Reagan niega que est¨¦ preparando otro ataque a Libia

El presidente norteamericano, Ronald Reagan, expres¨® ayer en Tokio su entusiasmo por el ¨¦xito de la cumbre de los siete pa¨ªses m¨¢s industrializados de Occidente, porque "nunca hubo tanta unidad aliada" como en esta ocasi¨®n. En conferencia de prensa antes de regresar a Washington, Reagan dijo que fue "el m¨¢s sorprendido" por las noticias de prensa que se?alaban que el Pent¨¢gono (Departamento de Defensa estadounidense) estaba preparando otro ataque a Libia con misiles de crucero, y, aunque precis¨® que EE UU no prepara una nueva acci¨®n ofensiva contra el pa¨ªs norteafricano, no quiso comprometerse sobre si Washington consultar¨ªa o no con sus aliados antes de emprender en el futuro acciones. antiterroristas.

"Vamos a combatir el terrorismo con un frente com¨²n. La forma de aislar el terrorismo es actuando todos juntos contra los Estados que lo fomentan", dijo Reagan, quien esquiv¨® una pregunta sobre la omisi¨®n de Siria como pa¨ªs que apoya actos terroristas. "Ahora mismo, Libia es el ¨²nico pa¨ªs del que tenemos pruebas irrefutables. Cuando tengamos la misma clase de pruebas contra otros, ser¨¢n sometidos al mismo trato que Gaddafi", a?adi¨® el presidente norteamericano.Para Ronald Reagan, los resultados de la conferencia fueron incluso mejores de lo que inicialmente esperaba la delegaci¨®n estadounidense. "Ha sido la cumbre m¨¢s positiva de las seis a que he asistido. Hemos logrado todos nuestros objetivos", dijo.

Reagan critic¨® a la Uni¨®n Sovi¨¦tica, por no informar de un accidente nuclear [el de Chernobil] "cuyas consecuencias superan las fronteras, nacionales". Reagan dijo que no ha recibido ning¨²n mensaje del m¨¢ximo dirigente sovi¨¦tico, Mijail Gorbachov, que permita conocer las intenciones de ¨¦ste sobre la celebraci¨®n antes de fin de a?o de una nueva cumbre -la primera fue en noviembre de 1985, en Ginebra- entre los dirigentes de las dos superpotencias. Ello no debe interpretarse, a?adi¨®, como prueba de una p¨¦rdida de inter¨¦s de Gorbachov en mantener reuniones al m¨¢s alto nivel con el presidente norteamericano.

Cr¨ªticas a Nakasone

Entre tanto, el primer ministro japon¨¦s, Yasuhiro Nakasone, afrontaba las cr¨ªticas de medios pol¨ªticos y econ¨®micos japoneses, incluidos los de su propio partido, el liberal, al no haber logrado un acuerdo para frenar el alza del yen -que perjudica las exportaciones- no haber podido evitar la inclusi¨®n del nombre de Libia en la declaraci¨®n conjunta contra el terrorismo, lo que representa la p¨¦rdida de la tradicional postura de neutralidad japonesa en los conflictos relacioriados con Oriente Pr¨®ximo."Nakasone no logr¨® ninguno de los dos objetivos japoneses en la cumbre", escribe el diario Asahi Evening News, y agrega que Yasu [como llama Reagan a Nakasone] no logr¨® que Ron [como llama Nakasone a Reagan] aceptara un compromiso para una intervenci¨®n en los mercados de cambios capaz de detener la fuerte apreciaci¨®n del yen frente al d¨®lar y la consiguiente influencia negativa sobre las exportaciones niponas.

El yen, que durante la ¨²ltima jornada de la cumbre, el pasado martes, alcanz¨® su cotizaci¨®n m¨¢s alta desde la II Guerra Mundial, se depreci¨® ayer ligeramente frente al d¨®lar, al cerrar en el mercado de Tokio a a 166,10 yenes por d¨®lar.

Yastihiro Nakasone neg¨® ante el Parlamento que la cumbre haya sido un fracaso para las p¨®siciones de su pa¨ªs, e insisti¨® en que Jap¨®n estimula la demanda interna y las importaciones, como clara prueba de que desea reducir su importante super¨¢vit comercial de casi 50.000 millones de d¨®lares (unos siete billones de pesetas).

El hecho de que Jap¨®n suscribiera la declaraci¨®n de condena al terrorismo, en la que se cita expresamente a Libia, es interpretada como fruto de las presiones de estadounidenses y brit¨¢nicos para que Jap¨®n se adhiriese a la l¨ªnea dura presentada por Reagan y la primera ministra del Reino Unido, Margaret Thatcher.

Diferencias entre los liberales

Adem¨¢s de las cr¨ªticas de los partidos de la oposici¨®n -socialistas, socialdem¨®cratas y comunistas-, Nakasone debe afrontar hoy las cr¨ªticas dentro de las facciones de su propio grupo pol¨ªtico, el Partido Liberal Democr¨¢tico.Tanto desde el potente sector del ex primer ministro Kakuei Tanaka, hoy apartado del poder por corrupci¨®n pol¨ªtica (caso Lockheed), como del ex primer ministro Zenko Suzuki, las opiniones coinciden en que Nakasone no deber¨ªa convocar elecciones generales anticipadas. Su intenci¨®n era celebrarlas a finales de junio, para renovar las dos C¨¢maras, a fin de aprovechar su innegable popularidad y obtener un tercer mandato como primer ministro.

Para Yasuhiro Nakasone, sin embargo, la cumbre de Tokio puede haber marcado el fin de sus ambiciones pol¨ªticas, lo que dejar¨ªa paso como posibles sucesores al actual ministro de Finanzas, Noburo Takeshita, o al de Asuntos Exteriores, Shintaro Abe.

Este ¨²ltimo fue nombrado primer ministro por el portavoz de la Casa Blanca, Larry Speakes, cuando, en un evidente lapsus, se refiri¨® en una conferencia de prensa celebrada en Tokio al "primer ministro, el se?or Abe".