Marcos,'Baby Doc', ?por qu¨¦ no el resto?
Las ca¨ªdas de Ferdinand Marcos y Baby Doc Duvalier han inspirado una racha de agitaci¨®n con el ¨²nico tema: hagamos lo mismo en cualquier parte, en todas partes. La lista es larga, Corea del Sur, Indonesia, Pakist¨¢n y muchos otros.Algunas cr¨ªticas culpan a Estados Unidos de la existencia de todas las dictaduras no comunistas del mundo. Aunque es cierto que muchas de ellas reciben ayuda de Estados Unidos, las fuerzas que conducen a la dictadura est¨¢n, generalmente, m¨¢s all¨¢ del control americano. ( ... )
Tomemos Filipinas. Se ha dicho, ampliamente que Marcos era un gran villano desde el principio y que s¨®lo el apoyo de Estados Unidos le manten¨ªa en el poder. El hecho es que, a pesar de la profunda y beneficiosa influencia americana, la sociedad filipina siempre ha tenido dificultades para mantener la democracia.(... )
Todo esto subraya el hecho de que la democracia es un sistema complejo y sutil que requiere para su funcionamiento de una cierta historia y condiciones culturales.
La mera menci¨®n de historia y condiciones culturales son vistas por muchos cr¨ªticos como algo arrogante, elitista y racista. ( ...)
Esta discusi¨®n emocional ignora la evidencia y no comprende el verdadero sentido.( ... ) Jefferson cuestionaba el que la democracia pudiera florecer en toda circunstancia, sugiriendo que pod¨ªa ser eficaz s¨®lo en ciertos momentos y lugares en que las condiciones lo permitiesen. ( ... ) Es dif¨ªcil de alcanzar en sociedades tribales, r¨ªgidamente jerarquizadas, o en otras sociedades tradicionales. Requiere un sofisticado c¨¢lculo de tolerancia. ( ... )
Estados Unidos no puede condenar al ostracismo o desestabilizar todas las dictaduras "de derechas", cualesquiera que sean. En una reciente declaraci¨®n al Congreso, Ronald Reagan dijo que Estados Unidos se opone a "la tiran¨ªa de cualquier forma, ya sea de izquierdas o de derechas". Pero el cambio democr¨¢tico, continu¨®, debe ser apoyado "de forma cuidadosa, que respete las tradiciones y realidades pol¨ªticas de los pa¨ªses". Ignorar estas realidades trivializa la democracia y representa un insulto intelectual a la gente que se esfuerza seriamente por conseguirla.
11 de mayo.
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