Fern¨¢ndez Ord¨®?ez inicia hoy su primer viaje a Oriente Pr¨®ximo tras el reconocimiento de Israel
La visita que hoy inicia a Siria el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, es el primer paso de importancia dado en Oriente Pr¨®ximo con la diplomacia espa?ola desde el establecimiento de relaciones con Israel, el pasado enero. Al emprender el camino de Damasco, Espa?a reconoce el papel clave de Siria en cualquier intento de pacificar una regi¨®n en permanente turbulenciadesde hace cuatro d¨¦cadas.Siria es un pa¨ªs de apenas 12 millones de habitantes, pobre en recursos naturales, sin tan siquiera el petr¨®leo de otros pa¨ªses ¨¢rabes, con una grave carencia de divisas extranjeras y de productos b¨¢sicos de consumo. Y no obstante, no es posible construir nada en Oriente Pr¨®ximo sin Siria.
Si hiabiera que sintetizar en una sola palabra el por qu¨¦ Siria tiene un peso muy superior a su poder real, ¨¦sta ser¨ªa un nombre propio: Hafez El Assad. Al presidente sirio se le llama con frecuencia el Bismarck de Oriente Pr¨®ximo, porque desde que en 1970 accedi¨® al poder, se ha revelado como un estratega de primer orden.
Assad es duro e implacable pero conoce sus l¨ªmites, nunca se lanza a aventuras est¨¦riles, Sus principales cualidades son su capacidad para la supervivencia pol¨ªtica, su habilidad para desbaratar el juego ajeno y su paciencia de cazador. Pertenece a una comunidad minoritaria en Siria, la secta esot¨¦rica de los alauitas, mientras que la mayor¨ªa de la poblaci¨®n es musulmana, ortodoxa o sunita.
En Beirut Oeste se hace realidad estas ¨²ltimas semanas el milagro sirio. El sector musulm¨¢n de la capital libanesa conoce su mejor momento de paz y orden desde febrero de 1984. Para ello ha bastado saber que los sirios estaban all¨ª. Son apenas unos centenares de panteras rosas o soldados de elite, su presencia es m¨¢s bien discreta, pero son suficientes para que inificianos, pistoleros y secuestradores hayan pasado temporalmente a la clandestinidad en el centro de la ciudad. Siria impone respeto.
La 'traici¨®n' espa?ola
Cuando el pasado enero Espa?a estableci¨® relaciones diplom¨¢ticas con Israel, su tradicional prestigio ante el mundo ¨¢rabe toc¨® fondo. No hubo reacciones espectaculares, porque la operaci¨®n estaba preparada desde hac¨ªa tiempo y porque los ¨¢rabes se encontraban entonces tan desnudos como ahora para emprender una represalia con la mayor¨ªa de los ¨¢rabes, los sirios vieron en el intercambio de embajadores entre Madrid y Tel Aviv una especie de traici¨®n.
Siria solicit¨® entonces que la Liga ?rabe sancionara a Espa?a, pero no consigui¨® su objetivo. Desde ese mismo instante, el embajador espa?ol en Damasco, Felipe de la Morena, inici¨® un proceso de recalentamiento de relaciones, cuyo primer resultado fue la visita a Siria el pasado mayo de Luis Y¨¢?ez, secretario de Estado para la Cooperaci¨®n Internacional.
Siria pertenece junto con Argelia y Libia al llamado Frente de la Firmeza frente a Israel. En la pr¨¢ctica, dada la geograf¨ªa, es el ¨²nico pa¨ªs ¨¢rabe que mantiene desenterrada el hacha de la guerra en las fronteras mismas de Israel.
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