"Vivimos una hora de traiciones"

Carlos Meer fue el ¨²ltimo gobernador civil de Baleares del franquismo. Estuvo en Mallorca de 1974 a 1976. En esos dos a?os prohibi¨® a Lluis Llach y a Beethoven, expuls¨® a los obreros de las iglesias y a los inmorales de las playas y calific¨® a Palme de homosexual. Al hacer un resumen de su gesti¨®n lo dijo bien claro: "No quiero apuntarme flores".

El militar salit¨® a la popularidad con un cargo pol¨ªtico. Su paso por Mallorca fue una faente de conflictos y an¨¦cdotas. En agosto de 1975 profetizaba: "Vemos la aurora de las lealtades. Vivimos una hora de traiciones y cambios de camisa". En sus discursos citaba a Lenin y luego abrazaba a Blas Pi?ar. "Fue una orquestaci¨®n de Prensa", dijo, "debe tenerse en cuenta que Blas Pi?ar es consejero nacional por designaci¨®n del caudillo". A partir de ah¨ª todo fue rodado.

Sac¨® a 24 obreros de una iglesia, con lo que consigui¨® la protesta del mism¨ªsimo obispo, y prohibi¨® que las Juventudes Musicales interpretaran de noche a Beethoven en el claustro de San Francisco. Y eso que, seg¨²n dijo en Ibiza, "podemos tolerar muchas cosas, pero ninguna de Suecia, cuyo jefe de gobierno Olof Palme, es homosexual". Aunque por aquellos a?os el Mercado Com¨²n estaba un poco lejos, anunci¨®: "Que se lo metan donde les quepa".

En enero de 1976 fue destituido, tras velar, sin mucho ¨¦xito, por la moralidad de las playas, "ya que nuestros pastores no intervienen". Juzg¨® a todos por igual. Por eso, cuando se produjo su destituci¨®n, prohibi¨® una manifestaci¨®n de apoyo.