Brasil inicio su goleada apoyado por el ¨¢bitro

ENVIADO ESPECIAL No hubo cuatro goles de diferencia entre Brasil y Polonia. Los brasile?os golearon cuando el partido se les puso de cara, lo que ocurri¨® gracias a un empujoncito del ¨¢rbitro y a una genialidad de Josimar. Polonia, cay¨® con dignidad, pero tampoco es el equipo de Mundiales anteriores. S¨®lo Boniek es testimonio de los mejores momentos de un gran ciclo del f¨²tbol polacos. Al Brasil de siempre: se le reconoce en algunos rasgos de este conjunto: los taconazos de S¨®crates, los regates de M¨¹ller, las potentes carreras de Careca..., pero no termina de ser el cuadro, que la entusiasta torcida desea, pese a que haga exhibiciones id final, cuando tiene resuelto el encuentro.

A los diez minutos, de juego Polonia ya hab¨ªa saludado dos veces la, madera de la puerta de Carlos. Primero, nada m¨¢s empezar en un centro-tiro que nadie lleg¨® a rematar y que dej¨® despistada a toda la defensa brasile?a; despu¨¦s, en el minuto ocho, en un tirazo de Karas, que recogi¨® el bal¨®n al borde de la media luna y dispar¨® con much¨ªsima fuerza para estrellarlo en el larguero.

No era casualidad que Brasil se encontrara en apuros porque ten¨ªa problemas en la salida y los continu¨® teniendo m¨¢s adelante. Los defensas laterales escog¨ªan casi siempre la opci¨®n m¨¢s dif¨ªcil, Junior se confund¨ªa bastante, Alem¨¢o participaba poco y Elzo no quer¨ªa despreocuparse de sus tareas de marcaje. Con eso, S¨®crates, en la media punta, y M¨¹ller y Careca, arriba, recib¨ªan muy poco juego.

A medida que avanz¨® el tiempo Brasil solucion¨® ligeramente sus problemas, pero no lo bastante como para dar sensaci¨®n de superioridad ante la selecci¨®n polaca, ordenada, bien colocada y con la amenaza del buen juego de Boniek, que en cualquier momento pod¨ªa transformase en gol. El tanto Reg¨®, sin embargo, en un empujoncito arbitral, que vio penalti en una jugada de las que hace 20 a?os eran penalti claro, hace diez penalti riguroso y que hoy ya nadie pita.

Polonia sali¨® muy bien en la segunda mitad y aquello cobr¨® aires de empate. Pero, en una de las primeras subidas de Brasil al ataque, Josimar cogi¨® el bal¨®n a la salida de una falta e hizo un gol de los que s¨®lo un negro brasile?o puede hacer. Ah¨ª termin¨® el partido.

Antes, eso s¨ª, el seleccionador polaco, Antoni Piechniczek, tuvo el detalle de alinear, aunque s¨®lo fuera ocho minutos, al veterano defensa Zmuda, que, as¨ª, ha participado en cuatro fases finales, en dos de las cuales, las de 1994, en la RFA, y la de 1982, en Espa?a, su equipo alcanz¨® el tercer puesto, en la primera de ellas a costa precisamente de Brasil.