Estados Unidos y la CE har¨¢n un ¨²ltimo intento antes del viernes para evitar la guerra comercial

Europa y Estados Unidos fracasaron en el intento realizado durante el fin de semana en Washington para evitar la declaraci¨®n de una peligrosa guerra comercial entre aliados, pero EE UU y la CE no han cerrado del todo la posibilidad de alcanzar un compromiso antes de que, el viernes, entren en vigor las represalias decretadas por Ronald Reagan. "Las posiciones de las dos partes se han acercado, y los contactos se reanudar¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas", inform¨® un comunicado de la Comunidad hecho p¨²blico en esta capital tras seis horas de negociaciones entre Willy de Clercq, comisario europeo para las Relaciones Externas, y Clayton Yeutter, responsable estadounidense para temas comerciales.

"Todav¨ªa creemos que una soluci¨®n es posible, pero estamos disgustados por no haber podido resolver el problema a pesar de habernos aproximado", dijo un portavoz norteamericano. De Clercq regres¨® ayer a Bruselas con una vaga declaraci¨®n de "progresos" y con una propuesta de compromiso, no revelada, que ser¨¢ estudiada hoy por el Consejo de Ministros de los doce. El p¨²blico norteamericano, especialmente los yuppies, la joven burgues¨ªa profesional adinerada -lo que en Espa?a es conocido como la gente guapa-, se prepara para pagar 14 d¨®lares, en vez de los seis actuales, por 400 gramos de queso franc¨¦s brie, o nueve d¨®lares que pasar¨ªa a costar una botella de vino de mesa blanco italiano que ahora vale tres.El mercado espa?ol

Este sector social ser¨ªa el principal afectado por la imposici¨®n de aranceles del 200% sobre exportaciones europeas a este pa¨ªs de quesos, ginebras, vinos francos, brandies, aceitunas y endivias, valoradas en 400 millones de d¨®lares. Estados Unidos trata de compensar con estas represalias la p¨¦rdida para los agricultores norteamericanos del mercado espa?ol de de ma¨ªz y sorgo, cerrado efectivamente desde la entrada de Espar¨ªa en la CE.

Reagan, que el martes anun ciar¨¢ en su discurso del estado de la naci¨®n medidas concretas para aumentar la competitividad de Estados Unidos, es un te¨®rico defensor del libre mercado, pero sufre fuertes presiones del Congreso, en manos de la oposici¨®n dem¨®crata, para imponer medidas proteccionistas. El d¨¦ficit comercial de EE UU en 1986 (170.000 millones de d¨®lares) es econ¨®mica y pol¨ªticamente insoportable, y las medidas dr¨¢sticas para su reducci¨®n ser¨¢n aplaudidas por la opini¨®n p¨²blica.

Europa -y sobre todo Francia, principal productor agr¨ªcola de los doce- se resiste a conceder un tratamiento preferencial a los productos norteamericanos. Washington insiste en la compensaci¨®n por una p¨¦rdida de mercados de acuerdo a las reglas del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT).

Estados Unidos quiere vender a Europa tres millones de toneladas de grano anuales con los aranceles bajos existentes antes del ingreso de Espa?a en la CEE. Hasta entonces vend¨ªa cuatro millones. La Comunidad podr¨ªa subir algo su oferta actual de un mill¨®n de toneladas, rechazada por Washington, y compensar con una mayor apertura otro tipo de exportaciones agr¨ªcolas. Bruselas insiste en que la p¨¦rdida del mercado espa?ol de grano para Estados Unidos est¨¢ compensada por la reducci¨®n de tarifas para las exportaciones industriales norteamericanas a la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica.