Subirachs y el templo maldito

"No se puede continuar la Sagrada Familia de Gaud¨ª porque no existen planos, todo lo que se haga son improvisaciones. Nadie que respete de veras la obra gaudiniana puede colaboraren esa mixtificaci¨®n", dec¨ªa uno de los p¨¢rrafos de la citada carta. Entre los firmantes figuraban nombres tan prestigiosos como el fallecido arquitecto de origen suizo Le Corbusier, el decano del Colegio de Arquitectos -tambi¨¦n fallecido Antoni de Moragas, o el cr¨ªtico Gillo Dorfles."Estas son nuestras razones", segu¨ªa el manifiesto. "Urban¨ªstica y socialmente el gran templo es inoperante; para la acci¨®n pastoral en la ciudad se necesitan parroquias y no grandes templos; un gran templo expiatorio de todo un pueblo es una idea fuera de ¨¦poca; terminar un edificio sin el arquitecto que lo ide¨® es muy dif¨ªcil; pero si se quiere terminar seg¨²n su mismo proyecto y de este proyecto no quedan planos, es ya un intento lleno de vaguedades."

La mayor¨ªa de los artistas e intelectuales entrevistados, entre los que firmaron la mencionada carta, se manifiestan contrarios a la continuaci¨®n del proyecto.

El arquitecto Oriol Bohigas es uno de los que se muestran m¨¢s radicales: "Las obras no deben continuar como hasta ahora. Son una falta de respeto y una degradaci¨®n del esp¨ªritu de Gaud¨ª. Habr¨ªa que derribar las cuatro torres que se han construido y partir de nuevos planteamientos".

Un bu?uelo

El poeta Joan Brossa expresa una idea similar, utilizando su estilo caracter¨ªstico: "?Por qu¨¦ los varones bienpensantes de la junta se obstinan en colgar tantos rabos (llufes) a la obra de Gaud¨ª? Pero son coherentes. El gran bu?uelo que preparan es la culminaci¨®n de una serie de disparates. Si entre todos no lo evitamos, a la memoria del gran arquitecto le van a colgar, adem¨¢s de los rabos, un biegotazo caricaturesco".Otro arquitecto, Alfons Mil¨¢, insiste en el car¨¢cter "terriblemente personal" de la obra de Gaud¨ª. "Adem¨¢s, las t¨¦cnicas de construcci¨®n han evolucionado mucho en estos a?os, lo que dificulta todav¨ªa m¨¢s el pretender proseguir su l¨ªnea. En mi opini¨®n, muchos se plantean la continuaci¨®n de la Sagrada Famiha m¨¢s como una tarea de tipo nacionalista que como una empresa art¨ªstica." El pintor R¨¢fols Casamada considera, asimismo, que pretender continuar la obra de Gaud¨ª sin planos ni referencias es algo artificial.

"La pol¨¦mica sobre si las obras de la Sagrada Familia deben continuar o no me parece que ya no tiene sentido. Es un tema que se pod¨ªa plantear en los a?os cincuenta"-, cuando la construcci¨®n estaba paralizada, pero no ahora que el proceso sigue adelante", afirma Joan Anton Maragall, presidente de la junta constructora y responsable directo de la elecci¨®n del escultor Josep Maria Subirachs.

Seg¨²n Maragall, la imagen de la Sagrada Familia va a cambiar notablemente en los pr¨®ximos meses. Los mismos arquitectos que dirigen la construcci¨®n del Anillo ol¨ªmpico est¨¢n encargados de los estudios de resistencia de materiales.