John Agudelo, la mano de la concordia en Colombia

John Agudelo, presidente de la Comisi¨®n de Paz en Colombia, fue el hombre en la sombra de un controvertido proceso impulsado por el presidente Belisario Betancur que, con todo, marc¨® un hito en las relaciones entre Gobierno y guerrilla. "Nuestro ¨¦xito estuvo en la nueva metodolog¨ªa, en que por primera vez se utiliz¨® el di¨¢logo como instrumento para solucionar los problemas", explica Agudelo en una entrevista con EL PA?S. Para este hombre, militante, como Betancur, del Partido Conservador, abogado y ex ministro de Trabajo, el proceso de paz en Colombia ha sido "un ¨¦xito y es irreversible".Interrogado sobre los m¨¢s de 2.000 muertos durante la etapa pacificadora, Agudelo replica que "se ha querido analizar la paz por lo que le falta y no por lo que ha logrado". En 1982, cuando Betancur inici¨® su gobierno y form¨® la Comisi¨®n de Paz, hab¨ªa en Colombia "54 focos guerrilleros activos y se estaba peleando en todos los departamentos del pa¨ªs [tiene 25] menos en dos". En 1986 "s¨®lo hay des¨®rdenes en dos o tres", precis¨®. Adem¨¢s, de los grupos guerrilleros existentes "m¨¢s del 90% se ha acogido a la tregua", se?ala con inocultable orgullo.

En la actualidad permanecen inactivos la guerrilla comunista Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), un sector del izquierdista Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional y Autodefensa Obrera. Sol¨® las FARC, con sus 10.000 hombres armados en 27 frentes, representan el 90% de los alzados en armas del pa¨ªs.

Agudelo cuenta que al plantear el di¨¢logo como medio de soluci¨®n en un pa¨ªs que lleva 40 a?os de violencia sin pausas, "a muchos se les erizaron los pelos, porque el pa¨ªs se hab¨ªa acostumbrado a la guerrilla".

Hab¨ªa "desconfianza y falta de fe, porque se opinaba que el ¨²nico camino para una soluci¨®n del problema guerrillero eran las armas". Los militares, agrega, "ten¨ªan muchos motivos para desconfiar, ya que ellos eran los que hab¨ªan peleado y hab¨ªan puesto los muertos", pero finalmente se impuso "la pedagog¨ªa de la paz y el di¨¢logo" que ha logrado "la deslegitimaci¨®n de la violencia como instrumento de lucha pol¨ªtica".

Los grupos guerrilleros que contin¨²an su actividad armada son el Movimiento Diecinueve de Abril y el Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n. En estos momentos "no gozan de respaldo de la opini¨®n p¨²blica", favor que s¨ª ten¨ªan "hace cuatro a?os y de manera escandalosa".

Uno de los primeros problemas de la comisi¨®n fue que "nos llenaron de informes que dec¨ªan que Manuel Marulanda (Tirofijo) estaba muerto; otros dec¨ªan que viv¨ªa en Checoslovaquia o Cuba"; incluso lleg¨® una declaraci¨®n de un m¨¦dico que "aseguraba haberle amputado la pierna a Marulanda". Tirofijo es un legendario comandante de las FARC. Sin embargo, se continu¨® la b¨²squeda, hasta que "nos encontramos con los jefes de las FARC, y all¨ª estaba Tirofijo". En la guerrilla "hay gentes de todos los pelambres ...: idealistas, gentes sin ideas, anarquistas y bravucones".

En relaci¨®n con la toma del Palacio de Justicia por el M-19, Agudelo explica que la comisi¨®n no intervino porque es un cuerpo "asesor" del presidente, "no un ente aut¨®nomo"; una entidad "pluralista en la que hay conservadores, liberales, camaradas y periodistas". Si Betancur hubiera consultado "no pod¨ªamos dar una sola opini¨®n, sino muchas, lo que hubiera servido para agregar anarqu¨ªa a los hechos".

John Agudelo, el administrador de la paz colombiana del presidente Betancur, renunciar¨¢ a su cargo la pr¨®xima semana y no aceptar¨¢ presidir de nuevo la Comisi¨®n de Paz aunque el pr¨®ximo presidente, Virgilio Barco, se lo pida. "Soy un hombre sin fortuna personal; este trabajo, en el que llevo cinco a?os, es sin sueldo y hay muchos problemas que tengo que resolver".