Robo en un domicilio particular del centro de Madrid de obras de arte valoradas en 80 millones de pesetas
Obras de arte valoradas en 80 millones de pesetas fueron sustra¨ªdas el pasado s¨¢bado de un domicilio particular situado en el n¨²mero 6 de la calle del Caballero de Gracia, en el distrito madrile?o de Centro. Los autores del robo forzaron la puerta de una buhardilla de la finca, que se encontraba vac¨ªa, y penetraron en el piso de abajo a trav¨¦s de un orificio que practicaron en el suelo. Fuentes policiales calificaron el hecho como un trabajo "realizado por profesionales que conoc¨ªan el valor de la pinacoteca".
Los delincuentes, tras realizar un butr¨®n en el suelo de una buhardilla, situada justo encima del piso robado, descendieron al piso inferior, que se encontraba vac¨ªo, y se apoderaron de 11 cuadros, dos floreros con dibujos de lilas y rosas y cuatro tablas inglesas, dos de ellas del siglo XVI, seg¨²n inform¨® la Jefatura Superior de Polic¨ªa. Consumo cuidado, para no da?ar las obras de arte, los asaltantes retiraron los marcos y se apoderaron, de las telas, que envolvieron en s¨¢banas para que no sufrieran desperfectos. Tras conseguir el bat¨ªn, escaparon por el mismo lugar por donde entraron sin que nadie los viera. Al parecer, los asaltantes utilizaron una escalera de la vivienda robada para facilitar la subida, a trav¨¦s del hueco abierto, al piso superior.El propietario de la pensi¨®n Marina Santa, situada en el segundo piso del inmueble, la persona que descubri¨® el robo, asegur¨® ayer que escuch¨® ruidos durante la madrugada, pero no sospech¨® que se tratara de un robo.
"Por la ma?ana fui a ver lo que pasaba, porque parec¨ªa como si se hubieran dejado una puerta abierta y daba golpes constantes. Cuando sub¨ª al ¨²ltimo piso, donde est¨¢n las buhardillas, me encontr¨¦ con la puerta de una de ellas abierta", asegur¨®. "Pas¨¦ al interior y me encontr¨¦ con un agujero en el suelo que comunicaba con la casa de abajo. Enseguida comprend¨ª lo que hab¨ªa ocurrido y avis¨¦ a los propietarios de la vivienda, que se encontraban fuera de Madrid, en un chal¨¦ de su propiedad, situado en la localidad madrile?a de Loeches". El coleccionista, en cuyo domicilio se llev¨® a cabo el robo, hab¨ªa dejado su tel¨¦fono por si ocurr¨ªa algo.
"No ha pasado nada"
El propietario de la vivienda, F¨¦lix ?scar Rico, prest¨® declaraci¨®n durante la ma?ana de ayer en la comisar¨ªa de Centro, que investiga el robo, seg¨²n inform¨® la polic¨ªa. Su esposa, Pilar Atar¨¦s, se neg¨® a facilitar ninguna informaci¨®n sobre lo sucedido, y dos personas, un hombre y una mujer, que se identificaron como empleados, tampoco quisieron hacer ninguna declaraci¨®n. "No ha pasado nada", dijo escuetamente uno de ellos a trav¨¦s de la mirilla de la puerta, mientras se apresuraba a echar todos los cerrojos de la vivienda.Fuentes policiales calificaron la sustracci¨®n de obras de arte como un trabajo realizado "por profesionales que conoc¨ªan a la perfecci¨®n el valor de la pinacoteca".
Los cuadros robados, seg¨²n la descripci¨®n facilitada por su propietario, son: uno de Cecilio Pla, que representa una playa levantina; un Poy Dalmao, una feria' con vacas; un Solana, una capea; un boceto de Goya con una escena de tauromaquia; un Llaureado, un p¨®rtico de Sitges; un paisaje campestre de Goldwey; un cuadro de Zurbar¨¢n, con un motivo de flores; otro de Fornier, con un florero franc¨¦s; un trigal de Carretero G¨®mez, con un trigal; otro de Carlos de Hans, con una escena de corte, y otro firmado, por Antonio Casero con un motivo taurino.
Vecinos del inmueble aseguraron que son bastante frecuentes los robos de viviendas en la zona. El domicilio situado frente a la casa robada fue asaltado tambi¨¦n en d¨ªas pasados, y. en esa ocasi¨®n los ladrones entraron igualmente en la vivienda por la buhardilla.
F¨¦lix ?scar Rico Atar¨¦s, el propietario de la vivienda, casado y con un hijo, trabajaba como joyero, "negocio que dej¨® posteriormente para dedicarse al arte", seg¨²n uno de los vecinos.
El edificio donde se encuentra la vivienda asaltada es la t¨ªpica casa antigua y de aspecto descuidado del centro de Madrid, con escaleras de madera y sin ascensor. En el inmueble hay dos pensiones. En la calle de Caballero de Gracia, lo mismo que en las zonas pr¨®ximas, como la calle de la Montera y la de Jardines, se ejerce la prostituci¨®n desde primeras horas de la ma?ana.
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