Cuando el Segura se desborda
Orihuela vivi¨® la noche m¨¢s larga de la historia de sus inundaciones
Los 52.600 habitantes de Orihuela, la ciudad m¨¢s meridional del Pa¨ªs Valenciano, situada en el l¨ªmite con la provincia de Murcia, vivi¨® la noche m¨¢s larga en la madrugada del lunes al martes, ante el temor de un total desbordamiento del r¨ªo Segura -el tercero en lo que va de a?o-, que aneg¨® algunas zonas de la ciudad y caus¨® p¨¦rdidas en varias pedan¨ªas pr¨®ximas, en las que tuvieron que ser evacuadas varias familias. Ayer disminuy¨® el nivel de las aguas del Segura a su paso por la ciudad, que comenz¨® a recobrar su pulso normal al mismo tiempo que desaparec¨ªa el riesgo de una nueva gota
En la jornada de ayer se cumpl¨ªan varios aniversarios siniestros en Valencia. El 29? aniversario de la riada de Valencia, que provoc¨® 85 muertos en 1957, y el cuarto de la rotura del pantano de Tous y las consiguientes inundaciones en la comarca de La Ribera.En Orihuela (Alicante), grupos de vecinos permanecieron durante toda la madrugada del martes vigilando el nivel de las aguas del Segura, que hab¨ªa aumentado hasta alcanzar la cota de seis metros a su paso por el puente de Levante. M¨¢quinas excavadoras realizaron tareas de drenaje y limpieza del r¨ªo para evitar un desbordamiento prematuro que, con todo, se esperaba alrededor de las dos de la ma drugada. Entre tanto, los servi cios de Protecci¨®n Civil, Cruz Roja, Ej¨¦rcito de Tierra y Polic¨ªa Nacional y Municipal permanecieron en estado de alerta permanente. Fueron evacuadas a lo largo de la noche varias familias de las pedan¨ªas de El Escorial y Las Norias.
Alrededor de las cinco de la tarde, el ministro de Sanidad, Juli¨¢n Garc¨ªa Vargas, que hab¨ªa inaugurado un centro hospitalario en Caravaca (Murcia), pas¨® por Orihuela a gran velocidad, sin detenerse, como una exhalaci¨®n. El alcalde de esta ciudad, Luis Fernando Cartagena, de AP, subray¨® la indignaci¨®n de las autoridades locales por el incidente.
En ning¨²n momento se registraron escenas de p¨¢nico, a diferencia de algunos municipios murcianos. El ambiente que ofrec¨ªa la ciudad era el de unos vecinos que, aunque preocupados, parec¨ªan acostumbrados a estas situaciones. No fueron pocos los que expresaron su descontento en voz alta por lo que consideran .escasa atenci¨®n del Gobierno a las avenidas del Segura", despu¨¦s de tres desbordamientos de distinta consideraci¨®n en los ¨²ltimos meses.
A lo largo de la tarde el caudal del Segura aument¨® ligeramente y provoc¨® inundaciones de varias plazas y calles de la ciudad de Orihuela, a trav¨¦s de los alcantarillados. Ello motiv¨® problemas en el alumbrado p¨²blico de las zonas anegadas. Por lo dem¨¢s, en ning¨²n momento falt¨® suministro el¨¦ctrico.
Sacos de tierra
En varios puntos de los m¨¢rgenes del cauce fueron instalados sacos de tierra para reforzar los muros de contenci¨®n del Segura. Este recurso, conocido como la soluci¨®n egipcia, es ultilizado, seg¨²n Cartagena, por los egipcios para frenar las subidas de caudal del Nilo. El mismo sistema fue practicado por los vecinos de Las Norias, El Arenal, La Campaneta y otras pedan¨ªas.En Las Norias aurrient¨® sensiblemente la tensi¨®n hacia las dos de la madrugada, cuando revent¨® en varios puntos la reguera de La Alquibia, acequia subterr¨¢nea cuyo caudal hab¨ªa anegado completamente la huerta en sus alrededores horas antes. Parte de las 300 personas que habitan este medio centenar de viviendas modestas, situadas a unos tres kil¨®metros de Orihuela, optaron por evacuar la zona. La mayor¨ªa, no obstante, se mostr¨® remisa a abandonar sus hogares.
Unas 30 personas permanec¨ªan en una peque?a pendiente. Los lugare?os de m¨¢s edad afirmaban no recordar inundaciones de esta magnitud, al mismo tiempo que se mostraban esc¨¦pticos ante las posibles soluciones que deber¨ªa adoptar, seg¨²n ellos, la Administraci¨®n.
Carmen G¨¢lvez se pronunciaba a favor de que se limpiase el r¨ªo y "se pongan muros". Otros, pese a la gravedad de la situaci¨®n, se atrevieron a bromear con el redactor gr¨¢fico mientras achicaban el agua de sus casas. Un vecino lleg¨® a exclamar: "S¨¢canos una foto y se la enviaremos a Felipe Gonz¨¢lez".
Por otra parte, el alcalde ped¨¢neo de El Arenal, Manuel C¨¢mara, se vio obligado a permanecer en su domicilio cuando dirig¨ªa una brigada de Protecci¨®n Civil, al quedar completamente anegada su casa.
A las ocho de la ma?ana de ayer el caudal del r¨ªo descendi¨® notablemente. La ciudad recobraba su pulso normal.
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