El pueblo, con Cory

EL REFER?NDUM sobre la nueva Constituci¨®n filipina ha dado lugar a una afluencia masiva de electores. Los observadores coinciden en que ha sido un fen¨®meno general y que ha superado incluso las previsiones de la presidenta. Con esa alta participaci¨®n, los votos favorables a la Constituci¨®n han alcanzado una mayor¨ªa indiscutible, si bien a¨²n no se dispone de cifras completas al escribir estas l¨ªneas. El n¨²mero de incidentes ha sido r¨¦lativamente peque?o si se tiene en cuenta la situaci¨®n del pa¨ªs. La celebraci¨®n de este refer¨¦ndum, 11 meses despu¨¦s de que Coraz¨®n Aquino tomase el poder gracias a un levantamiento popular apoyado por la mayor¨ªa de los militares, es un paso decisivo para consolidar la democracia en Filipinas.La consulta ha sido un verdadero plebiscito en favor de Aquino. Al votar s¨ª, los filipinos han decidido que complete los seis a?os que la Constituci¨®n fija para los presidentes; es decir, que seguir¨¢ en ese cargo hasta 1992, ya que fue elegida en febrero de 1986, cuando derrot¨® en las urnas a Marcos. A partir de ahora, la presidenta ya no gobernar¨¢ en condiciones de provisionalidad -que serv¨ªan de pretexto a los golpistas-, sino dentro de un marco jur¨ªdico indiscutible.

La aprobaci¨®n de la Constituci¨®n, sin embargo, no tiene efectos milagrosos para resolver los graves problemas del pa¨ªs. En el a?o transcurrido, Aquino ha podido mantenerse en el poder gracias, en no peque?a medida, al apoyo de Estados Unidos y de un grupo de altos mandos militares. Este apoyo supone a la vez una hipoteca a la hora de afrontar algunos de los cambios sociales y pol¨ªticos, que muchos filipinos, entre los sectores m¨¢s humildes, identifican con la idea de democracia. La pol¨ªtica filipina seguir¨¢ en gran parte condicionada por los intereses de los grupos econ¨®micamente privilegiados. La Constituci¨®n tiene un contenido humanista y progresista, pero algunos de sus puntos, como el de la reforma agraria, chocar¨¢n con enormes obst¨¢culos para su aplicaci¨®n.

A pesar de que la consigna oficial de los comunistas era el no, todo indica que muchos de sus simpatizantes han votado s¨ª, sobre todo para apoyar a Aquino frente a los golpistas y a la amenaza de Marcos, Las guerrillas comunistas, que han roto las negociaciones con el Gobierno despu¨¦s de la matanza ocurrida durante la manifestaci¨®n campesina del 22 de febrero, tienen ahora que adoptar una decisi¨®n importante. Si se reanudasen los combates despu¨¦s del 8 de febrero, ello sign¨ªficar¨ªa, de rebote, un ¨¦xito para los militares que consideran imposible negociar con los comunistas. Y en esas condiciones, las dificultades para las reformas sociales y pol¨ªticas ser¨ªan mucho mayores.

En esta nueva etapa de la democracia filipina, con una legitimidad confirmada en las urnas, la presidenta necesita una redoblada solidaridad de todos los pa¨ªses democr¨¢ticos. Espa?a tiene lazos hist¨®ricos profundos con Filipinas, y ello debe aconsejar a nuestra diplomacia un mayor esfuerzo para impulsar, bilateralmente y desde la CE, una pol¨ªtica de colaboraci¨®n con aquel pa¨ªs.