Arroyomolinos, el pueblo que quiere ser grande

Arroyomolinos, un municipio situado a 22 kil¨®metros de Madrid, desde el que se observa M¨®stoles y Fuenlabrada, ha decidido dejar de ser peque?o. Sus escasos 303 habitantes le impiden tener un servicio m¨¦dico, comercial y educativo, un transporte regular y un poco de vida para la juventud. Sin llegar a convertirse en un monstruo como sus vecinos, Arroyomolinos quiere tener 2.000 habitantes, lo que le dar¨ªa derecho a esas dotaciones.

El autob¨²s visita el pueblo tres veces al d¨ªa; el m¨¦dico, cada viernes. Ese d¨ªa, m¨¢s de medio pueblo se concentra ante su puerta, la mayor¨ªa para pedir recetas. Una vez a la semana, tambi¨¦n, una camioneta llega cargada de provisiones.El alcalde, ?ngel Luis P¨¦rez, un socialista que va de independiente, tal y como ¨¦l se define, pretende llegar a los 2.600 habitantes a trav¨¦s de la promoci¨®n de viviendas unifamiliares. "Hacer una peque?a ciudad residencial, pero con vecinos que residan en el pueblo todo el a?o. Crecer lo suficiente para que haya m¨¢s servicios".

Para ello est¨¢ prohibida la construcci¨®n en bloque y suprimida la tercera altura: "Hay un exceso de oferta de pisos en los municipios que nos rodean, por eso deb¨ªamos ofrecer algo m¨¢s atractivo", explica este alcalde de 35 a?os, que gobierna sin oposici¨®n.

Los cinco concejales pertenecen a su partido, el GIPPA (Grupo Independiente para el Progreso de Arroyomolinos). A pesar de esta unanimidad, en los plenos suele haber discusiones. Incluso los concejales han llegado a desestimar mociones de la alcald¨ªa, como una que propon¨ªa aumentar el endeudamiento municipal.

Detenida la emigraci¨®n

Actualmente se est¨¢n construyendo 423 chal¨¦s en el pueblo. A ¨¦stos hay que a?adir 26 m¨¢s que se levantar¨¢n en el hasta hoy campo de f¨²tbol y que son fruto de una curiosa operaci¨®n. "Nosotros quer¨ªamos un polideportivo", explica el alcalde, "y para obtener el dinero calificamos el suelo del campo de f¨²tbol de casco urbano y lo subastamos. El dinero obtenido se destin¨® a la construcci¨®n del polideportivo".El presupuesto municipal de Arroyomolinos se ha quintuplicado en cuatro a?os. En 1983 era de 12 millones de pesetas. El pr¨®ximo a?o ser¨¢n 70. En este tiempo el pueblo ha abierto otro bar -ya son cuatro-, y ha conseguido retener a sus j¨®venes, que no emigran desde hace diez a?os, porque "han encontrado trabajo en los pueblos de alrededor y prefieren seguir viviendo en el pueblo", explica ?ngel Luis P¨¦rez.

Arroyomolinos est¨¢ cambiando de aspecto. Muchas de las 160 casas del pueblo han sido recientemente remozadas en una tarea en la que todos han aportado su esfuerzo. La casa consistorial es nueva, y tambi¨¦n el parque que rodea al grupo escolar, en el que estudian 26 alumnos de primera etapa de EGB, que se agrupan en la misma clase. La carretera, por fin, empieza a arreglarse gracias a las 50 visitas que el alcalde ha realizado a los responsables de la Comunidad: "Hay que ir mucho a Madrid para conseguir cosas", a?ade.

El alcalde califica su pueblo como "la joya del Suroeste". Igual idea debe tener una sociedad ¨¢rabe que posee un tercio del t¨¦rmino municipal. Tambi¨¦n deber¨ªa opinar as¨ª Francisco Franco, que cazaba por estos lares tras el Consejo de Ministros de los viernes. La sociedad Valdefuentes -ligada a los Franco- pose¨ªa casi la mitad del t¨¦rmino y a¨²n conserva parte de sus propiedades.

Del pasado de Arroyomolinos s¨®lo queda una torre de 1478 que alg¨²n d¨ªa puede ser centro cultural. Hace tiempo que desaparecieron los siete molinos que dieron nombre al pueblo. Queda el degradado arroyo de los Combos, que completa su denominaci¨®n.

Todos los proyectos y promoci¨®n inmobiliaria est¨¢n encaminados a superar el list¨®n de los 2.000 habitantes que le dan derecho a conseguir servicios y equipamientos que palien sus carencias. Lo primero, un centro de EGB para los alumnos de segunda etapa. El alcalde tiene prisa por promocionar Arroyomolinos: "Es tranquilo, c¨®modo, tiene ¨¢rboles y arroyo".