El Tribunal de Pau da via libre a la extradici¨®n del presunto 'etarra' Jose Mar¨ªa Bereciart¨²a

El Tribunal de Pau concedi¨® ayer a la justicia espa?ola la primera extradici¨®n de un presunto etarra con estatuto de refugiado pol¨ªtico en Francia. La C¨¢mara de Apelaci¨®n de Pan autoriz¨® la extradici¨®n de Jos¨¦ Mar¨ªa Bereciart¨²a Etxarri considerando cuatro de las cinco acusaciones planteadas por la justicia espa?ola y tras comprobar que el presunto activista no pudo cometer uno de los atentados que se le imputaban. O¨ªda la sentencia, Bereciart¨²a, de 32 a?os, natural de San Sebasti¨¢n y presunto ex miembro del comando Madrid, fue devuelto a la prisi¨®n de Pau en espera de que el Gobierno franc¨¦s decida su destino inmediato.

El dictamen del Tribunal no obliga al Gobierno de Par¨ªs, pero una negativa judicial hubiera impedido al Ejecutivo franc¨¦s plantearse siquiera la extradici¨®n a Espa?a de Bereciart¨²a.El grado de colaboraci¨®n existente entre los Gobiernos espa?ol y franc¨¦s, la psicosis de atentados vivida recientemente en Par¨ªs y la preocupaci¨®n por frenar las acciones del terrorismo colocan a Jos¨¦ Mar¨ªa Bereciart¨²a en una situaci¨®n muy comprometida, si bien portavoces del Gobierno franc¨¦s aludieron d¨ªas atr¨¢s a la posibilidad de deportar a terceros pa¨ªses a aquellos activistas de ETA que dispongan de estatuto de refugiado pol¨ªtico.

Un atentado que no cometi¨®

El error en el que incurri¨® la justicia espa?ola al implicar a Bereciart¨²a en un atentado que no pudo cometer por encontrarse ese d¨ªa bajo control policial en Valensolles, en el suroeste franc¨¦s, ha provocado un fuerte malestar en medios vasco-franceses y puede condicionar la decisi¨®n del Gobierno franc¨¦s. La sentencia ser¨¢ recurrida por el abogado de Bereciart¨²a, pero el recurso no tiene car¨¢cter suspensivo y no puede evitar que el Gobierno franc¨¦s entregue en cualquier momento al presunto activista.Jos¨¦ Mar¨ªa Bereciart¨²a se enfrenta ahora a la posibilidad de ser condenado en Espa?a a la m¨¢xima pena de prisi¨®n en el caso de que se demuestre su participaci¨®n en los otros cuatro atentados perpetrados entre 1979 y 1981 en Guip¨²zcoa, Logro?o y Madrid, que causaron la muerte a un total de siete personas e hirieron a vanas m¨¢s.

En c¨ªrculos nacionalistas del Pa¨ªs Vasco franc¨¦s se apunta que Bereciart¨²a, casado con una ciudadana francesa, se encontraba desde hace a?os desconectado del aparato de ETA Militar en Francia y viv¨ªa confiado en su condici¨®n de refugiado pol¨ªtico, condici¨®n que perdi¨® en 1973 y que recuper¨® previo recurso dos a?os m¨¢s tarde.

Su decisi¨®n de prescindir, antes del juicio, del equipo habitual de abogados encargados de la defensa de los refugiados vinculados a ETA y de encomendar su defensa al letrado parisino Jacques Vergez denota, seg¨²n esas fuentes, la b¨²squeda. de una salida personal de un hombre sobre el que recaen grav¨ªsimas acusaciones. Bereciart¨²a har¨ªa el n¨²mero 54 de los refugiados presuntamente vinculados con ETA deportados por Francia fuera del continente europeo o entregados a Espa?a. ,

Un total de 40 supuestos activistas, entre los que figura la antigua plana mayor de ETAm con las excepciones de Francisco M¨²gica Garmendia, Artapalo, y de Santiago Arr¨®spide Sarasola, han sido deportados a terceros pa¨ªses y los otros 13 entregados a Espa?a, diez de ellos directamente, de polic¨ªa a polic¨ªa, al margen del procedimiento judicial franc¨¦s.

Por otra parte, la Liga Francesa de los Derechos del Hombre afirm¨® ayer en un comunicado que la extradici¨®n de Bereciart¨²a viola el articulo 33 de la Convenci¨®n de Ginebra. Ese. art¨ªculo proh¨ªbe expulsar a un refugiado a un territorio de un pa¨ªs donde su vida y su libertad estuviesen amenazadas.