Bajo el signo de la imagen documental

La temporada- comenz¨® triste. Jacques-Henry Lartigue (Francia, 1894) muri¨®. Creo que Lartigue consigui¨® capturar ese p¨¢jaro azul -"los perfumes, el aire, las cosas que pasan"- y detenerlo en cientos, miles de superficies fotogr¨¢ficas a nuestra disposici¨®n para siempre. 'La exposici¨®n de Fotopr¨¦s est¨¢ cada a?o m¨¢s llena de fotograf¨ªas con contenidos, que nos cuentan m¨¢s y mejor las cosas. L¨¢stima que los jurados premien con tanto entusiasmo lo anecd¨®tico. Eso hace que los fot¨®grafos que no tengan fotos curiosas o raras no se presenten. ?Para qu¨¦? ?Es posible que ni siquiera tengan en cuenta su foto! Los L¨®pez Vicent, qu¨¦ fotograf¨ªa tan extraordinaria su Poliz¨®n africano, qu¨¦ perfecci¨®n la de su discurso. Si se diesen los grandes premios a fotos como ¨¦sa creo que el fotoperiodismo saldr¨ªa muy beneficiado. Cualquiera de las fotograf¨ªas de j¨®venes, de Miguel A. Gonz¨¢lez; o Melilla, de Pablo Juli¨¢; o cualquiera de las fotograf¨ªas de Juantxu Rodr¨ªguez; y claro, c¨®mo no, las de Pedro Madue?o, V¨ªctimas de la carretera, en especial la del gato ante la rueda a la derecha del encuadre, y la ciudad, su tr¨¢fico y seriales de tr¨¢fico apoder¨¢ndose de la superficie. Sin olvidar a Carlos de Andr¨¦s, Andr¨¦s Palomino Salazar y Carlos Miralles, entre algunos otros.

De Sander y Arbus hay mucho que decir. El acierto de la doble exposici¨®n es aleccionador. Alain Dupuy, el comisario de ambas exposiciones, ha hecho un trabajo de selecci¨®n y presentaci¨®n tan acertado, tan magistral, que nos ha abierto nuevas posibilidades de aprendizaje.

Y Polaroid Image presenta, naturalmente, y en la pista central, a Valent¨ªn Sama. Sus polaroid en el Museo Espa?ol de Arte Contempor¨¢neo son aut¨¦nticas obras maestras de nuestro tiempo. Madrid visto por Sama, especialmente El cine Capitol, o la Gran V¨ªa vista desde arriba, con el edificio Espa?a a la izquierda, es toda una lecci¨®n de dominio del color y la forma en el dificil¨ªsimo oficio y arte de la fotograf¨ªa. Las series de Pere Formiguera y de Ceferino L¨®pez son fotograf¨ªas igualmente interesantes y que necesitan, reclaman nuestra dedicaci¨®n y atenci¨®n m¨¢s absoluta. Detenerse ante esta triple muestra y plantearse las posibilidades de adecuaci¨®n entre discurso y nuevas tecnolog¨ªas no puede ser m¨¢s apasionante.