La derrota de los aliados de Hu hace retroceder la reforma econ¨®mica

El triunfo conservador en China, que deja a los aliados reformistas del destituido Hu Yaobang sin defunsa, y a los intelectuales agazapados, ha hecho retroceder las reformas econ¨®micas y pol¨ªticas.Un desalentado funcionario chino dijo recientemente en Cant¨®n: "Es una tremenda victoria para los conservadores. Las manifestaciones estudiantiles fueron la chispa, pero con la econom¨ªa con problemas -inflaci¨®n, hambre en algunas provincias...-, los conservadores ha encontrado otra raz¨®n para atacar las reformas. Estos viejos funcionarios y generales tienen mucho poder. Creen en ese dicho del siglo XIX: "Conocimiento occidental para lo pr¨¢ctico, pero conocimiento chino para lo fundamental". "Creen", prosigui¨® el funcionario, "que pueden traer la tecnolog¨ªa extranjera y mantener fuera todo lo dem¨¢s al deshacerse de Hu y asustar a los j¨®venes intelectuales y estudiantes".

En el Parlamento, algunos han pedido una mayor producci¨®n de grano para evitar un caos social". Estos avisos son una pesadilla para Deng Xiao-ping. No est¨¢ claro c¨®mo Deng saldr¨¢ de lo que Pek¨ªn llama "recientes cambios de personal". La destituci¨®n de Hu Yaobang, su protegido, ha hecho perder la cara a Deng. Pero ¨¦l es un sobreviviente notorio.

Puede ser que los "cambios de personal" refuercen la mano de Deng en el crucial congreso del partido el pr¨®ximo octubre, donde se establecer¨¢ la sucesi¨®n para los cinco a?os siguientes. A pesar de la nueva insistencia china de que a la era de las purgas y contrapurgas ha sucedido un cambio legal ordenado, se esperaba que los preparativos para la reuni¨®n iban a ser tumultuosos, con los conservadores prepar¨¢ndose para derrotar con acusaciones de debilidad y p¨¦rdida de control a los partidarios de Deng. Estos avanzar¨¢n hacia octubre con una postura de dureza.

Zhao Ziyang, el otro principal protegido de Deng, ha asumido temporalmente el cargo de secretario general del partidc). Y es poco probable que lo abandone.

El sucesor de Zhao como primer ministro ser¨¢ seguramente otro seguidor de Deng, como uno de los viceprimer ministros Li Peng o Tian Eyung, o el alcalde de Tianjin, Li Ruihuan. Cuanto antes se lleven a cabo estos nombramientos y se creen nuevos viceprimer ministros, m¨¢s claro estar¨¢ para los chinos que Deng sigue al mando.

El monopolio de la verdad

Recientemente, cuando el presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, visit¨® Pek¨ªn, Deng se vio obligado a confesar que las reformas en la agricultura y la industria, que comenzaron en 1979, estuvieron marcadas por "una prisa excesiva" y que, de ahora en adelante, ser¨ªan "realistas y pr¨¢cticas".Para los conservadores, el verdadero pecado de los liberales burgueses es su desafio a la autoridad del partido. La frase de un chino informado es significativa: "S¨®lo puede haber una verdad en China y el partido est¨¢ aterrorizado por perder ese monopolio".