Los modestos que triunfaron en 1986 quieren ser figuras en la pr¨®xima temporada

Los pocos toreros que comenzaron la temporada de 1986 en condici¨®n de modestos y lograron triunfar, quieren rentabilizar sus ¨¦xitos y ser figuras en 1987. Lucio Sand¨ªn, Antonio S¨¢nchez Puerto, Jos¨¦ Luis Galloso y Juan Mora, principalmente, que iniciaron su temporada con escasos contratos, sal¨ªan cada tarde a jugarse la vida para ganarlos, lejos de las exclusivas en que se amparan la mayor parte de las figuras y que les llevan a la monoton¨ªa y la abulia.

S¨¢nchez Puerto logr¨® salir por la puerta grande de Las Ventas el pasado mes de agosto, pero despu¨¦s s¨®lo tore¨® tres tardes: "La fiesta es dificil e injusta y el modesto no siempre saca partido inmediato del ¨¦xito". No obstante estudia varias ofertas de apoderamiento para 1987: "Es una novedad para m¨ª, que siempre he peleado en solitario. Lo ¨²nico que pido es que se me haga justicia en 1987".Lucio Sand¨ªn bati¨® en 1986 su r¨¦cord de actuaciones al hacer el pase¨ªllo 23 tardes, 15 m¨¢s que el a?o anterior. Estudiante de segundo curso de Optica y hombre culto y alejado de la imagen t¨®pica de los toreros, tiene palabras de autocr¨ªtica para sus continuos fallos con la espada. En esta l¨ªnea, tampoco le importa hablar del dinero, tema tab¨² para la mayor¨ªa de sus compa?eros: "He ganado este a?o m¨¢s que nunca. Lo he invertido en un coche, en cinco trajes de luces y a¨²n me sobr¨® algo para vivir dignamente".

El torero posee otro r¨¦cord, que considera digno del Guinness: desde sus tiempos de novillero ha actuado en Madrid y Sevilla un total de 33 tardes... sin cortar ni una oreja. "Pero en cambio convenc¨ª a ambas aficiones", se?ala

En estos d¨ªas, Sand¨ªn prepara sus ex¨¢menes, por lo que no ir¨¢ a Am¨¦rica, aparte de que, en su opini¨®n, aquello ya no es interesante: "Las am¨¦ricas est¨¢n ahora en Espa?a, en cuya pr¨®xima temporada quiero torear alrededor de 50 tardes e intentando matar bien".

Jos¨¦ Luis Galloso super¨® en 1986 el bache que atraves¨® durante varias temporadas: "Ha sido una escalada hacia la cima, que pienso alcanzar el pr¨®ximo a?o, en el que torear¨¦ mucho en las ferias se?aladas, cobrando lo que merezco". Tiene apalabradas corridas en M¨¢laga, Nimes y Bayona.

Galloso tambi¨¦n destaca la importancia de sus triunfos en Madrid: "Fueron muy positivos, es la. plaza en la que me encuentro m¨¢s a gusto". Galloso tampoco se desplazar¨¢ a Am¨¦rica: "All¨ª no se gana dinero ni prestigio. Me quedar¨¦ en Espa?a preparando mi lanzamiento definitivo corno figura, lo que nunca deb¨ª dejar de ser".

Juan Mora hizo el pase¨ªllo 23 tardes en 1986, cifra que ni so?aba alcanzar: "Pero sucedi¨® que Madrid se me dio muy bien en las tres corridas que tore¨¦ y ah¨ª despegu¨¦. Despu¨¦s vinieron mis triunfos en Sevilla".

A. diferencia de sus compa?eros, Mora ve interesante la temporada americana, donde actuar¨¢ varias tardes: "No s¨¦ los dem¨¢s; a mi me han hecho ofertas y he aceptado". Su nuevo apoderado, Jos¨¦ Luis Marca, le ha prometido que torear¨¢ en Fallas y que estar¨¢ muy arriba en el escalaf¨®n. Mora no duda de sus palabras: "En 1987 estar¨¦ entre las figuras, a poco que las cornadas me respeten".

Pol¨¦mica ruptura con Berrocal

Se ha desatado una guerra dial¨¦ctica y jur¨ªdica entre Mora y el que fue su apoderado durante 1986, Jos¨¦ Luis Mart¨ªn Berrocal, bajo cuya direcci¨®n resurgi¨®, quedando con gran cartel para 1987. Pero Mora rompi¨® el compromiso que le ligaba a Berrocal para marcharse con Marca.

"Berrocal, al que reconozco su labor conmigo, me enga?¨®", dice Juan Mora. "Le firm¨¦, el pasado marzo, un poder notarial en el que no figuraban cla¨²sulas econ¨®micas, y s¨ª una por la que yo pod¨ªa revocarlo cuando me interesara, que es lo que he hecho".

"Cuando la temporada iba a acabar", a?ade el torero, "me hizo firmar un papel en blanco que, seg¨²n ¨¦l, necesitaba para que le dieran el carn¨¦ de apoderado. Despu¨¦s lo rellen¨® a su gusto, poniendo que era por cinco a?os y con unas cla¨²sulas abusivas. En la Asociaci¨®n de Matadores me dijeron que era tan leonino que, dadas las circunstancias de c¨®mo lo firm¨¦, no ten¨ªa validez".

La versi¨®n de Berrocal es diametralmente opuesta: "Lo que cuenta Mora es mentira. Y, adem¨¢s, deja como mentiroso al notario de Madrid Jes¨²s Franch, ante quien firmamos juntos el contrato de apoderamiento y la escritura". Berrocal nos entrega fotocopias de estos documentos, fechados el 24 de marzo de 1986.

Uno es la escritura p¨²blica de contrato de apoderamiento, con vigencia por cinco a?os, en la que Mora otorga amplios poderes a Berrocal, que se reserva el 15% de Ios honorarios del torero. Otro es un modelo de contrato, cumplimentado, donde no hay ninguna referencia que permita suponer ha sido firmado ante notario.

Seg¨²n una de las cl¨¢usulas adicionales de este documento, si Mora resuelve el contrato sin causa justificada habr¨¢ de satisfacer a Berrocal 20 millones de pesetas. Es la cantidad que reclama Berrocal. "No adelant¨¦ dinero por amor al arte", indica, "sino como una inversi¨®n que nos producir¨ªa beneficios".

Berrocal ve la mano del nuevo apoderado detr¨¢s del asunto: "Marca, que ha hundido a Emilio Mu?oz, quiso llevar a Espartaco de botones de Ojeda, pero aquel fue inteligente y le dej¨®. En vez de quitarme los toreros, m¨¢s valdr¨ªa que se hubiera preocupado de ver los torazos que le echaron a Ojeda en Lima, as¨ª le habr¨ªa evitado la cornada".