Nuevo mercado
La inclusi¨®n de varios jugadores en el ¨²ltimo draft y la pr¨®xima marcha de Fernando Mart¨ªn han puesto de manifiesto el inter¨¦s del mejor baloncesto del mundo por un mercado hasta ahora inexistente para ellos.La NBA, a?os atr¨¢s, parec¨ªa un lejano olimpo donde moraban grandes dioses que entre bacanal y bacanal organizaban una competici¨®n de algo parecido a nuestro baloncesto. Los ganchos de Abdul Jabar, los mates desde la personal de Chamberlein o los perfectos tiros de Jerry West, que pod¨ªamos ver cuando alg¨²n avanzado tra¨ªa pel¨ªculas de all¨ª, contribu¨ªan, junto a nuestro desconocimiento, a crear un halo celestial que la envolv¨ªa.
El saber desmitifica. Cuando desembarcamos de nuestra ignorancia, nos percatamos de que lo ¨²nico que nos diferenciaba de aquellos dioses eran peque?os detalles sin importancia: altura, rapidez, salto y, con la mayor¨ªa, color.
La mejora tanto f¨ªsica como t¨¦cnica del jugador europeo ha logrado que los americanos hayan contemplado la posibilidad de encontrar alg¨²n producto v¨¢lido para sus necesidades. Como buenos empresarios, no descartan un nuevo mercado. Y lo mejor de este mercado se halla presente en el Mundob¨¢sket.
Las primeras adquisiciones -Schiremp y Blab- las hicieron el a?o pasado. No eran lo mejor, pero eran made in USA. Fernando Mart¨ªn ser¨¢ el primer espa?ol y, si no hay m¨¢s europeos por ahora, es debido a ciertas concepciones deportivas dispares entre el bloque occidental y el oriental. Pero no debemos cegarnos. La lista de posibles jugadores NBA es todav¨ªa lo bastante limitada para no permitir ninguna euforia europe¨ªsta.
Adem¨¢s, convendr¨ªa hacer ciertas puntualizaciones: Europa cuenta con una docena de jugadores que podr¨ªan estar en la NBA, pero s¨®lo unos pocos -menos de cinco que podr¨ªan jugar. El estar o el jugar depende no s¨®lo de la propia calidad, sino del equipo al que se llegue. As¨ª, Fernando Mart¨ªn es muy posible que, de haberse quedado en Nueva Jersey, teniendo a Buck William delante, no habr¨ªa intervenido m¨¢s que un indio dando vueltas a una caravana esperando que le maten. La temporada que viene jugar¨¢ en Portland, donde no tiene tanta competencia en su puesto, y, l¨®gicamente, tendr¨¢ m¨¢s posibilidades de saltar a la cancha.
Otra consideraci¨®n a tener en cuenta es que los jugadores en Europa no tienen por qu¨¦ ser los m¨¢s capacitados en Estados Unidos. Volkov, siendo globalmente inferior a Petrovic, tiene m¨¢s posibilidades, en un caso hipot¨¦tico, de jugar en la NBA. Es m¨¢s especialista y el especialista es, dejando aparte a los monstruos sagrados, el rey de la NBA.
Por lo tanto, a pesar de que los norteamericanos ya saben no s¨®lo d¨®nde est¨¢ Europa, sino que aqu¨ª tambi¨¦n hay tel¨¦fonos, no parece probable, por ahora, una emigraci¨®n masiva. Ni su inter¨¦s ni la calidad de nuestro mercado dan todav¨ªa para tanto.
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