de azar, a que tan aficionados somos los espa?oles. Por tanto, me parece mal que se les quite y se les ofrezca a algunos de ellos, como limosna, unos meses de desempleo. A otros ni eso.Se ha dictaminado que s¨®lo son legales la loter¨ªa Nacional y la ONCE. ?Es esa toda la realidad? Sabemos que est¨¢n en estudio leyes sobre los juegos de azar en general, pero en la pr¨¢ctica en estos ¨²ltimos tiempos nos hemos visto invadidos m¨¢s que nunca por todo tipo de juegos de suerte, apoyados convenientemente por los medios de difusi¨®n: casinos, bingos, m¨¢quinas tragaperras, y frente a las quinielas de f¨²tbol la alternativa de la h¨ªpica y la primitiva. Todo ello da much¨ªsimo dinero y tengo serias dudas de que revierta precisamente en los m¨¢s necesitados.

Sabemos tambi¨¦n que en Espa?a hay miles de clubes deportivos y de toda ¨ªndole, no siempre precisamente ben¨¦ficas, que hacen sus loter¨ªas particulares, presumiblemente no legalizadas. Muchos bares est¨¢n alfombrados de numeritos, y no hay fiesta mayor sin rifas... ?Hasta los ni?os de los colegios nos venden sus n¨²meros de sorteos para financiar los viajes de fin de curso! Y a nadie se le ocurre meter a los responsables en la c¨¢rcel.

Nos parece muy bien la ONCE, creada precisamente por un sacerdote cat¨®lico y que, en sus i?icios, tambi¨¦n tuvo sus dimes y diretes para la legalizaci¨®n. Pero no se nos oculta que muchos de los que venden su cup¨®n no son ciegos, y que al amparo de los ciegos pueden vivir otros con mucha vista. Y no nos parece todo mal si, al fin y al cabo, remedia la necesidad de tanto parado.

Pero lo que no nos parece nada bien es que una iniciativa privada en favor esencialmente de los minusv¨¢lidos sea tratada poco menos que como una mafia siciliana. ?O es que el Gobierno tiene ya pensada una soluci¨®n para estos miles de nuevos parados?.-

L'Hospitalet de Llobregat,