Una auxiliar de cl¨ªnica se acusa ante un juez de haber practicado m¨¢s de 500 abortos

Adela Sauce, una auxiliar de cl¨ªnica de 36 a?os, se hizo ayer responsable ante un juez de Castell¨®n de haber practicado m¨¢s de 500 abortos en los ¨²ltimos 10 a?os. Adela Sauce forma parte del colectivo Acuario, del que es miembro el ginec¨®logo Pere Enguix, procesado por tres presuntos delitos de aborto en 1984. Seg¨²n declar¨® la mujer, los distintos colectivos sanitarios en los que ha estado integrada han realizado, desde 1966 y s¨®lo en el Pa¨ªs Valenciano, m¨¢s de 15.000 intervenciones de interrupci¨®n de embarazo. Adela Sauce qued¨® en libertad tras prestar declaraci¨®n.El interrogatorio de ayer forma parte de unas diligencias prev¨ªas abiertas en marzo de 1985 por el Juzgado n¨²mero 4 de Instrucci¨®n de Castell¨®n. En aquellas fechas, la fiscal¨ªa de esta Audiencia present¨® denuncia por presuntos delitos de aborto a ra¨ªz de que el diario Mediterr¨¢neo publicara un reportaje sobre c¨®mo y d¨®nde se abortaba en aquella ciudad.

Hasta el momento, siete personas han prestado declaraci¨®n ante el Juzgado: Amparo Panadero, la periodista firmante de la informacicin, y seis trabajadores de la cl¨ªnica, instalada en un piso situado en El Grau. La ¨²nica autoinculpaci¨®n ha sido la de Adela Sauce.

Adela Sauce reconoci¨®, a preguntas del juez, que la cl¨ªnica en la que trabajaba se dedicaba, entre otros menesteres, a practicar abortos por el m¨¦todo Karman (por aspiraci¨®n). Se confes¨® autora de m¨¢s de 500 desde 1976, algunos de ellos en Castell¨®n. Y afirm¨® que Acuario y otros colectivos con los que ha colaborado han realizado m¨¢s de 15.000 abortos en este lapso de tiempo. Adela Sauce se neg¨® a revelar los nombres de las mujeres que abortaron en su cl¨ªnica.

Tras el interrogatorio, que dur¨® 20 minutos, Federico L¨¢zaro Guil, el titular del juzgado, dijo a los periodistas presentes que se negaba a hacer declaraciones y cerr¨® tras de s¨ª la puerta de su despacho. Fue por ello imposible saber si pensaba procesar a Adela Sauce u ordenar su ingreso en prisi¨®n, como ha ocurrido en el caso de una cl¨ªnica de Salamanca. Ninguna decisi¨®n en este sentido ha sido tomada por el momento. Ni la mujer ni su abogado, Virgilio Latorre, recibieron del juez indicaci¨®n alguna.

La auxiliar de cl¨ªnica explic¨® a los periodistas que, pese a no ha ber abortado, ha v¨ªvido de cerca este problema. Su hermana falleci¨® a consecuencia de un aborto que se provoc¨® ella misma con una aguja de tricotar. "Aquello y el hecho de que mi padre no quisiera asistir a su entierro me impresion¨®", asegur¨®.