Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, recibido con frialdad Siria

El ministro de Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, viaj¨® ayer a Damasco con el prop¨®sito de mejorar las relaciones con Siria y, eventualmente, entrevistarse con d. presidente Hafez d Assad, lo que estaba previsto el martes, pero d l¨ªder sirio abandon¨¦ ayer Damasco rumbo a Libia. La visita, de tres d¨ªas, es la primera de un ministro espa?ol aOriente Pr¨®ximo desde el reconocimiento de Israel, el 17 de enero. Siria ha tratado el viaje con frialdad y ha aaplazado hasta hoy el encuentro de Fern¨¢ndez Ord¨®?ez con su hom¨®logo Al Chareh, previsto para ayer.

El ministro de Asuntos Exteriores sirio, Al Cliarel¨ª pospuso hasta hoy su entrevista con el ministro espa?ol -al que recibi¨® en el aeropuerto, de Diamasco- porque ten¨ªa que recibir a sus hom¨¦logos libio e iran¨ª, que hab¨ªan llegado tambi¨¦n ayer a la capital siria. Paralelamente, se hac¨ªa p¨²blico que el presidente Assad hab¨ªa abandonado el pa¨ªs, poco antes de que llegara. Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, liara tirasliadarse a Libia. Ello, hace dudar que el l¨ªder sirio pueda recibir ?al rninistro espa?ol ma?ana martes como se esperaba. La a¨²senciade Assad, salvo en el caso de que regresara hoy a Damasco, reduc¨ªr¨ªa necesariamente el perfil diplom¨¢tico del viaje, haciendo un tanto problem¨¢ticos los des cos de elevar el nivel de las relaciones con Siria, que se hab¨ªan deteriorado desde el reconocirniento espa?ol de Israel.A la vista de las circunstancias, Fern¨¢ndez Ord¨¢?ez tuvo que contentarse: con dejar sus maletas en el hotel y salir a visitar el zoco y la mezquita de los Orneyas, en compa?¨ªa del embajador espa?ol en Damasco, Felipe de la Morena. Todo el clima que ha precedido a la visita, con constantes cambios en los planes por parte siria, hacen que el encuentro con Assad que el ministro espa?ol consideraba "casi seguro", pero que no estaba confiririado por parte sinia, sea ahora s¨®lo una especulaci¨®n.

El ¨¦xito del recalentamiento de relaciones con Siria parec¨ªa depender en buena medida de la entrevista con Assad. El presidente sirio, de movimientos imprevisibles y delicada salud, ha estado descansando estos ¨²ltimos d¨ªas en el norte del pa¨ªs.

El ex ministro de Exteriores Fernando Mor¨¢n fue el ¨²ltimo miembro del Gobierno espa?ol que visit¨® Siria, en abril de 1984. En aquella ocasi¨®n, Mor¨¢n se entrevist¨® con el presidente Assad. Pero entre aquel y este viaje ha mediado el establecimiento de relaciones diplom¨¢ticas entre Espa?a e Israel el 7 de enero de este a?o, con el consiguiente disgusto sirio. Como signo de frialdad, la Prensa damascena apenas ha informado de la llegada del ministro espa?ol.

Fern¨¢ndez Ord¨¢?ez deber¨¢ despejar en sus interlocutores sirios, por a?adidura, las dudas que en ¨¦stos ha provocado la intencionada filtraci¨®n de una emisora militar israel¨ª que hab¨ªa anunciado que ministro espa?ol viajar¨ªa a Tel Aviv al t¨¦rmino de su estancia en Damasco. Fern¨¢ndez Ord¨¦?ez ha explicado que, aunque con toda probabilidad ir¨¢ a Israel a mediados de septiembre, al t¨¦rmino de esta visita regresar¨¢ a Madrid. La pasada primavera, Luis Y¨¢?ez, secretario de Estado para Cooperaci¨®n Internacional, visit¨® Damasco. Fue el primer paso de una operaci¨®n de mejora de relaciones, emprendida por el Ministerio de Asuntos Exteriores. Y¨¢?ez tuvo que escuchar palabras muy duras del vicepresidente sirio Abdel Jalini Jhadam.

Espa?a ha otorgado a la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP) un estatuto (le: rango diplom¨¢tico, aunque sin. equipararla a una embajada por carecer de los derechos a inviolabilidad de sus locales e inmunidad de sus representantes. Siria, sin embargo, no ha aplaudido especialmente la medida porquese opone al liderazgo de Yasir Arafat en la OLP, aunque tampoco ha permanecido insensible al gesto, seg¨²n fuentes oficiosas de la diplomacia espa?ola.

Siria pidi¨® en enero a la Liga ?rabe la adopci¨®n de sanciones contra Espa?a por el establecimiento de relaciones diplom¨¢ticas con Israel. No las hubo, y tampoco se rompi¨® el contacto entre Madrid y Damasco. Los embajadores siguieron en sus puestos, aunque el espa?ol tuviera que sufrir una patente frialdad de sus interlocutores sirios. La actividad del embajador Felipe de la Morena y el pragmatismo de la pol¨ªtica exterior siria, que lleva muy directamente Assad, impidieron la ruptura.