Periodistas de todo el mundo hacen un curso de ocho meses en Par¨ªs para mejorar su conocimiento de los problemas europeos
Veintiocho periodistas de todo el mundo, con un m¨ªnimo de cuatro a?os de profesi¨®n, volver¨¢n a la escuela, durante ocho meses y en Par¨ªs, para mejorar su conocimiento de Europa y su sensibilidad general, sobre problemas de pol¨ªtica internacional. El programa se llama Journalistes en Europe, y existe desde hace 12 a?os. "No se trata de crear grandes reporteros, sino de mejorar la sensibilidad de las redacciones de peri¨®dicos, agencias y medios audiovisuales, proporcionando a los periodistas que trabajan en ellas los elementos esenciales que les permitan interpretar y comprender las noticias cotidianas", explica su director, Philippe Viannay.Viannay, que fue durante muchos a?os vicepresidente de una de las escuelas de periodismo m¨¢s famosas de Francia, el Centro de Formaci¨®n y Perfeccionamiento de Periodistas (CFPJ), est¨¢ convencido de que el ¨²nico medio para impedir que la humanidad se destruya es el conocimiento, y que los periodistas, si han recibido una formaci¨®n adecuada, pueden realizar en ese sentido un importante papel. "Este programa pretende, precisamente, acelerar su preparaci¨®n, m¨¢s all¨¢ de lo que supone el propio ejercicio de la profesi¨®n", asegura. Journalistes en Europe es todav¨ªa poco conocido en Espa?a: de los 283 profesionales que han pasado hasta ahora por esta especial escuela s¨®lo cuatro eran espa?oles. Sin embargo, su ¨¦xito en el resto de Europa, en Estados Unidos, Jap¨®n o ciertos pa¨ªses africanos ha sido fulminante y el principal problema que se plantea ahora es c¨®mo seleccionar entre todos los candidatos la treintena que tendr¨¢ derecho a seguir durante ocho meses los debates, an¨¢lisis y trabajos del curso.
Viannay quiere ampliar el n¨²mero de plazas, pero para ello tiene que conseguir aumentar paralelamente las becas disponibles. Los gastos de inscripci¨®n cuestan, individualmente, 65.000 francos, es decir, 1.300.000 pesetas, aproximadamente. Los 28 alumnos de este a?o disponen de otras tantas becas, sufragadas por la Comunidad Europea (12), los Gobiernos de Francia (10), Rep¨²blica Federal de Alemania (3) y Holanda (2), as¨ª como por la C¨¢mara de Comercio e Industria de Par¨ªs. Si todo sale bien, a partir de 1987 el Parlamento Europeo financiar¨¢ otras cinco plazas. "Conf¨ªo, tambi¨¦n, en que el Ministerio de Asuntos Exteriores espa?ol cree algunas becas destinadas a periodistas de Am¨¦rica Latina", a?ade el director del programa.
?C¨®mo reaccionan los periodistas participantes? "Es una buena experiencia para ellos", asegura Viannay, con una chispa de iron¨ªa en los ojos. "Como profesionales est¨¢n ya acostumbrados a viajar en primera, hospedarse en hoteles buenos y alquilar coches o taxis. Durante los ocho meses del programa vuelven a los viejos tiempos, sacan un abono de metro y eligen con cuidado sus pensiones y restaurantes. Algunos de ellos ya conoc¨ªan Par¨ªs o las otras ciudades en que se desarrolla el programa, pero me han confesado que nunca hab¨ªan tenido contacto real con la vida cotidiana de esos pa¨ªses. Ahora tienen una mayor sensibilidad para comprender sus diversas formas de vida".
Las empresas japonesas y australianas suelen mantener el sueldo de los periodistas que consiguen una plaza en el curso. Las europeas les guardan el puesto de trabajo y les pagan, a tanto la pieza, los art¨ªculos que env¨ªen. En el caso de periodistas de pa¨ªses del Tercer Mundo, Journalistes en Europe se encarga de conseguir becas complementarias para financiar sus gastos del viaje y estancia.
El programa fue creado en 1974 a iniciativa, entre otros, del fundador de Le Monde, Hubert Beuve-M¨¦ry. Actualmente depende de la fundaci¨®n Periodistas en Europa, con sede en Luxemburgo. Beuve-M¨¦ry sigue siendo miembro del consejo directivo, al que pertenecen tambi¨¦n otras 18 persona lidades del mundo del periodismo y de la cultura europeos, entre ellos el director de EL PA?S, Juan Luis Cebri¨¢n. "El objetivo", explica Philippe Viannay, no es promocionar Europa, sino conseguir que los profesionales que trabajan en una redacci¨®n conozcan las relaciones entre los diversos pa¨ªses europeos, as¨ª como con otros pa¨ªses del mundo. Desgraciadamente, no hay tantos periodistas con sensibilidad internacional como se podr¨ªa creer". El director del curso despliega ahora toda su energ¨ªa para extender el programa no s¨®lo en Europa sino tambi¨¦n en Jap¨®n, India, Brasil, Canad¨¢ y Estados Unidos.
"La idea es crear programas paralelos en otros pa¨ªses, algo as¨ª como Journalistes en l'Inde o Journalistes en Canad¨¢. Por ahora ya tenemos enviados 20 profesionales europeos a Jap¨®n y estoy en discusiones para lograr que otros tanto trabajen durante unos meses en la India, en los peri¨®dicos o agencias locales, compartiendo la vida de los periodistas de aquel pa¨ªs".
"Estoy seguro", insiste Philippe Viannay, "de que programas de este tipo ayudar¨¢n a crear una nueva concepci¨®n del periodismo internacional y que, a trav¨¦s de profesionales bien formados, los lectores u oyentes de un medio audiovisual tendr¨¢n un mejor conocimiento de la diversidad del mundo, lo que no supone desunir, sino, bien al contrario, unir y hacer m¨¢s dif¨ªciles e improbables los conflictos". La direcci¨®n de la sede central del programa es 33, rue du Louvre; 75002 Par¨ªs.
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