TVE emite hoy el homenaje de la Academia de Hollywood a Carlos Saura
El cine tiene, como siempre, un papel importante en la programaci¨®n de fin de semana de televisi¨®n. En este s¨¢bado y domingo, parte de un largo puente, TVE intenta retener a su clientela con un excelente programa dedicado al cineasta Carlos Saura en el espacio De pel¨ªcula; un muy aceptable western, La ciudad sin ley, protagonizado por Richard Widmark; una menos buena, pel¨ªcula de Bardem, La corrupci¨®n de Chris Miller, y con abundantes transmisiones deportivas, de las que las del Mundial de nataci¨®n se llevan la parte del le¨®n.
El espacio De pel¨ªcula, de TVE-1, tiene hoy como protagonista a Carlos Saura, objeto de un homenaje al conjunto de su obra por parte de la Academia de Holiywood y de la universidad de Los Angeles. Desde hace ya bastante tiempo, Saura es el cineasta espa?ol por antonomasia en casi todo el mundo, heredero de la condici¨®n de excepci¨®n que antes fuera para Luis Bu?uel. La industria cinematogr¨¢fica espa?ola tiene un muy escaso poder exportador, y eso explica que la representaci¨®n de nuestro talento para filmar tenga que quedar en manos de una sola persona. Adem¨¢s, en el caso de Saura su presencia en el exterior ha sido continuada, pues desde Los golfos hasta El amor brujo su trabajo ha accedido a, las pantallas de distintos pa¨ªses europeos, primero, gracias a los festivales; luego, ya estrenando comercialmente -y, a veces, con gran fortuna- los filmes. Cr¨ªa cuervos fue el primer gran ¨¦xito comercial de Carlos Saura fuera de Espa?a, concretamente, en Francia, luego vinieron Deprisa, deprisa, Bodas de sangre y, sobre todo, Carmen, que gust¨® en todo el mundo y logr¨¦ aut¨¦nticos r¨¦cords de taquilla en pa¨ªses como Alemania Occidental o Jap¨®n. Carmen, como Bodas de sangre o El amor brujo, es un producto t¨¦cnicamente muy bien acabado, fotografiado con gusto y que ofrece una imagen altamente estilizada de lo espa?ol, de la idea que de los espa?oles le tiene a menudo en el extranjero, consistente en casta?uelas, gitaner¨ªas, navajas, pasi¨®n y baile.Saura, que tiene una excelente formaci¨®n como fot¨®grafo y se inici¨® rodando un documental sobre Cuenca, realiz¨® su primer largometraje, Los golfos, en un estilo poco frecuente para el cine espa?ol de la ¨¦poca. No s¨®lo el tema era ins¨®lito -las andanzas m¨¢s o menos delictivas de unos muchachos-, sino que el tratamiento formal, rehuyendo el estudio y encontrando un mayor realismo, supon¨ªa una versi¨®n modernizada del neorrealismo, al tiempo que entroncaba con la literatura, de Aldecoa o con El Jarama, de S¨¢nchez Ferlosio. Pero la pel¨ªcula pas¨® desapercibida y hubo que esperar a La caza, premiada en Berl¨ªn, y a la pol¨ªtica del nuevo cine espa?ol para que Saura se convirtiera en la figura de su generaci¨®n.
Excelente contraimagen
La caza era una excelente contra?magen de la campa?a fraguista de los 25 a?os de paz. En el filme, de una violencia soterrada que estalla al final, estaban todas las tensiones de un pa¨ªs que los vencedores de la guerra civil consideraban como una finca propia. La caza es una primera muestra de la tendencia sauriana a la abstracci¨®n, a la f¨¢bula y los s¨ªmbolos, tendencia que empez¨® a desplegarse en Pepermint frapp¨¦ y que encontr¨® su m¨¢xima expresi¨®n en El jard¨ªn de las delicias y Ana y los lobos, planteando la primera los problemas que plantea la sustituci¨®n de un dictador ya envejecido y mostrando la segunda el acoso a que es sometida la Espa?a moderna por parte de los tres poderes cl¨¢sicos: el capital, la Iglesia y el Ej¨¦rcito.
La trayectoria de Saura, unida durante mucho tiempo a dos personajes b¨¢sicos, el productor El¨ªas Querejeta y la actriz Geraldine Chaplin, es un poco la de un retratista del inconsciente o de los fantasmas de los espa?oles. La memoria conserva los temores infantiles, las impresiones que han formado, un car¨¢cter y un pa¨ªs. En La prima Ang¨¦lica vemos el antes y el despu¨¦s de la guerra vivido 30 a?os despu¨¦s, m¨¢s como descubrimiento de un universo de frustraciones personales que de problemas pol¨ªticos. ?se es quiz¨¢ un nuevo Saura, que da mayor entidad humana a sus personajes, que ya no s¨®lo son s¨ªmbolos. Tanto en La prima Ang¨¦lica como en Elisa, vida m¨ªa hay dos bellas historias de, amor -m¨¢s tarde, en Los zancos, se quiso poner al d¨ªa todo esto, pero el filme fracas¨®-, y en Mam¨¢, cumple cien a?os nos encontramos con una comedia y con el descubr¨ªmiento de un Saura con sentido del humor.
Luego, la mala acogida de Dulces horas y Antonieta han alejado al cineasta del que hab¨ªa sido su mundo. S¨®lo Deprisa, deprisa, remake con ¨¦xito y emoci¨®n de Los golfos, interfiere satisfactoriamente en la trilog¨ªa irtusical, ahora parece que cerrada para llevar adelante El Dorado, nueva aproximaci¨®n a Lope de Aguirre y segundo retrato de un peirsonaje hist¨®rico por parte de Saura, que se interes¨® por El Tempranillo en Llanto por un bandido, de manera que mientras el cineasta se dispone a trabajar en una gran producci¨®n conmemorativa del descubrimiento de Am¨¦rica, en Am¨¦rica se le tributa un homenaje que viene a compensarle de las varias designaciones para el Oscar que nunca se concretaron en premios.
Carlos Saura, homenaje de Hollywood se emite hoy a las siete de la tarde por TVE-1.
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