Neoandaluz

Es de agradecer al se?or Pablo Bach (Imaginaci¨®n andaluza, cartas al director, 18 de octubre) que nos recuerde que la feria de Francfort estuvo dedicada oficialmente a la India. Resulta oportuno este recordatorio porque, como acostumbra a suceder cada a?o, los actos oficiales emanados desde la cumbre de la feria tienen un significado indiscutiblemente valioso, aunque m¨¢s bien simb¨®lico, ya que los editores se dedican b¨¢sicamente, como es l¨®gico, a sus preocupaciones habituales.Pero el se?or Pablo Bach afirma tambi¨¦n que "Espa?a pas¨® totalmente inadvertida". Tal debi¨® de ser su particular impresi¨®n, pero no, por fortuna, la de los m¨¢s sagaces editores internacionales, como, por ejemplo, la de Peter Mayer, el director de Penguin, quien afirm¨® en varias ocasiones en mi presencia que, as¨ª como el a?o pasado el m¨¢ximo inter¨¦s lo despert¨® la nueva literatura italiana, este a?o ocurri¨® con la espa?ola. Prueba de ello son los numerosos contratos efectuados en esta feria, no s¨®lo de cl¨¢sicos come, Unamuno, Garc¨ªa Lorca y Valle-Incl¨¢n, sino tambi¨¦n de nuevos narradores como Mendoza, Pombo, Garc¨ªa Morales, Fern¨¢ndez Cubas, Tomeo, Vila-Matas, etc¨¦tera.

Conf¨ªo en que esta realidad, como la del inter¨¦s algo fren¨¦tico que suscit¨® el libro de Maruja Torres ?Oh, es ¨¦l!, no le resulte intolerable al agraviado se?or Bach, quien, con talante tan poco hind¨², arremeti¨® contra el neoandaluz Francesc Arroyo.-