Un funcionario de la Rep¨²blica entrega una valiosa colecci¨®n de orfebrer¨ªa
'El portapaz de Ucl¨¦s' hab¨ªa desaparecido en 1937
El platero conquense Francisco Becerril, uno de los mejores artistas espa?oles de la ¨¦poca, tall¨® a mediados del siglo XVI, por encargo de los caballeros de la orden de Santiago, una verdadera joya de orfebrer¨ªa conocida como el Portapaz de Ucl¨¦s, que ha sido recuperada ahora tras vagar por medio mundo durante 49 a?os. Un antiguo funcionario de la Rep¨²blica entreg¨® 14 piezas del Portapaz al presidente de Castilla-La Mancha, Jos¨¦ Bono. El Portapaz, labrado en oro y plata y acompa?ado de esmaltes, desapareci¨® en 1937 de la catedral de Ciudad Real, di¨®cesis a la que pertenec¨ªa el funcionario.
El que fuera director general de la Caja de Reparaciones del Ministerio de Hacienda de la Rep¨²blica, Amaro del Rosal, que se autodefine como ateo, entreg¨® el pasado jueves 14 piezas recuperadas del Portapaz al presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Jos¨¦ Bono.Del Rosal ha viajado durante casi medio siglo con una cajita que conten¨ªa unas peque?as piezas que ¨¦l mismo bautiz¨® como monitos. Las figuras recuperadas, la mayor¨ªa de las que conformaron el retablo, representan im¨¢genes de los ap¨®stoles San Pedro, San Juan, San Pablo y Santiago, adem¨¢s de Un medall¨®n que ilustra la Asunci¨®n de Mar¨ªa y otra figura del Salvador que remata el Portapaz.
El Portapaz de Ucl¨¦s, uno de los tres que se conservan en el mundo -junto a uno de Estambul y otro de Roma- serv¨ªa de pieza ritual en las ceremonias cat¨®licas para simbolizar la paz. Los caballeros de la orden de Santiago, que regentaban en el siglo XVI el monasterio de Ucl¨¦s, encargaron a Becerril el peque?o retablo para colocar una placa bizantina del siglo XI y que representaba una an¨¢stasis, tra¨ªda quiz¨¢ en el per¨ªodo de las Cruzadas. Tras la desamortizaci¨®n de Mendiz¨¢bal, el cabildo de las ¨®rdenes militares deposit¨® la joya en la catedral de Ciudad Real alrededor de 1877, fecha en la que ya aparece documentada.
Custodia de un tesoro
En 1937, con los avatares de la guerra civil, el Portapaz desaparece de la catedral de Ciudad Real. Posteriormente Amaro del Rosal encuentra unas, peque?as piezas en la Caja de Reparaciones del Ministerio de Hacienda -dep¨®sito de objetos de valor- que entonces ten¨ªa su sede en Valencia. Pero Del Rosal no sospech¨® entonces que esas piezas pertenecieran al Portapaz, a pesar de que ten¨ªa conocimiento de su desaparici¨®n.Como las investigaciones no dieron fruto positivo, el responsable de la Caja de Reparaciones decidi¨® custodiarlas. Con su exilio, Amaro del Rosal las llev¨® consigo por medio mundo. Los monitos, como ¨¦l llamaba a las 14 diminutas piezas, conocieron a lo largo de medio siglo las penas carcelarias, viajaron en buques y volaron por varios continentes hasta su regreso a Espa?a en 1977. "Yo quer¨ªa encontrar alguna documentaci¨®n para identificar las piezas", dice. Tras varias consultas, a trav¨¦s de un amigo dio con el historiador del Arte Fernando Mart¨ªn; logr¨® desvelar el misterio hace unos tres meses.
"Descargo de mi conciencia este problema que llevaba encima; ya me puedo morir tranquilo". Ahora, las piezas recuperadas ser¨¢n entregadas a la di¨®cesis de Ciudad Real, en cuya catedral ser¨¢n expuestas.
Babelia
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