Lourdes Ortiz enfrenta a dos generaciones en su novela 'Arc¨¢ngeles'
Lourdes Ortiz enfrenta en su ¨²ltima novela, Arc¨¢ngeles (Plaza y Jan¨¦s), presentada ayer en Madrid, a dos generaciones, la de Mayo del 68 y la de los ochenta. Las enfrenta no s¨®lo en el campo de las ideas y vivencias que han iluminado, o cegado, a ambas, sino a trav¨¦s de la distancia que pone un lenguaje como el del v¨ªdeo en un di¨¢logo de sordos, de gente sola. La autora de En d¨ªas como ¨¦stos y Urraca considera que debe existir una unidad entre forma y contenido y que para retratar un momento como el que vivimos se debe llegar a articular un lenguaje que por su forma lo perfile, como lo logra en cierta forma el videoclip.
El libro propone preguntas y respuestas. En el cuarto cap¨ªtulo de Arc¨¢ngeles uno de los personajes, la escritora, duda si lo que est¨¢ escribiendo es una novela. "Lo que la novelista cuenta es un poco lo que yo tem¨ªa a lo largo del proceso. La estructura de la novela era peculiar porque eran como flashes de situaciones. de ese joven, Gabriel, que es como una enzima que va precipitando situaciones. Por otra parte me daba cuenta de que esa novela que yo quer¨ªa, contar s¨®lo la pod¨ªa contar de esa manera. Yo siempre digo que cada novela me plantea problemas de lenguaje y de estructura distintos".
"Lo que me interesaba contar -no s¨¦ si lo he conseguido- es la novela de toda una generaci¨®n y sobre todo c¨®mo esa generaci¨®n ve¨ªa a la anterior. Pod¨ªa elegir un protagonista que de alguna forma tuviese una historia lineal, pero la novela ha intentado tambi¨¦n ser un homenaje amoroso, es algo que est¨¢ presente en todo momento. Pienso que es muy dif¨ªcil escribir una historia de amor, una historia de amor no se puede contar. No me interesaba tanto contar s¨®lo una historia de amor como convertir eso en pretexto para partir de ah¨ª y construir toda una visi¨®n del mundo de los j¨®venes frente a esa generaci¨®n que es la m¨ªa, que es la que est¨¢ de alguna manera asentada"."Trato de crear un mundo paralelo donde no haya un personaje que tenga carnalidad. Es una presencia que ya adquiriendo diferentes ropajes a trav¨¦s del libro, como si encarnase a todos los j¨®venes que han cre¨ªdo que se pueden cambiar las cosas, que no tienen por qu¨¦ ser conformistas. Gabriel es como una pregunta que sirve m¨¢s que nada para contrapesar a esa otra generaci¨®n que es la que se est¨¢ contando en realidad en el libro, la generaci¨®n del 68".
Se dice en la contraportada del libro que ¨¦ste tiene la estructura de un videoclip. "Cuando me planteo el problema de la escritura y de lo que me plantear¨¢ la novela, digo en el. libro que es como un clip de sensaciones. No pretendo copiar el videoclip, eso es in¨²til, es el lenguaje escrito con lo que trabajo. Pero s¨ª sent¨ªa la necesidad de que la lengua fuese tan capaz de dar las sensaciones de las im¨¢genes como las da el videoclip, que son im¨¢genes agolpadas, r¨¢pidas, que se suceden, que cambian.' Pens¨¦ que para esa realidad contempor¨¢nea no bastaba una estructura lineal como ten¨ªa, por ejemplo, mi anterior novela, Urraca, sino que hab¨ªa que dar algo como lo que tiene el videoclip, que presenta una imagen de guerra a la vez que algo cotidiano, una tomadura de pelo sobre esa imagen y la iron¨ªa despu¨¦s".
Los j¨®venes narradores espa?oles est¨¢n apostando por una novela realista, lejos de cualquier intento de experimentaci¨®n en la forma. "Creo que no hay diferencia entre la forma y el contenido; pienso que si ellos quieren dar cuenta de esa realidad de una manera lineal, al estilo del XIX, est¨¢n traicionando sus intenciones. Nunca conseguir¨¢n dar cuenta verdaderamente de lo que sucede. Quiero decir que en la literatura, como en todas las dem¨¢s artes, tiene que haber una unidad de la forma con el contenido".
"Si quieres dar la imagen de la dispersi¨®n, de la cantidad de est¨ªmulos que recibes, de que las cosas tienen menos importancia, de la iron¨ªa, de que todo va y pasa y al mismo tiempo no es nada pero puede serio, tienes que encontrar una forma que te d¨¦ cuenta de ello, y la imagen, la televisi¨®n, la da. Si quieres dar cuenta de esa realidad dispersa, de golpes, de im¨¢genes que se van superponiendo, tienes que usar un lenguaje que lo consiga, y si no lo consigues, no est¨¢s dando cuenta de esa realidad Pienso que igual que el cine ha in fluido mucho en la novela del siglo XX, tambi¨¦n el v¨ªdeo lo ha hecho"
"Yo no intentaba copiar al video, que tiene unas caracter¨ªsticas propias que no tiene la literatura pero intentaba encontrar un lenguaje, un modo de expresi¨®n que cumpliera de alguna manera eso que el v¨ªdeo ha logrado con la imagen. No se trataba de copiar al v¨ªdeo, sino de intentar expresar con la escritura esa realidad dispersa y m¨²ltiple".
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