Toreros tragic¨®micos

Hubo nueva protesta en la sala por la tardanza de 80 minutos respecto a la hora se?alada para la presentaci¨®n de Los Toreros Muertos, banda madrile?a que ha editado su primer ¨¢lbum, 30 a?os de ¨¦xitos. Desde que interpret¨® aquello de Ya est¨¢n aqu¨ª los toreros muertos, este tr¨ªo abierto a otros m¨²sicos no perdi¨® ni la atenci¨®n ni la sonrisa.Pablo Carbonell, cantante, ironiza sobre el fatalismo del individuo y resulta gracioso, festivo, chistoso. Comunicador poco corriente, de extra?o y ganso humor, ha logrado dominar la ejecuci¨®n de los papeles de su propio repertorio en escena al son de las muchas m¨²sicas que sus compa?eros tocan.

Una aportaci¨®n

Se mueve en bailes y saltos espasm¨®dicos m¨¢s que voluntarios, a ritmos c¨®micos de salsa, de funk, de twist, de ska, de rock en definitiva. A veces parece que sus fraseos son forzados, quiz¨¢ en favor de las historias y en detrimento de las melod¨ªas, pero se entiende sin esfuerzo alguno cada palabra que entona, y alcanza al p¨²blico. A la frase de "y es que soy..." invitaba con el micr¨®fono a la respuesta instant¨¢nea del coro popular que gritaba: "?Un animal". Y luego dej¨® que los espectadores fuesen ellos mismos quienes iniciasen Mi ag¨¹ita amarilla, curiosa narraci¨®n sobre el ciclo de l¨ªquido inmundo que ha cuajado intensamente en la audiencia.Es curioso que sin tratarse de su objetivo art¨ªstico preferente, al menos aparentemente, la m¨²sica riqu¨ªsima en armon¨ªas y estilos de Los Toreros Muertos pueda llegar a ser una de las aportaciones m¨¢s v¨¢lidas y originales del panorama rockero espa?ol, gracias a la participaci¨®n de los m¨²sicos arreglistas, que completan en directo un espect¨¢culo muy vivaz.

Todos se esfuerzan por que la m¨²sica pierda su misi¨®n de esclava -puede dar cierta impresi¨®n de que a la instrumentaci¨®n no le da tiempo a desarrollarse suficientemente- y en su empe?o ha de encontrar la f¨®rmula equilibrada id¨®nea.

As¨ª realiz¨® una parodia de un Papa Noel paup¨¦rrimo, una versi¨®n muy especial con la melod¨ªa de El tamborilero que se transforma en punk, como ya se ha hecho con otro cl¨¢sico, My way, por Sex Pistols y Nina Hagen. Ah¨ª se not¨® que la letra se hab¨ªa escrito tras la melod¨ªa, que el resultado sal¨ªa favorecido. Tragic¨®micos, alegres y seguros, Los Toreros Muertos tendr¨¢n gracia por mucho tiempo.