12 centros de salud puestos en marcha por el Gobierno regional prestan atenci¨®n primaria en Madrid

Los centros de salud, o equipos de atenci¨®n primaria, o unos m¨¦dicos que est¨¢n en el piso de arriba de un ambulatorio, seg¨²n la suerte en la ubicaci¨®n y el distinto grado de comprensi¨®n de quienes trabajan en ellos, llegaron despu¨¦s de numerosos intentos, diversas concepciones, muchos cambios de nombre y sin la previa aprobaci¨®n de la ley de Sanidad. Son 12, por ahora, los centros de salud puestos en marcha por la Comunidad de Madrid.

En la Cornunidad de Madrid funcionan 12 centros de salud, de los que tres est¨¢n en los distritos de Fuencarral, Tetu¨¢n y Orcasitas -en la capital-, y el resto se reparte en la zona metropolitana: Alcorc¨®n, Fuenlabrada, Getafe, Pozuelo, Parla, Coslada, Valdemoro y Aranjuez. Cinco de ellos tienen poco m¨¢s de un a?o de funcionamiento, y el resto, escasos meses. Para diciembre est¨¢n previstos dos nuevos, en Orcasur y Pe?a Grande.El objetivo de todos los centros es la atenci¨®n primaria. Un horario continuado durante toda la jornada y los problemas de organizaci¨®n, in inraestructura y dotaci¨®n son comunes a todos ellos, con s¨®lo una excepci¨®n: el centro de Pozuelo. Aqu¨ª, una especial y casi ¨ªntima relaci¨®n con el hospital Puerta de Hierro y la personalidad de los m¨¦dicos re¨²nen en ¨¦l un buen n¨²mero de peculiaridades. Adem¨¢s es un centro dise?ado con gran primor para el desarrollo de sus funciones, lo que en el ¨¢rea de docencia, y en comparaci¨®n con el resto, le hacen aparecer como privilegiado para unos y objeto de envidias para otros.

Cuando en algunos centros encontrar un folio se puede convertir en ardua tarea, carentes de presupuestos propios, Pozuelo dispone de todo lo necesario para un buen funcionamiento administrativo. Aunque es de la primera hornada de centros, de los creados el pasado a?o, su historia viene de antes, de cuando logr¨® un acuerdo con el Ayuntamiento de Pozuelo, entonces de UCD, y dedic¨®, en un chal¨¦, sus esfuerzos a la docencia de las primeras promociones de m¨¦dicos de familia. Es tambi¨¦n el ¨²nico centro que ha contado con una asociaci¨®n de amigos.

Ante la demanda del ciudadano de que se cure su enfermedad, los equipos de atenci¨®n primaria pretenden a?adir otro elemento: proteger su salud. El principal obst¨¢culo para ello, la parte comunitaria de este nuevo modelo sanitario, es la ausencia de una distribuci¨®n racional de la poblaci¨®n, con dos problemas derivados: la imposibilidad de detectar enfermedades y programar campa?as, lo que, en opini¨®n de Armando Nevado, m¨¦dico de familia del centro de Tetu¨¢n, conduce a unos fuegos cruzados con el resto de las instituciones sanitarias que conviven en la zona.

Cupos de cartillas

La creaci¨®n de centros de salud est¨¢ sometida a los cupos de cartillas que quedan vacantes y a la reconversi¨®n de los m¨¦dicos generales, lo que, en opini¨®n de un responsable del Ministerio de Sanidad, convierte la tarea en un arte de birlibirloque.F¨¦lix Miaja es el coordinador de tarde del centro de Alcorc¨®n. M¨¦dico de familia de la primera promoci¨®n, admite tener ciertas dosis de idealismo y espera que el proyecto se asiente. "Lo que queremos es educar", afirma, y plantea como objetivo final la modificaci¨®n del estado de salud de una poblaci¨®n. La idea topa con otro hecho com¨²n: el de una realidad en la que no hay zona delimitada de actuaci¨®n.

Los responsables m¨¢s directos de esta atenci¨®n primaria son los m¨¦dicos de familia y comunidad, fruto de la especialidad creada en Espa?a en 1977, que tambi¨¦n se obtiene por convalidaci¨®n. La atenci¨®n primaria as¨ª puesta en marcha es, en opini¨®n generalizada, patrimonio de una concepci¨®n progresista de la medicina. Poseer el t¨ªtulo aporta m¨¢s puntos en el baremo para acceder a los centros de salud, y, aunque hay una mayor¨ªa de estos m¨¦dicos, los coordinadores suelen ser m¨¦dicos internistas o pediatras, sobre todo en los prirneros que se abrieron.

El m¨¦dico tiene una jornada de siete horas, una media de 1.000 cartillas y un sueldo que se construye entre las retribuciones con este cupo y un suplemento, sistema del que todos discrepan. Su jornada laboral se reparte entre las consultas y las sesiones cl¨ªnicas, consecuencia de su formaci¨®n hospitalaria, seg¨²n opina la mayor¨ªa; y pr¨¢ctica, que consideran imprescindible.